El equipo de Gonzalo García muchas veces encantó con su juego e incluso llegó a ganar el Súper 4 Circus ante Obras como visitante. Eso le aseguró una temporada más de competencia internacional, pero el fracaso en la Liga de las Américas y la rápida eliminación ante San Lorenzo hizo que todo eso quede en el olvido. ¿Medio vaso lleno o vacío?.
Autor:Leonardo Chianese (@leodeflores)
La previa
El conjunto patagónico venía mostrando una saludable costumbre de mantener una base de jugadores y superarse temporada tras temporada en la tabla de posiciones de la Liga Nacional trayendo pocos pero puntuales refuerzos. Así fue que de la mano de un entrenador confiable como Gonzalo García, el Verde apostó por nombres repetidos como Nicolás de los Santos, Leonel Schattmann, Sam Clancy, Diego Cavaco y Federico Aguerre tras perder la final ante Quimsa.
La vara había quedado muy alta después de la 2014/2015. Haber llegado a la final de la Liga Nacional y conseguir de esa forma la participación en la Liga de las Américas eran un peso extra en la lucha por seguir mejorando. La base se mantuvo y además llegaron dos jugadores de jerarquía como Matías Sandes (relevo de lujo) y Leo Mainoldi (verdugo en la final ante Quimsa), más un Gastón Luchino que aportaba experiencia y minutos de descanso para De los Santos.
La primera fase
El 2015 fue la mejor parte de este Gimnasia Indalo versión 2015/2016. Después de un arranque dubitativo (derrota ante Obras y victoria frente a Ferro de local más una clara caída en Bahía Blanca), el equipo de Gonzalo García no paró más en su lucha por llegar al primer objetivo de la temporada. Clasificarse al Súper 4 Circus era la obsesión inicial para todos en Comodoro Rivadavia y de a poco el Verde fue dando pasos sólidos para llegar al torneo que clausuraría el año en Obras pocas horas antes de la Navidad.
Después de ese 1-2 inicial, Gimnasia Indalo fue una verdadera maquinita. Imbatible en el Socios Fundadores, el Verde ganó 13 de sus últimos 15 partidos de la primera fase y clasificó holgadamente al Súper 4 Circus gracias al 14-4 logrado. Apenas San Lorenzo en la cancha de Obras, y Ferro en Caballito lograron derrotar a un equipo que encantaba a todos con su juego sin estrellas y en el que todos aportaban a la causa. De yapa, el 14-4 le daba un buen colchón para el comienzo de la segunda fase de la Liga Nacional.
El comienzo de la segunda fase
Las primeras dudas aparecieron en diciembre. Quizás porque la cabeza estaba puesta ya en el Súper 4 Circus que se venía, o porque los rivales era nuevos, pero Gimnasia Indalo no fue el mismo en los seis partidos iniciales de la segunda fase. Apenas dos victorias (y especialmente las dos derrotas en el Socios Fundadores) prendieron algunas alarmas en el Socios Fundadores pero lo mejor estaría por venir. El 16-8 quedaba de lado para darle paso al torneo que el Verde jugaría en Obras ante el local, Olímpico y Libertad.
El Súper 4 Circus
Olímpico de La Banda era el primer rival de los patagónicos en el torneo a jugar en Obras. Primero de la Conferencia Sur ante el segundo de la Norte y un partido que tuvo tres cuartos iniciales muy dispares (dos en favor del Verde y uno del Negro) que le permitieron a Gimnasia llegar al segmento final con diez puntos de ventaja. De esa manera, el equipo de García controló los últimos arrestos santiagueños, ganó 70-65 de la mano de sus goleadores (Mainoldi y Clancy con 17) y se metió en la final ante el local.
El Verde salió muy tibio a jugar la gran final y vio como Obras se llevó los veinte minutos iniciales con una clara ventaja de 31-20. Gonzalo García sabía que tenía que meter mano, aprovechó el descanso largo e hizo que Gimnasia Indalo sea otro en el segundo tiempo. Una vez más con goleo muy repartido, el Verde pasó al frente en el tercer cuarto y consolidó la victoria y el título en los diez minutos finales. Sin lugar a dudas, el momento más importante de la campaña de Gimnasia Indalo en esta temporada 2015/2016.
La continuidad de la segunda fase
Antes del sueño continental, Gimnasia Indalo tendría cinco partidos de Liga Nacional durante el mes de enero. Luego del título y el receso, el fixture le entregó al Verde tres duelos en condición de visitante (Concordia, Paraná, Sunchales) y dos en el Socios Fundadores pero de los difíciles (Olímpico y San Martín). Sin estridencias, pero haciendo lo justo y necesario, los de García perdieron afuera y ganaron de local, para emprender la aventura internacional con un digno registro de 18-11 en la competencia doméstica.
La Liga de las Américas
Se sabe que los torneos internacionales, sea el deporte que sea, tienen un gustito aparte. Salir de las fronteras argentinas, en el caso de no haber licitado la sede, genera un mayor desafío y esta era la oportunidad para saber si Gimnasia Indalo también podría llegar a ser una potencia más allá de la Liga Nacional. El grupo era difícil pero para nada imposible. El siempre candidato Flamengo, el débil Águilas de Tunja y el anfitrión Correcaminos de Colón serían una buena medida para el Verde en este primer cuadrangular.
