Como pan casero

La construcción de una localía firme parece ser una premisa en todos los equipos de punta en esta edición de la Liga Nacional, donde la paridad de fuerzas es un denominador común. “De local no se puede perder” parece ser la máxima escrita en cada vestuario.

Peñarol edifica su localía con contundencia. Ayer dominó el primer tiempo y luego cayó en una maraña de errores adelante que propuso la visita con su defensa. El partido se hizo cortado, lento, trabajoso para los dos. Mientras el equipo de Sergio Hernández trató de ordenarse y respondió con gol en diferentes vías, Unión apoyó el juego en sus tres desequilibrantes foráneos y cerca estuvo de apurar la victoria.

El primer cuarto fue muy parejo, con Peñarol abusando del tiro exterior por carencia de rompimientos y sin poder pasarla la bola a Leiva. Lo hicieron tres veces y el pivote respondió dos veces con sendos dobles. Lamonte comenzó a mostrar de apoco sus credenciales de goleador: le dieron poco el balón, pero la que tocó fue a parar a la red.

En tanto Unión estaba pasado de revoluciones con su juego perimetral (2-9 en triples) y sumaba solo con sus tres foráneos. Schattmann forzó todo y cada uno de los tiros que tomó, pero compensó con tres penetraciones y asistencias. Al menos esas acciones le dieron vida ofensiva a su equipo. Luego de empatar en 16, Peñarol cerró mejor y se llevó el cuarto por cuatro (20-16).

En el segundo segmento los dos equipos rotaron mucho el banco, el partido entro en un remolino donde Peñarol sacó la mejor tajada. El equipo de Sergio Hernández hizo gala de un banco de suplentes más largo y equilibrado y apareció un descomunal Facundo Campazzo que se adueño del juego, metió 11 puntos en el parcial, dio 2 asistencias y aprovechó la doble base con Legaria, ante el descanso de Lamonte.

Con un parcial extendido de 11-0 el local se escapó por primera vez (27-16) hasta tomar los 14 puntos de distancia (41-27) promediando el cuarto. Unión se quedó sin gol, teniendo al menos una virtud en cambiar el eje y buscar más cerca del aro, provocando faltas. En el primer cuarto no lanzó libres y en el segundo si (7/13). Ron Selleaze tuvo que marcar a Leo Gutiérrez ante la doble tempranera falta de Mc Farlan, pero el técnico Osvaldo Arduh decretó una zona cajón a Leo Gutiérrez y Peñarol respondió con dos triples seguidos. El primer tiempo se fue con una buena ventaja para el local de 49-34.

El segundo tiempo fue de la visita que ganó el tercer (23-17) y último cuarto (26-24). Para ello deberíamos medir la siesta que se tomó el local y las virtudes del visitante. Unión abrió con un parcial a favor de 9-0 y de un salto se puso en juego (49-43). Peñarol todavía con su equipo titular en cancha no daba pie con bola. Perdía balones, tenía a un desconocido Tato Rodríguez que no “encontraba” el partido, mientras Leo Gutiérrez siquiera tiraba al aro. Lamonte solito se encargaba de tirar del carro de la ofensiva.

Los de Sunchales aprovecharon un equipo bajo, donde Selleaze iba de ala pivote al lado de Williams y con la versatilidad del pibe Juan Brussino, la polenta de Isola y un reaparecido Schattmann achicaron hasta ponerse solo un punto debajo (58-57) con un tremendo parcial 9-23.

Hernández había pedido minuto hacía rato pero no volvió a parar el partido, metió cambios del banco y la solución la encontró con Reinick que aprovechó dos rebotes ofensivos seguidos de tiros errados de Lamonte, más dos libres del propio foráneo y un doble de Leiva para cerrar con un parcial de 8-0 y tomar una ventaja de 9 al final del tercer período (66-57).

Al inicio del cuarto final el milrayitas volvió a estirar un poco la diferencia (72-59), pero Unión tuvo como virtud seguir peleando y no rendirse. Volvió Mc Farlan al juego, primero como pivote, manteniendo la estructura de un equipo “bajo”, y luego ya con los otros dos foráneos como laderos. “BJ” se hizo un festín con tres triples y 14 puntos en el cuarto para liderar su ofensiva.

