Ferro – Quilmes (Semifinales – Conferencia Sur – Juego 5)

Si bien todo el basquetbol profesional está amparado en contenido y sustento, también es cierto que la historia nos demuestra que en un quinto juego decisivo los intangibles influyen de manera decisiva en el resultado. Poco puede aventurarse hacia el futuro cuando se abren varios caminos inesperados. Por lo tanto desandaremos esta previa en los hechos conocidos, en los números, pero sin que sean vinculantes con una idea de partido de esta noche.

Ferro está en un lugar inesperado antes que comience la serie pero muy esperado cuando supo que perdió el primer partido y sobre todo por las formas. Recuperarse del impacto del juego inicial tal vez lo haya logrado con un solo partido ¿cómo? Siendo dominado y sacando empuje, voluntad, orgullo y fuerza para ganar el punto dos. Ahí revivió Ferro. Le costó pero entró de lleno en la serie. Además ese segundo partido se llevó puesto a Lorrenzo Wade que no jugó. A veces tener menos es mejor.

En Mar del Plata Ferro jugó un partido muy bien y el otro fue otra vez sometido a la voluntad del rival. En la lectura rápida podremos encontrar que ganando Ferro hizo 97 y perdiendo hizo 91 cuando de visitante a lo largo del año Ferro fue un equipo de 76.9 puntos en la segunda fase. Casi 20 puntos arriba de su promedio en dos partidos no es casualidad. La serie se puso en esa relación y Ferro debió adaptarse a la situación. Aunque es cierto que en los dos partidos de Ferro el tanteador fue bajo: empate en 70 en el primero (sin suplementario) y 78-76 en el segundo.

La pregunta que se abre es ¿La influencia de factor cancha llevará otra vez el play offs a un juego por debajo de los 80 puntos, o la serie ya cambió de ritmo ofensivo?

Por momentos la defensa de Ferro ha tenido el control de la serie, sobre todo cuando logra frustrar a los veloces perimetrales de Quilmes. Pero esto tiene un riesgo, ninguna defensa puede marcar todo y para poder contener el tiro, Castiñeria determinó “cambio” en el pick directo dejando emparejado a Maldonado y Balbi con los hombres altos de Quilmes. En ese desajuste el base y escolta luchan la posición mucha veces cargándose de faltas.

Además la defensa de Ferro juega tratando de imponer mucho tráfico en la pintura por si Flor o Vildoza logran romper la primera línea y allí aparecen los espacios para Ruiz, Clark, Robinson y Maciel que han tomado ventaja de manera intermitente en la serie. Seguramente el más confiable de todos ellos es el santiagueño Ruiz quien tomó 13/37 en triples en la serie (35.1%) es decir 3.25/9.25 por juego. Y precisamente los juegos que ganó Quilmes fueron los que metió 13 o más triples en el partido.

La lectura que hace Ferro sobre su defensa es controlar a los altos en las caídas y sostener 2 x 1 a Flor y Vildoza, cambiar directo si el grande cae (o se abre) para estar todo el tiempo controlando la amenaza de tiro (Quilmes suele lanzar en 7 segundos de posesión sin problemas). Por esto mismo es que los pasajes que Quilmes más está disfrutando en la serie es con Maciel de 4 (un tirador abierto) y Eslava (que hace muy bien las caídas).

En tanto Quilmes ha tenido particularidades muy destacables en esta serie. Pudo dejar en 70 puntos en el primer juego a su rival pero corriendo de atrás, incómodo y luego lo ganó en suplementario. Bianchelli tomó muy buena lectura de los problemas a pesar de la victoria porque en aquella remontada histórica de 16 puntos en el último cuarto Nacho Alessio tomó 4 tiros solo, propios de los ángulos que más disfruta y los erró. Fue como la tormenta perfecta que sufrió Ferro. Y volver a tentar al destino y la suerte no era lo más recomendable para Bianchelli.

La decisión fue ponerse en defensa zonal para el juego dos y logró quitarle todo ritmo ofensivo a su rival que se hizo un nudo ante la zona. La apuesta salió bien hasta que Ferro (con mucha personalidad) metió 5 triples en el tercer cuarto para volver al juego. Así como el verde se hundió en la zona, también la zona le permitió volver de una desventaja de 11 puntos a puro bombazo. Ferro tomó el riesgo porque no le quedaba otra pero la zona es así: te da soluciones y te condena.

Por eso mismo Bianchelli no la usó en el tercer punto que perdió en Mar del Plata. En ese juego Quilmes sufrió algunos factores externos inauditos, como tener el favoritismo de la serie de su lado. Le queda incómodo al cervecero ser favorito. No tiene problemas con la presión de ganar, asume todos los riesgos, pero venir de banca es una mochila extra que este plantel de maravilla no logra asimilar (no fue armado para eso).

Finalmente en el punto cuatro el equipo marplatense salió con toda la decisión a tirar y pudo agujerear la defensa de Ferro. Tomó vuelo con los triples, y defendió una distancia que llegó a ser de 18 puntos a todo gol. Si bien defensivamente no pudo contenerlo le planteó un partido incómodo desafiando su rival a un duelo de gol y gol. Si bien Ferro dio la cara esa dinámica le queda incómoda.

Por lo tanto, todo lo que se pueda anticipar para esta noche puede ser obsoleto. Las ideas son de continuidad de dominio de Ferro en la zona pintada con Clemente, Hernández y Alessio y del perímetro de Quilmes con Vildoza, Flor y Ruiz.

Y se abren mil preguntas ¿Qué defenderá Quilmes? ¿Va a zona? y de hacerlo ¿Cuándo?. ¿Ferro encontrará otra vez tesoro en su banco de relevos con Tantos, Cuello y Hernández? ¿Quilmes tendrá tanta puntería como en Mar del Plata cuando salga a tirar? ¿Quién será el encargado de controlar a Eric Flor (24.5 en la serie)? ¿Aparecerán Clark (6.0) y Robinson (8.5) en ofensiva?.

Serán 40 minutos de maravilla, para gozar un espectáculo que se llenará de color, para definir un finalista. Dos equipos que persiguen un sueño: Ferro está esperando el pase al mano a mano con San Lorenzo mientras Quilmes quiere regalarse un cierre de temporada histórico y está cerca de lograrlo.

Hora: 21.00
TV: TyC Sports
Árbitros: Pablo Estévez, Diego Rougier y Oscar Brítez
Estadio: Héctor Etchart (CABA)