Dos equipos pasaban a la próxima fase y a Gimnasia le tocó lo más complicado de entrada. Una ajustada derrota ante Flamengo lo dejó de cara a la eliminación en caso de perder ante los panameños la segunda noche. Y lo menos esperado llegó. Correcaminos, un limitado equipo panameño con muchos jugadores de pasado en la Liga Nacional, derrotó al Verde y lo eliminó con una fecha por jugar ya que Flamengo también tenía dos victorias. El último triunfo ante Águilas fue solamente para la estadística. Fracaso duro de digerir.
El final de la segunda fase
El calendario de la Liga Nacional no da tregua y eso a Gimnasia le sirvió para olvidar la mala experiencia internacional. El conjunto de Gonzalo García no cayó en un mar de lágrimas, rápidamente encontró el juego que lo había distinguido en el cierre del 2015 y por eso la recta final de la segunda fase fue muy buena. Algún retoque en el plantel como la llegada de Machuca en reemplazo de Luchino, matizaron al equipo de cara a los playoffs. Además, el 1 del Sur le daba ventaja de localía en todas las series sureñas.
Los playoffs
Con mucho descanso para preparar el cruce, a Gimnasia Indalo le tocó un San Lorenzo potenciado tras voltear a Obras y encontrar recambios claves en sus extranjeros. Sin un favoritismo marcado, dividieron victorias en el Socios y eso fue letal para el Verde. Con la ventaja de localía ya perdida, el conjunto patagónico estuvo cerca tanto en el juego 3 como en el 4, pero ninguna de las dos veces lo pudo ganar. Al igual que en la Liga de las Américas, el campeonato se cerraba con demasiado gusto a poco para los de García.
Aspectos positivos
El título del Súper 4 Circus. Puede parecer poco teniendo en cuenta las expectativas creadas tanto en la Liga Nacional como en la Liga de las Américas y el juego brillante que por momentos mostró el equipo, pero Gimnasia Indalo se quedó con el primer título que ofreció la temporada 2015/2016. Tuvo que batallar duro para clasificar, luego derrotó a un peso pesado como Olímpico que ya asomaba como candidato y le puso la frutilla a la torta venciendo el local. De yapa, esa corona lo mantiene en el plano internacional.
El juego del equipo. No se puede negar que falló en partidos claves, pero Gimnasia Indalo muchas veces llenó los ojos a lo largo de esta temporada. Renovándole la confianza a Gonzalo García y a una base que siempre rindió, el Verde potenció el aspecto colectivo y rara vez dependió de alguna individualidad puntual para ganar sus partidos. Ya no será lo mismo en la 2016/2017 porque el equipo sufrirá cambios significativos, pero lo hecho por el Verde en la 2015/2016 es digno de aplausos y hasta de intentar ser imitado.
Lo extradeportivo. Gimnasia Indalo fue uno de los clubes que más rápido entendió el mensaje que se bajó desde la nueva camada dirigencial de la ADC. Si potenciar lo que no tuviera que ver con el juego en sí era la idea, el Verde fue uno de los mejores en prensa, manejo de contenidos en las redes sociales, relación con la comunidad a través de visitas a escuelas u hospitales, mascota, creación de un store, etc. Restará ver si lo puede mantener sin su principal sponsor, pero el primer paso fue dado de gran manera.
Aspectos negativos
Los desenlaces de la Liga Nacional y de la Liga de las Américas. Si bien el Súper 4 Circus quedó en Comodoro Rivadavia es demasiado poco en relación al presupuesto manejado por Gimnasia Indalo a lo largo de la temporada 2015/2016. En el plano internacional no licitó la sede y quedó eliminado en primera ronda. Y en la competencia doméstica también flaqueó en el primer cruce luego de dominar toda la serie regular. Sin lugar a dudas, el lunar más grande de una temporada que dejó muchas otras cosas positivas en la Patagonia.
El desmembramiento del equipo. Se sabe que en una competencia profesional como la LNB si el dinero no sale de sitios como fútbol, empresas, gobernaciones o mecenas, la cosa se hace imposible. No se juega en la máxima categoría del básquet nacional solamente con cuotas sociales, pago de rifas o choriceadas. Y cuando el sponsor principal entra en desgracia o decide abandonar, la paga el club. Más allá de eso, Gimnasia es una marca registrada de la Liga Nacional y seguirá estando, aunque con otro potencial en su equipo.
Los vaivenes de Indalo. Lejos de querer marcar un favoritismo político desde un sitio web especializado en básquet, hay que decir que costó y hasta que dolió ver como en un programa periodístico bisagra para las elecciones argentinas (Periodismo para Todos) se profundizó sobre el emporio de Cristóbal López haciendo particular énfasis en el Verde sureño. Duele ver a un torneo deportivo como la Liga Nacional mezclada en esas cosas, pero como quedó dicho líneas arriba, siempre el club paga por los sponsors que tiene.