El quinto juego: La llave del éxito o la perdición luego de un 2-2

Muchas vueltas tienen las finales de la Liga Nacional y su historia. Aún está abierta la chance de Boca de concretar la serie viniendo de un 0-2, algo que sucedió solo en un par de oportunidades. Aún así, hay otra estadística que no tiene contra, al menos por ahora. El ganador del Juego 5 luego de una serie en la cual está igualada 2-2 siempre consiguió el campeonato. Nada ganó en siete encuentros dando vuelta una serie en la cual el estaba match point en contra. Veamos.

Si vamos a la historia, será la serie 16° en la cual tiene al menos seis encuentros. Más allá de eso, en pocas oportunidades se llevó al Juego 5 con la serie igualada 2-2. De hecho, en varias oportunidades un elenco comenzó 3-0 al frente y necesitó de un sexto juego para celebrar el torneo pero con una ventaja anticipada.

Las dos primeras series históricas que fueron a un Juego 6 (ambas con GEPU campeón) tuvo dicha particularidad. El elenco puntano comenzó 3-0, perdió un par de compromisos y terminó ganando 4-2 pero tras los match point iniciales. Hubo luego tres series de 4-3 (95-96, 98-99 y 99-00) pero solo en dos llegaron 2-2 y el campeón ganó el quinto (y clave partido). Lo hicieron Olimpia ante Atenas y Estudiantes de Olavarría ante el griego.

Tanto en la 2002-03 y 03-04 se dieron las particularidades del 0-2 al 4-2. Primero lo consiguió Atenas ante Boca y luego el propio xeneize se tomó revancha al lograrlo ante Gimnasia. Lógicamente, los quintetos y decisivos encuentros se los terminó llevando el futuro campeón tras el 2-2. En la 06-07 también ocurrió lo mismo. Peñarol y Boca se rompieron las localías pero llegaron 2-2 al quinto encuentro. Boca ganó como visitante y luego lo cerró en casa.

En la 08-09 se dio una idéntica situación. Atenas y Peñarol también se ganaron en ambas condiciones, llegaron al Juego 5 iguales, y el cordobés ganó de local para luego repetir en Mar del Plata y ser campeón. En la temporada 2014-15 también tenemos una circunstancia similar. Quimsa y Gimnasia 2-2 con sus localías intactas, el santiagueño ganó en casa el juego 5 y luego lo cerró en Comodoro.

Las últimas dos tienen que ver con San Lorenzo. En la temporada 17-18 y 18-19 chocó ante San Martín e Instituto. En el duelo de santos, llegaron 2-2 al Juego 5, y finalmente los de Boedo construyeron dos sólidas presentaciones para ser campeones. Ante la gloria fue la última serie que fue a un definitivo séptimo encuentro. Se ganaron todos los locales, por ende, San Lorenzo respondió en el quinto de local, se colocó 3-2 y finalmente 4-3.

El quinto juego: La llave del éxito o la perdición luego de un 2-2. Nadie dio vuelta una situación adversa de 2-3. Instituto y Boca ante una supuesta oportunidad de oro en caso de ganar y cerca del abismo en caso de ceder. Un capítulo con mucho en juego, prácticamente un título de Liga.

José Fiebig

@Josefiebig