La victoria ante Regatas sirvió de inyección anímica para la plantilla verdolaga y su cuerpo técnico encabezado por Álvaro Castiñeira quien no elude el momento actual de su equipo. La palabra del entrenador.
El entrenador analizó con nosotros lo que fueron los dos primeros compromisos de su equipo en la gira del norte, faltando aún el choque ante La Unión en Formosa para este lunes. “Fueron dos partidos distintos” comenzaba diciendo. “Con San Martín estuvimos muy mal en el primer tiempo y después levantamos. En cambio con Regatas estuvo9 mas parejo, jugamos todo el partido. Hubo errores por ambos lados y cuando nos sacaron la ventaja el equipo sacó fuerzas y pudimos quebrarlo”.
Uno de los puntos donde se ha ido trabajando en r fueron los cierres. Y en esta oportunidad, no solo cerró bien sino con carácter para dar vuelta una historia que venía complicada. Sobre el particular el coach reconocía que “el equipo siempre mostró carácter, salvo en contadas ocasiones, siempre hemos podido volver de situaciones malas. Mi equipo siempre batalla y eso está bueno. No necesito depender de uno o dos jugadores sino que dependemos del equipo. Puedo depender de todos porque los suplentes también me dan cosas y eso me deja más tranquilo”.
Uno de los puntos preocupantes es el goleo. Sin embargo ante Regatas Ferro anotó 61 puntos en el segundo tiempo. Al respecto Castiñeira sostenía: “la realidad es que nos cuesta anotar. Por momentos dependemos mucho de Maldonado y anoche estuvo muy bien. La lesión no lo dejaba jugar cómodo y anoche pudo hacerlo. También fue importante anoche la aparición de Lucas Arn. SI bien es una dificultad el goleo tenemos otras virtudes que nos permiten estar donde estamos. Salvo éste, hemos ganado los últimos partidos sin pasar los 70 o 75 puntos y eso es una virtud también”.
El hincha de verdolaga hacía años que esperaba volver a la Liga y a ser protagonista de la competición en la cual logró tres títulos. Hay que remontarse a la 1997/98 donde pierde semifinales con Boca para llegar a momentos importantes. Por eso cuando le consultamos para que está el equipo no anduvo con rodeos: “Para lo que el equipo desee. Creo que está para pelear por todo y eso incluye poder salir campeón. Tenemos un equipo que puede competir de igual a igual con todos. Creo que aún es muy temprano para hacer números pero el equipo está encaminado. Nosotros hemos ganado y perdido con San Martín, le hemos ganado tres de cuatro a San Lorenzo y tenemos esa deuda ante Bahía pero ahora debemos enfrenarlos dos veces. Creo que los juegos ante este rival van a empezar a definir para qué estamos”.
La salida de Alvaro Calvo generó esa posibilidad de buscar algún jugador importante para esa posición. Sin embargo no se mostró ansioso el entrenador: “Por ahora no hay nada definido. Estamos muy atentos a lo que pueda aparecer y tenemos muy claro que el que venga debe marcar la diferencia, esto es que tenga puntos en la mano y defensa sin desarmar lo que tenemos. SI es así, bienvenido sea. El plantel está bien y traer por traer no es nuestra intención”.
Finalmente, y antes de despedirse para preparar el entrenamiento antes del juego de lunes, se refería justamente al rival, La Unión: “Es un equipo poderoso. SI bien no está en su mejor momento es casi el mismo plantel que jugó la final de la Liga Nacional. Esta gira es muy complicada para los equipos de la Sur y así la encaramos. Vamos a ver cómo nos estamos recuperando y más teniendo en cuenta que venimos de un suplementario. El equipo está preparado y si jugamos bien tenemos chances de ganar ante, repito, un rival poderoso”.
