La calidad intacta

Un golpe de efecto. Eso fue la victoria de anoche de Obras Sanitarias sobre Peñarol. El mal comienzo del equipo porteño es propio de un equipo en formación, pero con visos de futuro se puede augurar que el equipo carece de ciertas herramientas que lo condicionan.

No obstante, como no existe el equipo ideal o perfecto, Obras Sanitarias demostró anoche que puede suplir con el talento de sus componentes las fallas estructurales. Alloati es el único jugador que busca resolver en el poste bajo, jugando de espaldas al canasto. El equipo de Carlos Duro, básicamente jugó 40 minutos de frente al aro y metió 95 puntos para ganar en una cancha difícil.

Sucede que Peñarol, que posee dos buenos pivotes, como Leiva y Reinick, terminó por hacer lo mismo. Y fueron dos espejos mirándose. Abriendo espacios con rompimiento, buscando dinámica en ofensiva e imponiendo los tiros lejanos al canasto como solución. Ninguno de los dos frenó el balón y Obras terminó sacando diferencias con la tremenda noche de Bruno Lábaque (siempre aparece en las difíciles) y el retorno de Maurice Spillers que hizo puntos clave.

En el primer cuarto Peñarol y Obras se golearon en una catarata de puntos. Fue 26-24 para el local. Ambos empezaron lentos y erráticos pero los suplentes le dieron vida al partido. Marcos Mata (dos dobles y un triple), Bruno Lábaque (también dos dobles y un triple) y Borrel (un triple) trajeron gol y dinámica desde el banco.

Obras probó con defensa zonal por un rato pero Peñarol trabajó bien con Leiva (3/3 en dobles). La diferencia era exigua en la cancha.

En el segundo cuarto con la rotación, el equipo de Sergio Hernández se desilachó, perdió claridad. El pibe Campazzo, Diez, Legaria y Reinick junto a Mata o Vega intentaron hacer un equipo defensivo, pero no lo lograron, por el contrario, la brillantez que Peñarol traía en ataque se esfumó.

El juego de rompimiento y descarga de Obras derivo en tiros abiertos y francos de Spillers (un triple) y Oroná (dos triples).La defensa de Peñarol ensayó una presión todo el campo para recuperar el balón y pesar de las cinco pérdidas del rival, no logró transformarlas en gol. La salida de Leiva (con dos faltas) dejó sin referencia la pintura milrayitas y el regreso de Leo fue el único que le dio un poco de gol (7 de los 13 puntos del cuarto).

En el tercer parcial las acciones se equilibraron. El quinteto titular de Peñarol retomó su protagonismo y apareció Woodward (11 pts) quien había anotado solo uno en todo el primer tiempo. Obras no lograba corregir el tema de las pérdidas (sumó 6 más en el parcial) pero disfrutó de un Spillers intratable (3 dobles y un triple) para mantenerse con vida a pesar de perder el cuarto 22-18.

En el último segmento la ventaja siempre la dominó la visita en el orden de los 5 a los 7 puntos. Fue un cuarto que se dio a todo gol (24-30) y Obras sacó chapa de su cuarteto más jerarquizado. Se destacó Bruno Lábaque para manejar los hilos (5 pts) ayudado por la aparición de Borrel (10 pts y dos triples). Pero Espil (6 pts) y Gaby Fernández (7 pts) fueron muy importantes. La personalidad que tuvieron para encarar el terreno decisivo del partido fue vital, porque Peñarol lo intentó todo, pero su defensa siempre tuvo una grieta que fue castigada por Obras.

El partido flojo que había jugado Peñarol ante Quilmes se profundizó en la noche de viernes. Porque su defensa no pudo solucionar errores. Se quedó sin foco en el poste bajo y salvo un poco de Marcos Mata, esta vez no hubo respuestas. Tato Rodríguez (17) y Leo Gutiérrez (23) no pueden solucionar todo. Debe hacerlo el equipo.

Un golpe de efecto dio Obras, mirando al futuro, pensando en las instancias decisivas, sospechando que la jerarquía individual, cuando se pone de manifiesto te deja K.O.

Síntesis
Peñarol (85): Sebastián Rodríguez 17, Brian Woodward 12, Sebastián Vega 4, Leonardo Gutiérrez 23, Martín Leiva (x) 12 (FI); Raymundo Legaria 2, Marcos Mata 12, Alejandro Diez 0, Alejandro Reinick 2 y Facundo Campazzo (x) 1. DT: Sergio Hernández.

Obras Sanitarias (94): Fernando Titarelli 5, Juan Espil 14, Maurice Spillers 16, Gabriel Fernández 9, Alejandro Alloatti 9 (FI); Lázaro Borrell 13, Bruno Lábaque 22, Gustavo Oroná 6 y Federico Glinberg 0. DT: Carlos Duro.

