Jamelle Cornley llegó a Bahía Blanca el lunes por la mañana y se incorporó de inmediato a los entrenamientos físicos de Weber Bahía Estudiantes en el Gimnasio UNO. “Soy un jugador competitivo, me gusta mucho ganar”, confiesa el ala-pivote de 24 años y 1.96m de estatura, formado en la Universidad de Penn State, cuyo último equipo fue el Cader de Rocha en Uruguay. “Mi mayor virtud es la fuerza, que contrarresta la falta de centímetros”.
Autor:Matías Traversa (mtraversa@pickandroll.net)
En una entrevista exclusiva con el departamento de prensa de Weber Bahía Estudiantes Cornley habló sobre su llegada y lo que puede aportar al equipo dirigido por José Luis Pisani.
¿Qué sabes acerca de la Liga argentina? No la conozco en profundidad, pero sé que es una liga muy competitiva. Tengo muy buenos amigos aquí, como por ejemplo David Jackson (La Unión de Formosa), quien es uno de los mejores escoltas del torneo, y él me habló acerca de la calidad y la competencia de la LNB. En definitiva, no conozco demasiado aún pero soy un buen estudiante de este deporte y espero adentrarme rápido con todo lo que sucede aquí.
¿Qué conoces de Weber Bahía Estudiantes y el proyecto de Pepe Sánchez? Conozco el valor de Pepe Sánchez. Sé lo que es capaz de hacer y lo que ha logrado a lo largo de toda su carrera, los jugadores que ha enfrentado y todo lo que le ha dado al juego. Pero, como decía, soy bastante nuevo y espero investigar para aprender pronto todo lo que me rodea. Siempre estoy aprendiendo, mi misión es entender a todos, el juego de cada uno de mis compañeros.
¿Qué podés decirnos de tu última temporada en la Liga uruguaya? Fue interesante. Es una liga competitiva, y por lo que escuché es similar en competitividad a la de Argentina. Es una liga en la que quería irme con la seguridad de dejar algo, de utilizar de medio para llegar a la Liga Argentina u otros lugares. En definitiva, es una liga que respeto mucho y que le doy mucho crédito por los jugadores que se desempeñan ahí.
¿Podrías describirte como jugador? En primer lugar soy un jugador de equipo. Anoto cuando debo hacerlo, pero antes que nada soy un competidor. Amo ganar, en todos los aspectos del juego. Estoy listo para ayudar al equipo en todo lo que necesite para conseguir el triunfo. Si se necesita anotar, estoy preparado para hacerlo, si se necesita rebotear también. Repito, lo que el equipo necesite que haga, ahi estaré para hacerlo.
Llegas para jugar como ala-pivote, ¿Podés moverte también como alero? La realidad es que jugué la mayoría de mi carrera en la posición de ala-pivote. Aprendí a utilizar mi velocidad para marcar diferencias contra defensores más grandes y altos, como así también aprovechar mi capacidad para abrirme al perímetro cuando hace falta. Mi mayor virtud es la fuerza, que contrarresta la falta de centímetros, me permite defender a quien haga falta y realizar diferentes cosas dentro de la cancha.
¿Qué es lo que pretendes lograr en este momento de tu carrera? Quiero ganar en habilidad. Mejorar en ese apartado, como así también entender bien cómo juegan los profesionales aquí en Argentina como en otros lugares del mundo. Soy un estudioso del juego, y quiero ser el mejor de todos de ser posible.
¿Cuál fue el mayor pasaje de tu carrera y tu mejor logro? Mi año como senior en Penn State fue lo mejor, allí gané el premio MVP. Fue, además, uno de los mejores momentos de mi carrera en materia de triunfos, de ganar. En el básquetbol colegial sólo dos equipos tienen esos logros, el campeón del torneo NCAA y el campeón del torneo NIT. Pudimos ser uno de esos equipos y ese concepto del triunfo es el que quiero extender aquí en mi estadía con mi nuevo equipo.