La fiesta del gol

Desde el 23 de septiembre que comenzó su liga, Quilmes siempre estuvo último. Y no abandonó esa posición sino hasta la noche del miércoles que la derrota de Lanús ante Peñarol le permitió ascender al 9no puesto. Aquel fatídico comienzo de 2-14 condenó al cervecero a remar con paciencia y sacrificio para tratar de acercarse al resto. Y desde mediados de noviembre logró modificar sus conductas y gana más de lo que pierde.

Del otro lado Libertad que buscaba solidificar el segundo puesto no lo logró y cayó al tercer lugar de la tabla. No dio una buena imagen, sobre todo defensiva, donde fue un equipo que corrió siempre por detrás de las intenciones del rival.

Quilmes impuso un buen ritmo ofensivo desde el comienzo a pesar de la aparente paridad (12-10) el local tenía mejores recursos para lastimar adentro y afuera mientras que Libertad tenía vedado el poste bajo, los perimetrales no podían penetrar y los grandes sumaban tirando de lejos.

La ecuación de la lógica ante la diferencia en el desarrollo decantó para Quilmes en una ventaja de 17-10 para cerrar 21-15 el primer cuarto. Las siete pérdidas de Libertad reflejaban la improductividad ofensiva y lo trabado que estaba la visita para elaborar su juego de ataque.

En el segundo cuarto otra vez Luca Vildoza entró con mucho gol y produjo por su presencia en el aro ajeno el primer quiebre de la noche, donde Quilmes tomó una ventaja de 15 puntos (38-23). Libertad lucía aturdido, sin variantes en ofensiva y sin forma de parar el vendaval que Vildoza (14 pts) había desatado.

Pero apareció Juan Brussino en todo su esplendor tirando del carro por su sola presencia. Guapo, decidido, valiente para encarar defensas más altas, que lo esperaban escalonados. Pero frenó y tiró a la carrera (3/4 en triples) y luego aceleró para el aro y sacó otros 4 puntos. A su lado José Vildoza, el juvenil de Libertad, logró ser un compañero ideal con 7 puntos vitales para complementarlo.

Cuando la defensa de Quilmes quiso ajustar contra la dupla maravilla aparecieron los espacios y Araujo y Barrios castigaron con sendos triples. Libertad de repente se encontró con mucho caudal de gol y el resultado se fue achicando hasta terminar 51-45 el primer tiempo después de un frenético 30-30 del segundo cuarto. Había demasiados puntos permitidos por ambos en un primer tiempo entretenido, pero que dejó insatisfecho a ambos técnicos. Las pérdidas de Libertad (11) se compensaron con los triples (9/14) y en Quilmes Vildoza (14) y Baxley (12) tenían a un buen Maciel y Gallizzi trabajando en el poste bajo.

En el tercer cuarto Libertad le dio vuelta el desarrollo al cervecero. La defensa ya impuso condiciones y empezó a atacar muy firme Lee Roberts hundido y lastimando de cerca el aro rival. Con parcial 2-9 la visita pasó al frente por primera vez (53-54).

Desde allí el partido se hizo apasionante y cambiante en el resultado. Quilmes retomó el liderazgo pero nunca por más de 5 puntos (61-56) pero otra vez Libertad se ponía en parda (65) con actuaciones sobresalientes de Brussino y Roberts. En el local Baxley empezó a liderar como suele hacerlo en los momentos críticos con otra buen momento de Vildoza como compañía.

La visita nunca tuvo una diferencia a favor grande (dos de máxima con 69-71) y estuvo condenado a no poder defender dos secuencias seguidas para abrir esa distancia. Quilmes encontró siempre manera de vulnerar la defensa rival.

Al ingreso al último cuarto todo era paridad (72-71) y estuvo así al menos los primeros cinco minutos del segmento final (80-77) pero el equipo de Leandro Ramella tenía preparado un sprint final vertiginoso que ya Libertad no pudo seguir.

Apareció Enzo Ruiz que se transformó en el factor X de la victoria. Al dueto Baxley-Vildoza se le agregó una tercera guitarra que ya Libertad no tuvo forma de contrarrestar. Con 14 puntos (4 triples) del santiagueño en el último cuarto Quilmes tuvo 21 puntos en solo 5 minutos que demolieron a su rival.

El conjunto de Sunchales impuso la voluntad de Juan Brussino y Lee Roberts pero lucieron muy solos. Apenas 4 puntos de José Vildoza acompañaron pero el resto no pudo dar una mano. Ni Saglietti, Cerutti, Noel, Alloatti, Araujo o Barrios. Todos lucieron apagados y la visita terminó por abdicar el rey recién en el último minuto. Llevar de visitante 87 puntos y los porcentajes que hoy tuvo Libertad es un síntoma positivo pero recibir 101 puntos es condenatorio. Imposible para ganar.

En Quilmes “Junior” Cequeira tuvo un muy buen cierre de juego, muy necesario para recuperar confianza ante un mes muy errático en ataque, pero es para destacar que nunca negocia el sacrificio defensivo, lugar donde por ejemplo Calvi hace una bandera. Maxi Maciel tuvo otro muy buen partido y Gallizzi, hasta que salió golpeado en una pierna había tenido también un tremendo juego. En líneas generales más allá de los tres goleadores Quilmes tuvo picos de rendimientos en varias piezas como para pensar en positivo.

Cuando pueda sacarse la pesada soga del cuello de la posibilidad de jugar por la permanencia este equipo parece tener cosas muy positivas para dar. Pero falta mucho, muchísimo para el final.

Síntesis
Quilmes (101): Luis Cequeira 6, Walter Baxeley 28, Enzo Ruíz 24, Maximiliano Maciel 12 y Tayavek Gallizzi 9(FI); Luca Vildoza 20, Fernando Calvi 2 y Diego Romero (-) . DT: Leandro Ramella

Libertad (89): Juan Brussino 28, Marcos Saglietti (-), Mariano Ceruti 2, Lee Roberts 27 y Alejandro Alloatti 5(FI); José Vildoza 14, Guillermo Araujo 5, Pablo Barrios 3(x) y David Noel 5. DT: Facundo Müller

Parciales: 21-15, 51-45, 72-71 y 101-89.
Árbitros: Pablo Estevez y Oscar Martinetto
Estadio: Once Unidos (Mar del Plata)
Fotos. Prensa Quilmes

Pablo Tosal
@pablotosal