Cuando todo se va en una sola bola

Más de una noche se arruinó el verano cuando un Croupier cantó “colorado el 25!” y todo el dinero de las vacaciones se fueron con el negro el 20. Esa bola, solo esa bola te arruina. En Sunchales no hay casino pero Libertad fue arruinado por la última bola.

De todos modos aquí daremos cuenta de una serie de “errores” que lo condenaron y que no precisamente se detienen en el triple de Alex. Veamos

Valtinho recupera la pelota por el costado izquierdo de la defensa, la toma con dos manos, da un pique al balón para salir en contraataque, todo en la misma jugada, con la inercia que traía del corte al balón, pisa la línea. El árbitro argentino Fernando Sampietro pita y le da la reposición en ataque nuevamente a Deportes Castro, pero en vez de darle una cuenta nueva de 24 segundos lo deja apenas con 4 que era lo que le faltaba para lanzar al canasto, argumentando que Valtinho al recuperar el balón no llegó a tener posesión del mismo.

Está más que claro que se trato mucho más que de un corte a balón con un cachetazo y tuvo posesión. Los chilenos demostraron su inexperiencia internacional y su “apichonamiento” al no reclamar. Los que reclamaban eran los argentinos, algunos plateístas y dirigentes, pero nada cambió. De la reposición Cornelius Mc Fadgon toma un impresentable tiro de tres puntos ahorcado por el reloj que no tocó el aro. He aquí el primer gran error del cierre, porque Deportes Castro ganaba por uno y en el último minuto una nueva cuenta de 24 le hubiese permitido cerrar mejor.

Luego, en la anteúltima jugada. Un error más grosero y más evidente. Quedaban 12 segundos, ganaba por uno los chilenos. Estevam le pone la cortina a Alex para que pase y se lleva puesto al marcador de Alex en una clara cortina en movimiento que luego del partido tuve la oportunidad de volver a ver. El árbitro uruguayo Gabriel Baum decide ignorar esa cortina y que siga el juego. Allí lo conocido: Alex clava el sablazo a falta de 2 segundos y 9 décimas.

El técnico chileno, Rodolfo Barrios, pide minuto, reponen desde la mitad de la cancha, la pelota va para Velazquez, que sin ventaja y apretado toma un triple sobre la marca de Alex, que lo toca en la cintura y arriba. No fue una falta grosera o brusca, pero lo fue. La pelota sale, los árbitros desoyen reclamos (únicamente de los argentinos) porque para los Jugadores de Deportes Castro y su técnico haber estado tan cerca de la hazaña era tan meritorio como haberla cumplido.

Para ellos fue solo una triple, para Libertad significó quedarse afuera del Cuadrangular final. Tres acciones finales, consecutivas y que podrían haber favorecido al equipo Argentino que no jugaba. Pero lo que no se cobró pasó al olvido. Salvo para los que tenemos memoria.

Sunchales Internacional

Con la experiencia de la final de Liga Nacional vivida hace 7 meses atrás, la organización local no tuvo fisuras. Impecable. Desde la serie con Quimsa quedaron los lineamientos que la prensa y el público pueden disfrutar. La sala de prensa, el Wi Fi en todo el estadio, la atención en las cabinas y en los pupitres, el respeto por los horarios, las conferencias para los entrenadores y jugadores post partidos, las planillas. Con gente predispuesta y amable, como el jefe de Prensa Lucas Gaggi, todo se hizo más sencillo.

Algo para tener en cuenta, por fin un lugar donde los que tienen credencial pasan, los que no se quedan del otro lado. Este simple hecho del control hace que todos estén donde tienen que estar. En la Argentina estas cosas nunca pasan. En este Cuadrangular Internacional al menos en ese aspecto se dio un paso adelante.

La hotelería fue acorde y se resolvió con el hotel Campo Alegre de Rafaela para los árbitros y comisionados y en el hotel Casic para las delegaciones, salvo Deportes Castro que el primer día paró en el Campo Alegre.

Aunque no es necesario que siempre se brinden catering siempre son bienvenidos los Sandwichs del amigo “Pucho” y su trato cordial merece nuestro reconocimiento. No nuestro abrazo porque es más fácil saltarlo que darle la vuelta.

En el marco del torneo se pudo disfrutar de las instalaciones del Club Libertad, el area de piletas y quincho que son un lujo para la provincia de Santa Fe, con mucho dinero invertido en el tratamiento de las aguas y un cuidado por el espacio admirable. Algunos lujos como el Tobagán acuatico, sombrillas de pajas y sector de parrillas (donde se realizó el tradicional asado de periodistas).

Además fuimos testigos de un hecho histórico para el Club Deportivo Libertad, en este caso compartido con el Club Atlético Unión, tambien de Sunchales. La donación de dos micros, uno para planteles de fútbol y otro para planteles de basquet, por parte de ATILRA (Sindicato de lecheros de la Argentina) para que se trasladen las delegaciones profesionales de los dos clubes. Dos unidades recicladas y con todos los elementos para que viajen muy cómodas las delegaciones. El armado del confort del micro fue concensuado con los protagonistas para que tengan hasta el más mínimo detalle de confort. Pantallas plasmas, MP3, MP4, DVD, 12 camas, para hacer más feliz la estadio en el camino.

La ciudad de Sunchales no era lo que FIBA Américas quería para mostrar la Liga de las Américas, pero la gente de Libertad levantó el muerto cuando se cayó la posibilidad de Brasil y lo organizó en un mes. Le salió impecable. Incluso con un final caliente como el que tuvo Libertad - Flamengo donde los jugadores iniciaron una gresca entre ellos al final y se frenó con sólo tres policías cualquier incidente.

En el resumen final de un torneo muy loco, me hago eco de las palabras del periodista local Lisandro D´Angelis que dijo “Accede al cuadrangular final el equipo que menos méritos hizo. Universo solo jugo bien 40 minutos contra Libertad, después mal ante Flamengo y mal ante Chile. En cambio y Libertad y Flamengo jugaron bien 80 minutos de los 120 que tiene el torneo y quedaron eliminados.”

Y es cierto. Universo no mereció ganarles a los chilenos. Y hubiesen quedado afuera con una derrota, pero esa diferencia de 19 puntos con Libertad les dio el titulo del Grupo “C”. Tres grandes equipos como Libertad, Flamengo y el propio Universo dieron un gran espectáculo y ratificaron, una vez más, que en esta clase de torneos, no siempre gana el mejor.

Pablo Tosal
www.pickandroll.com.ar