Árbitros: Fernando Sampietro y Oscar Brítez.
Parciales: 26-24, 39-46 y 61-64.
Estadio: Islas Malvinas (1200 espectadores - dato oficial)

Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.net)

Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)
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Arjona fue el intérprete, pero Funes le puso la música

En silencio, cuando nadie lo esperaba, Central Entrerriano superó a Boca Juniors por 95-87 y quedó como único líder de la Zona Sur. La rompió Fernando Funes con 31 unidades.

Con Ricardo Arjona sonando de fondo, que colmó las instalaciones de La Bombonera en su segunda presentación en el país, Central Entrerriano infló el pecho y derrotó a Boca Juniors por 95-87 para quedar como único líder de la Zona Sur tras disputarse la tercera fecha de la Liga Nacional.

Pese a que Anthony Lane se cargó con dos faltas personales en menos de un minuto, el comienzo de Central Entrerriano fue auspicioso. La visita, que llegó invicta al Luis Conde, sorprendió con una ráfaga de 5-0; aunque los xeneizes despertaron rápidamente y de la mano de Cedric Moodie y Derrick Alston tomaron el control de las acciones con un feroz parcial de 11-2.

El cuarto inicial fue muy parejo. Boca siguió al frente gracias a Alston (10 puntos con 5/6 en dobles); aunque Central con Fernando Funes y jugando un básquet muy intenso y de mucha rotación de personal nunca perdió de vista a su rival.

El local estuvo efectivo (10/17 en dobles y 4/5 en tiros de tres), gozó de muchas chances de segundo y tercer tiro (5 rebotes ofensivos) y cerró un primer cuarto a puro gol con un triple de Moodie desde mitad de campo para elevar el tanteador a 33-26.

El interesante momento ofensivo de Boca coincidió con un flojo transitar defensivo de Central. El rojinegro ofreció desconcentraciones y los dirigidos por Pablo D´Angelo no perdonaron para escaparse por 39-26 con una corrida de 6-0 en 2:56, que obligó a Eduardo Cadillac a pedir un tiempo muerto.

Con el correr de los minutos Central recobró su firmeza inicial. Scott Cutley aportó aire desde el banco; mientras que Funes siguió gozando de aciertos en ataque (15 en el cuarto para llegar a 25). La defensa visitante recuperó balones y Boca ingresó en el nerviosismo colectivo al sumar faltas que derivaron en lanzamientos libres para su rival.

Los entrerrianos corrieron la cancha, creyeron en su potencial y, de perder por doce (40-28), cerraron el primer tiempo abajo por la mínima (51-50) ya que Moodie volvió a clavar otra bomba sobre el sonido de la chicharra.

El parate del entretiempo pareció molestar a ambos equipos debido a que los errores en el traslado del balón y los yerros a la hora de lanzar al aro fueron una constante. En 5 minutos del complemento el parcial fue de 7-7, con un Central que velozmente ingresó en penalización.

Los dirigidos por Cadillac impusieron el ritmo. El Tolita condujo a gusto y el rojinegro, que no lo tuvo a Gastón Torre por un problema en el tobillo, se puso en ganancia por 69-67 con sólo diez minutos por delante.

El último cuarto fue jugado a matar o morir por los dos equipos; aunque Central fue más inteligente y en menos de 180 segundos puso en penalización a los xeneizes.

Alston dejó de gravitar en ambos tableros y el funcionamiento boquense dependió exclusivamente de Moodie y Míkulas. Por su parte la visita no se apuró, fue inteligente y abasteció a su hombre mejor ubicado para marcar puntos.

Así surgieron Cutley, Cadillac, Lane y Burgos. Todos acompañaron a Funes, el héroe de la noche, que se despachó con 31 unidades.

Aunque para ganar, la visita antes debió sufrir. Boca no se entregó y se puso a 5 (80-85 a 2 minutos), pero el rojinegro despertó y con viveza celebró el triunfo para mantener el invicto y quedar como único líder de la competencia.

Síntesis
Boca Juniors (87): Nicolás Aguirre 13, Cedric Moodie 25, Sebastián Castiñeira 2 (x), Gabriel Míkulas 18, Derrick Alston 12 (FI), Marcus Green 4, Nelson Ingles 2, Mariano Fierro 8, Fernando Martina 3. Entrenador: Pablo D´Angelo.

Central Entrerriano (95): Cristian Cadillac 5, Fernando Funes 31, Anthony Lane 19, Lewis Fadipe 3, Alejandro Burgos 9 (FI), Eduardo Calvelli 8, Scott Cutley 19, Agustín Pirovani 0, Sebastián Cabello 1 (x), Lucas Arn 0. Entrenador: Eduardo Cadillac.

Parciales: 33-26, 51-50 y 67-69.
Árbitros: Alejandro Chiti y Mario Aluz.
Estadio: Luis Conde.

Juan Manuel Rodríguez (jmrodirguez@pickandroll.net)
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