Unión achicó y se puso a 5 puntos (78-73) cuando aún restaban largos cuatro minutos para terminar. Pero como suele ocurrir, Leo Gutiérrez volvió del banco para liquidar la faena. Inmediatamente de ingresado metió un triple y tres tiros libres. Peñarol recobró la dinámica ofensiva y aunque perdió 24-26 el cuarto tuvo mucho gol para aprovechar y defender la ventaja que había sacado.

Síntesis
Peñarol (90): S.Rodríguez 5, K.Lamonte 23, M.Mata 6, L.Gutiérrez 17 y M.Leiva 10 (FI); F.Campazzo 14, A.Diez 5, R.Legaria 0, S.Vega 0 y A.Reinick 10. DT: Sergio Hernández.

Unión (83): G.Martín 0, L.Schattmann 7, R.Selleaze 17 (x), W.McFarlan 23 y J.Williams 14 (FI); F.Sahdi 3, E.Ruiz 4, J.I.Brussino 5, M.Isola 10, W.Storani 0 y S.Uranga 0. DT: Osvaldo Arduh.

Parciales: 20-16, 49-34 y 66-57.
Árbitros: Juan Fernández-Javier Mendoza.
Estadio: Polideportivo Municipal.

Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.net)
Crónica: Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)

Boca lo definió en el cierre

Hubo que esperar hasta la chicharra final para conocer la definición del partido. Allí, Leandro Masieri realizó desde la esquina izquierda un disparo de tres y la pelota salió prácticamente de adentro. La conversión servía para que los paranaenses forzaran un tiempo suplementario, pero finalmente la victoria quedó para el local, Boca Juniors, por 75 a 72.

El arranque de Sioni fue arrollador. Borró completamente a su rival y logró una clara ventaja de 11 puntos (6 a 17) en muy poco tiempo de juego. Sin embargo, Boca ajustó en defensa y de la mano de Gabriel Mikulas y Cedric Moodie fue encontrando vías claras de gol. Fue así que emparejó en las acciones y achicó a 4 la desventaja en el final del cuarto inicial (19 a 23).

La levantada de los Xeneizes y la decaída de los paranaenses se trasladó al segundo chico. Los locales pasaron al frente promediando el cuarto y con dos triples consecutivos de Moodie obtuvieron 10 de distancia (41 a 31). Era un momento complicado de Sionista que se fue al descanso largo abajo por 11 (47 a 36).

La situación para los paranaenses se pusieron más difíciles cuando su adversario se alejó a 16 en el tercer cuarto (59 a 43). Pero allí comenzó a producirse la reacción de los visitantes que arribaron a los 10 minutos decisivos con chances de revertir la historia (66 a 57). Y casi lo logra, ya que a 45 segundos del epilogo y con un doble de Daniel Hure alcanzó la igualdad en 71.

En la siguiente jugada Brian Woodward sobre la chicharra de los 24 segundos de posesión recibió falta cuando intentaba tirar desde los 6.25. Fue a la línea de libres y conquistó dos de tres (73 a 71). A siete segundos y seis décimas del final fue el momento de ir a la línea de Chuckie Robinson, quien erró el primero y convirtió el segundo (73 a 72). El DT local solicitó minuto y a la salida Nicolás Aguirre fue interceptado con infracción. El base marcó los dos libres (75 a 72). Fue el momento del tiempo muerto del coach visitante para armar la jugada, reponer de mitad de cancha e intentar que su equipo consiga la prorroga. Con seis segundos y ocho décimas por delante, Sionista buscó el tiro de tres que fue ejecutado por Masieri, pero con la mala suerte que el balón salió prácticamente de adentro del aro.

Síntesis
Boca (75): N.Aguirre 6, C.Moodie 26, B.Woodward 15, G.Mikulas 17,F. Martina 4 (FI), N.Ingles 3, M.Fierro 4, S.Castiñeira 0. DT: Pablo D´Angelo

Sionista (72): L.Cequeira 18, J.Martinez 4, C.Dixon 13, A.Zilli 7, C.Robinson 13 (FI), D.Hure 4, J.Boston 2, L.Masieri 3, R.Iglesias 0, M.Fioretti 8, J.Bergel 0. DT: Sebastián Svetliza.

Parciales: 19-23, 47-36, 66-57, 75-72.
Árbitros: Roberto Smith y Oscar Martinetto.
Estadio: Luis Conde.

Foto: Gentileza LNB.com.ar
Crónica: Marcelo Tortul – Prensa Sionista