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15/01/2019 23:03 | Liga Nacional

Su casa le sienta bien

Después de perder tres partidos consecutivos como visitante en el comienzo de 2019, Instituto se recuperó y le gano a Olímpico de La Banda por 79 a 70, con una gran tarea de Luciano González, que aportó 22 puntos en el juego.
Autor:Juan Pablo Casas (@JPabloCasas)
Su casa le sienta bien

Debió volver a casa para reencontrarse con la victoria. Eso hizo Instituto esta noche en una nueva jornada de la Liga Nacional en el Sandrín, ganándole a Olímpico de La Banda por 79 a 70. La Gloria no la pasó bien en el primer cuarto, pese a comenzar mejor, pero pudo imponer sus condiciones en la segunda parte del juego.

Instituto tuvo un mejor comienzo del partido, con dos conversiones de Pablo Espinoza bien cerca del aro, tomando las primeras opciones ofensivas más confiables para los dirigidos por Facundo Müller. A pesar de este arranque, Olímpico logró encontrar respuestas en los lanzamientos de larga distancia (cuatro en ese segmento), para emparejar las acciones y así escaparse en los números, con un buen surgir de la mano de Machuca y Solano (seis y cinco unidades respectivamente), escapándose en el marcador hasta tomar una diferencia de nueve puntos (7-16).

Esa situación llevó al entrenador local Facundo Müller a pedir tiempo muerto para reordenar las piezas dentro del rectángulo. Después de ese pedido, La Gloria limó un poco esa diferencia, afinando por momentos la dupla Whelan-Amicucci, que llegaba desde el banco de relevos, más seis puntos de Luciano González.

Al margen de esto, Olímpico mostró signos de ser más aguerrido en la defensa, aceleró un poco y tuvo mejor cierre del primer cuarto. Los primeros diez minutos quedaron para los de Capelli 18-24.

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Ya en el segundo cuarto, Instituto logró encontrar variantes, de la mano de la conducción de Whelan para abastecer a sus compañeros y también aportando puntos en un ataque cordobés que de a poco lograba salir de su letargo. Olímpico tomó la máxima de once puntos, pero los de Müller bajaron rápidamente esa diferencia, no sólo por lo hecho del lado del cesto rival, sino también en el sector propio.

Con zona-presión, Instituto pudo controlar a un rival que bajaba sus números en la ofensiva y que caía en errores y pérdidas, situación que lo llevó a no ser tan claro a la hora de atacar el metal cordobés. El equipo albirrojo, por su parte, no podía imponer condiciones en la zona interna, por tal motivo, se dedicaba a mover la pelota con criterio, hasta encontrar al hombre mejor ubicado desde posiciones alejadas del aro o con rompimientos para conseguir puntos.

De esta manera, el bando cordobés anotó un parcial de 22-16, con diez puntos de Espinoza, anotando dos triples, para que el marcador global quedara empardado en 40 al término de los primeros veinte minutos.

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La vuelta de vestuarios mostró un panorama similar al de la primera parte, sólo que todo en el tercer cuarto. La primera porción de ese segmento fue para la visita, que anotó un 0-4 (cuatro de Massey) para escaparse en los números en ese tramo, pero el dueño de casa rápidamente emparejó las acciones, manteniendo la paridad de las acciones.

El juego mantuvo esa dinámica, hasta que el bandeño volvió a escaparse a falta de 2min35seg (48-55), tras un doble de Guzmán, controlando la situación y llevando al anfitrión a perder seis pelotas en ese acto (totalizando 13 hasta ese momento). A partir de allí, la remontada “gloriosa” fue total, para remar y logra estar otra vez al frente, marcando un 8-0, con aporte de cuatro puntos de González, dos de Amicucci y dos de Reyes, para tomar el control por la mínima 56-55, sobre la chicharra.

Su casa le sienta bien

En los diez minutos finales, el equipo cordobés debió esforzarse para evitar que Olímpico pudiera hacer peligrar su liderazgo en el marcador. Instituto dominó los recobres (33 a 25 totales) y revalidó lo hecho defensivamente sobre el cierre del cuarto anterior.

La Gloria sólo le permitió anotar 15 puntos a los de Capelli y llegó a tomar una diferencia de +10 (67-57 a 5min48seg para el final), brecha con la que trabajó desde ese momento hasta el final del juego, apoyado ofensivamente en el ataque de González, con 22 puntos, el hombre destacado del juego, secundado por Amicucci y Espinoza, con 12.

De esta manera, Instituto se recuperó después de las tres derrotas consecutivas fuera de casa en el comienzo del año y sumó un nuevo éxito en el Sandrín 79-70, pensando nuevamente en una gira en esta competencia.

Su casa le sienta bien

Crónica: Juan Pablo Casas (@JPabloCasas) - Pick&Roll
fotos: Gentileza Diego Roscop / LNB.com

»Carlos16/01/2019 02:47
Los dirigentes de Olimpico dijeron por cadena nacional que stanic habia gritado faltado el respeto sus compañeros pues bien señores se equivocaron de cabo a rabo pues quien maneja olimpico hoy nadie, los muchachos juegan dos cuartos y se van de viaje el 2do termino 40 a 40 y chau partido quien falla ahi ?
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»Juan Manuel16/01/2019 12:49
Al Dt. no se le cae una idea. Se "empecina" con algún jugador en la cancha y por mas que la esté pateando no lo saca.
De terror para hacer los cambios.
Y siguen jugando para sus planillas personales, salvo 2 o 3 jugadores que pasan la pelota.
Dormidos abajo del aro, pierden pelotas por hacer pases apurados...en fin.
Seguramente Maxi tendría sus razones para putear a unos cuantos en el vestuario.
Anoche, al igual que con Atenas, lo perdimos en el último cuarto.
Massey no es el mismo de antes, está muy estático.
Solano mete...pero tira para 100.
Y Guzman antes de querer hacer su acto de circo en una volcada, mejor que primero se asegure que la pelota entre al aro.
En fin...tendremos que ir acostumbrándonos que van a seguir jugando asi.
Una lástima, porque hay buenos y nuevos jugadores de esta temporada en el equipo y estan muy desperdiciados por el Dt.
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»Kebueno16/01/2019 13:32
No es olímpico de la banda...son la banda de olímpico...un desastre....anoche fui a verlos...mama mía, cada cual juega su partido
Responder
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»Thomás16/01/2019 21:57
Y la impotencia que te produce ver a algún jugador que se la pasa pidiendo la pelota y el que la tiene hace la suya y obviamente que la pierde, se la roban o tira cualquier verdura.
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