La segundas partes son buenísimas

Boca le ganó a Estudiantes de Concordia en La Bombonerita, jugando un gran segundo tiempo, tanto defensiva como ofensivamente. Los dirigidos por Narvarte lograron así quedarse con el triunfo 78 a 60, cerrando el 2018 de la competencia.

El inicio del juego fue muy parejo, con un Adrián Boccia que se comenzaba a erigir en una de las vías más fuertes de la ofensiva de Boca en el primer cuarto. Justamente, fue este jugador el encargado de abrir el marcador, que mantuvo la paridad jugados los primeros dos minutos (4-4).

Después de eso, Estudiantes tomó una leve ventaja que le permitió estar arriba en el tanteador (4-7) por algunos segundos, hasta que una parcial de 8-0 en tres minutos a favor del dueño de casa lo llevó a tomar una ventaja de 12-7. A partir de ese momento, el Xeneize manejó gran parte de esos diez minutos hasta finalizarlo arriba en los números (18-17), con 13 puntos del mencionado Boccia.

Torres fue el encargado de llevar a que los de Formosa recuperaran el liderazgo en el marcador, con un doble en el comienzo del segundo cuarto, dejando la historia 18-19. Segundos más tarde, el propio Gonzalo, con otro doble y Vildoza, de bandeja, lograron despegar aún más a la visita, tomando una brecha de 18-23, que más tarde se incrementó hasta llegar a ser de seis puntos (20-26), tras un doble de Torres.

El ex Hispano Americano fue determinante en esa levantada de los entrerrianos, con 14 unidades en la primera mitad para dar vuelta la situación, ganar el segundo cuarto (16-19) y ganar los veinte minutos iniciales 34-36. Aún así, el juego mantuvo el tono de paridad, dejando todo abierto para la segunda parte del encuentro disputado en el Luis Conde.

Sin embargo, después del descanso largo todo cambió. Lo parejo que había sido el primer tiempo, no lo fue en el segundo y Boca hizo todo de forma concisa en ataque, pero sobre todo en defensa para dejar a su rival con un goleo muy bajo.

Boccia bajó su intensidad ofensiva, pero en contrapartida, apareció con toda la “furia” Lucas Gargallo para hacerse cargo de los ataques del “auriazul”. Esa fortaleza para atacar el cesto rival y la capacidad para defender el propio, le dieron a Boca la máxima hasta ese momento, de nueve puntos, con un parcial de 23-12 en el tercer cuarto.

En el segmento final, los dirigidos por Narvarte no desentonaron con respecto a lo hecho en el anterior, mantuvieron su juego aceitado y liquidaron el juego a su favor. Gargallo siguió con su racha en ataque, cosechando 19 puntos en total, mientras que el local sacaba frutos de su efectividad en lanzamientos de campo (29/58-50 por ciento en total y 21/38-55 en tiros de dos puntos) y comenzaba a tomar cifras definitivas en el marcador.

Boca llegó a tomar la máxima que fue de 20 en el juego (78-58 a falta de 1min14seg) manejando completamente el rumbo de un encuentro que fue parejo en el primer tiempo, pero que se definió en los segundos veinte minutos, con una tarea muy interesante del dueño de casa.

Crónica: Juan Pablo Casas
Fotos: Marcelo Figueras - Marcelo Endelli -LNB.com