El santafesino volvió a mostrar un gran nivel y destacó que en los dos últimos juegos no sintió ninguna molestia. Además, el alero subrayó: “Más allá de ganar o perder, el equipo tiene una identidad ofensiva que al principio nos costó conseguirla”.
No hay con qué darle. Cuando Walter Herrmann está bien físicamente hay que rendirse ante la evidencia: es un jugador distinto, con cualidades que lo hacen sobresalir naturalmente sobre el resto. Luego de recuperarse de una lesión, el santafesino volvió a mostrar sus credenciales: 24 puntos, con alta efectividad en todos los rubros (7/8 libres, 4/6 dobles y 3/5 triples), cuatro rebotes y dos asistencias en el sólido triunfo de Atenas sobre Libertad de Sunchales, el más amplio del Griego en la temporada 2013/14.
“Hicimos un muy buen trabajo. Ya en el partido pasado habíamos jugado muy sueltos en ofensiva, aunque por ahí se nos acercaron al final. En los dos últimos partidos jugamos con mucha tranquilidad”, señaló el campeón olímpico 2004 en diálogo con Mundo D.
–Además, hoy manejaron la situación, sostuvieron la ventaja e inclusive Lewis, Lescano y vos pudieron salir antes del cierre para recibir los aplausos del público.
–Sí, es muy lindo sacar una ventaja, algo que no es muy usual en esta Liga, porque estamos en un nivel muy parejo. Cada vez que se pueda hacer esta rotación, bienvenido sea.
–¿Qué sentís que cambió para tener esta mejor imagen?
–Básicamente nos estamos pasando mejor la pelota y estamos jugando más rápido en transición. Antes hacíamos mucho juego estático y por ahí nos trabábamos un poco. Ahora estamos corriendo bastante y de esa manera conseguimos puntos fáciles.
–En lo personal, ¿cómo te sentiste tanto con tus problemas físicos como en lo basquetbolístico?
–Me sentí bien. El trabajo que hicimos con el profe Andrés (Darbyshire, el preparador físico) fue fundamental, porque en estos dos últimos partidos jugué sin ningún tipo de dolor. Venía desde principios de temporada con calmantes y ahora puedo decir que físicamente estoy mucho mejor que en la primera parte de la temporada.
–¿Cómo ves al equipo para lo que queda de este 2013?
–El equipo está bien, pero siempre dependemos de los resultados. Hoy estamos muy bien, pero si en el partido que viene no ganás parece que ves todo negro. La Liga es partido a partido. No te podés relajar y no te podés confiar. Tenés que jugar cada partido a muerte, porque siempre es complicado ganar.
–La derrota con Regatas parecía un golpe durísimo. Y ahora, después de los triunfos frente a Olímpico y Libertad, la sensación es muy distinta.
–Seguro. De todas maneras, el partido que perdimos con Regatas es uno de esos partidos de principio de temporada y nos faltaba ensamblarnos como equipo. Y hoy, más allá de ganar o perder, el equipo tiene una identidad ofensiva que al principio nos costó conseguirla.