España sigue imparable en el Grupo B del mundial. Hoy fue el turno de Panamá al que vapuleó 101-57. El partido no tuvo emoción ya que la superioridad fue completa. Alemania del mismo modo se divirtió con Nueva Zelanda (apenas 6 pts en el segundo cuarto) y arrolló 80-56. Angola superó a Japón.
Autor:Pick and Roll
Domingo plácido para España, que aplastó a Panamá con tremenda facilidad. La selección centroamericana fue un juguete en manos del equipo español, tremendamente superior desde el primer minuto. Pronto había 10 puntos de diferencia, luego 20 y no demasiado más tarde, 30. Para acabar, 57-101. Sólo unos problemas físicos de Navarro, que descansó la segunda mitad, impidieron la fiesta completa en un plácido partido en el que se lució Pau Gasol (26 puntos y 10 rebotes) y hubo tiempo para el brillo de suplentes como Berni Rodríguez o Rudy Fernández
Doce de renta al final del primer cuarto, 20 al descanso, 32 al final del tercer cuarto y 40 a unos minutos del final. Un paseo para los de Pepu Hernández, únicamente lastrados y preocupados por una lesión de Juan Carlos Navarro, no demasiado preocupante a ojos del doctor español pero que privó al equipo de su servicio en la segunda mitad.
No fue realmente necesario; en absoluto. España ya tenía el partido en el bolsillo y, por si acaso, siguió aumentando la renta hasta doblarla y alcanzar un máximo de 44 puntos de renta con el resultado final. Cada jugador era importante, todos anotaron y hubo espacio para el lucimiento.
Por ejemplo, de Pau Gasol, autor de 26 puntos y 10 rebotes, o de los suplentes Rudy Fernández (21) y Berni Rodríguez (15), que no hicieron perceptible la ausencia de Navarro.
El mayor problema saltó al intermedio: Juan Carlos Navarro sufrió una pequeña lesión que aconsejó su descanso en la segunda mitad y le mantuvo dolorido en el banquillo. En principio, nada grave... pero la alarma saltó en Hiroshima.
Síntesis Panamá (57): Cota (2), Douglas (9), Hicks (7), Lloreda (9), Garcés (6) -cinco inicial-, Cárdenas (2), Peralta (3), Daley (5), Máximiliano Gómez (-), Levy (2), Dionisio Gómez (9) y García (3). DT Guillermo Vecchio
Hacía mucho tiempo que Alemania no necesitaba a la mejor versión de Nowitzki para ganar un partido importante. Pues bien, ante Nueva Zelanda (56-80), el conjunto germánico se paseó con la gran actuación de los aleros Greene (18 puntos) y Garrett (14)
Alemania ni siquiera necesitó que su mejor jugador, el ala pivote de los Dallas Mavericks, Dirk Nowitzki, asumiera responsabilidades ofensivas para marcharse en el marcador. Nueva Zelanda le facilitó el trabajo hasta límites insospechados.
Los neozelandeses naufragaron en toda regla. Su estadística del primer tiempo sonrojaba: tres de diez en tiros de dos y dos de doce en triples. Sólo los tiros libres daban el nivel con un cinco de ocho. Pero sólo eso. En el rebote el fracaso también alcanzaba proporciones dantescas. Alemania tomó casi el doble (doce por veintitrés) y no cedió ni un sólo rebote debajo de su canasto pese a la cantidad de tiros fallados sobre su aro.
Es verdad que Nueva Zelanda ha encontrado en el camino a las dos selecciones más fuertes del grupo, la alemana y la española, ahora bien, necesita empezar a ganar si quiere continuar adelante puesto que Angola ya le aventaja en dos victorias y tiene medio pie en octavos de final.
Síntesis Nueva Zelanda (56): Jones (8), Penney (12), Henare (7), Cameron (8), Bradshaw (7) -cinco inicial-, Olson (-), Winitana (-), Boucher (-), Vukona (-), Frank (4) y Rampton (10).
Angola se acerca a los octavos de final tras derrotar a Japón por un contundente 62-87. Angola anuló el tiro exterior de Japón, la mejor baza del equipo nipón, y la sacó de la zona con una abrumadora superioridad en el rebote para sumar la segunda victoria en el Mundial 2006 y empezar a pensar con argumentos hacia las eliminatorias de octavos de final.
Aunque todavía es pronto, los africanos están en una buena situación para luchar por un pasaporte hacia los cruces. La tercera jornada, en la que se enfrentan a Nueva Zelanda (lunes) es la clave para el equipo de Alberto de Carvalho.
Angola tomó veintidós rebotes más que Japón (veintiocho por cincuenta). De ellos diecinueve en ataque, una cifra que descarta para la victoria a cualquiera. Los africanos controlaron la pintura y colapsaron la línea de triples para los japoneses, que cavaron su propia tumba con un ocho de veintidós desde los 6,25.