Una de las armas ofensivas que se esperaba en Weber Bahía Estudiantes era Pablo Gil, un todoterreno de la Liga nacido en Bahía Blanca con una mano prodigia para lanzar desde la tercera dimensión. El martes, ante Argentino, apareció en todo su esplendor. Anotó ocho triples en diez intentos y se convirtió en el arma ofensiva principal (28 puntos) del roster conducido por José Luis Pisani.
Más allá de la derrota, las señales son positivas. Gil analizó lo que pasó y lo que vendrá para el equipo bahiense, que espera las visitas de Argentino y Boca en el estadio Osvaldo Casanova.
-Pablo, tuviste 8-10 en tiros de tres y mostraste un nivel altísimo. Pese a la derrota, ¿Era el partido que necesitabas en lo personal?
-Me siento bien con mi juego, pero tengo claro que, depende cómo se plantee cada uno de los partidos, podré tomar protagonismo o no. El martes (nota: en el partido frente a Argentino en Junín, con victoria para el local 75-70), se dio que estuve derecho con los tiros de tres puntos y lo aproveché yo y el equipo. De todos modos se que no voy a tener el protagonismo que tuve en otros años de Liga, sobre todo por la cantidad de variantes ofensivas que tenemos.
Igualmente no es algo que me preocupe, en el equipo hago muchas cosas que van más allá de anotar puntos, que sirven para hacer mejor al equipo dentro de la cancha. El martes se me abrió el aro a mí y aprovechamos esa situación, sobre todo en el primer tiempo.
-¿Por qué se cayó el equipo después de estar 16 arriba en el descanso?
-Creo que lo principal es la defensa. No lo hicimos en la segunda parte como lo habíamos hecho en el primer tiempo. Además, ellos aumentaron bastante la intensidad y defendieron fuerte en cada una de nuestras ofensivas. Y en el básquetbol, cuando uno gana en defensa, el otro pierde en ofensiva. Lo que les pasó a ellos en la primera parte, nos pasó a nosotros en la segunda.
-Más allá de la derrota, pasa algo interesante en Weber Bahía Estudiantes y es que el goleo está repartido. Un día aparece Federico Aguerre, otro Facundo Giorgi, otro Pablo Gil.
-Seguro, eso es algo muy positivo. Cuando un equipo es inteligente juega para el que está bien en ese momento. Jose Luis (Pisani) siempre nos insiste en eso, aprovechar al jugador que está atravesando una buena situación en ataque. Como está la Liga en este momento, es muy difícil creer que uno puede hacer 20 puntos todos los partidos, salvo Juan (Espil), que es un jugador nacido para ese tipo de situaciones. De todos modos, como decía antes, hay que aprovechar la variante que está encendida en un determinado momento, puede ser Fede (Aguerre), Facu (Giorgi), yo, o cualquier otro compañero en cancha.
-¿Se está dando ventaja por jugar con un único extranjero?
-Seguro, sobre todo para nosotros que decidimos contar con dos extranjeros y no tres, como muchos equipos de Liga. Además de ser un jugador menos en el plantel, en el mejor de los casos es alguien que puede hacer diferencia. Pese a eso, el balance es positivo: ganamos dos y perdimos dos. Y en una de esas derrotas, la del martes, estuvimos muy cerca de ganarlo.
-Teniendo en cuenta el crecimiento del equipo ¿Qué tan importante es ganar ambos partidos en casa?
-Queda claro que, por lo que vimos, se puede ganar o perder con cualquiera. Creo que es fundamental ganar el primero para luego pensar con tranquilidad en el segundo.
-El primero que nombrás será el viernes contra Argentino de Junín, tras la caída del martes. ¿Cómo crees que se va a plantear el juego y dónde tiene que ajustar WBE para llevarse el triunfo?
-Va a ser peleado, sin dudas. Creo que debemos defender como lo hicimos en el primer tiempo del partido del martes contra Argentino en Junín. Así nos sentimos muy cómodos, defendiendo duro e intentando correr en cada una de las oportunidades que aparecen. Tenemos que ser intensos sin la pelota, jugar al límite del foul y aprovechar nuestra localía. Si se defiende bien, el ataque se afronta con más tranquilidad. Ese es el camino.
