Cierre con sonrisa

Argentina arrancó con otra energía y efectividad. Paz y Chapero se conectaron en los primeros minutos, donde generaron puntos ambos. Mali con deficiencias en su defensa, muchos desajustes, y Argentina lo aprovechó para sacar diferencias. Fernandez se hizo fuerte en la pintura, y el albiceleste tomó confianza para anotar. En velocidad, el elenco de Lifschitz estuvo con todas las luces, y Mali con pocas ideas y coordinación. Ballo bien defendido, salvó la primera situación de doble y falta, luego lo detuvieron bien. Milovich y Cavallín dieron una buena mano, y Argentina pudo dispararse con cierta facilidad. Mali con muchas fortalezas físicas, pero enormes limitaciones de juego y técnica para crear asociaciones. En medio cuarto, el albiceleste estiró a 14 – 3 la ventaja aprovechando el 2-11 de campo del elenco africano.

La visita parado en zona con ajustes, donde Argentina cayó en un pequeño bache, pero se sostuvo al frente. Nuevamente Paz y Cavallin apretaron el acelerador, y a larga distancia fueron claves. Un par de triples, y nuevamente la ventaja cómoda en el marcador. Ballo duplicado siempre en la marca, Chapero con un buen trabajo allí sumado a Fernandez para ganar sin sufrir segundas opciones del rival. Mali con yerros en la línea (1-5), y Milovich se lució con un volcadon para quedar al frente 22 – 8. El equipo no pudo extender la brecha, ganó su cristal, pero bajo la eficacia y la intensidad de juego. Fue importante el regreso de Paz a la cancha, el cual trasladó mejor la bola, y encontró a los externos. Mali con pocos recursos, Ballo anulado, y finalmente 26 – 12 tras un triple de Copes.

Argentina bajó su nivel en el comienzo del periodo. No estuvo tan agresivo en defensa, dio ventajas en el poste, y tampoco pudo correr para aprovechar la pobre transición defensiva del rival. Un parcial inesperado de 6-0 en principio de parte de Mali pudiendo generar mayores variantes adelante sin Ballo en cancha. Para colmo, el equipo siguió bajo de ideas y agresividad de juego. Apenas un doble de Bertona en un rebote ofensivo llevó tranquilidad dentro de un marco extraño para el dominio del primer cuarto. Argentina anulado, bajo de confianza en algunos jugadores, y nuevamente carente de efectividad. Mali empezó a ganar en ambos cristales, y achicó a 29 – 22 simplemente con 3m30s por jugar.

El partido fue chato, Argentina se derrumbó en confianza y números ofensivos. Mali decayó, Ballo bien defendido, y el resto poco acompañó. Cavallín robó una buena bola para salir del problema, aunque la defensa zonal de Mali y su agresividad defensiva relegó al albiceleste. Se sintió la ausencia de Paz, el equipo con menos volumen de juego, Bertona improvisó por momentos, y el equipo se llenó de faltas. Mali llegó a achicar a solo cuatro puntos, aunque el cierre fue un alivio para Argentina. Pudo sacar faltas, intentó no perder la línea, y fue justamente Paz quien coronó la primera parte. Un bombazo a 45ª del base para cerrar 36 – 27 al frente.

Argentina trató de no perder las riendas del juego. La defensa interna fue clave, Chapero y Fernandez realizando un gran desgaste en general, y evitando que Ballo tome protagonismo. Nuevamente Paz como estandarte ofensivo en el equipo (5) para poder distanciarse dentro de un flojo encuentro de pocas ideas y claridad. Argentina tomó ventaja de 43 – 31, aunque sus estandartes se cargaron de faltas. Chapero y Fernandez con 3 faltas, y Paz sumó su cuarta tras una falta en una acción de dos y uno de Kanoute. Mali siempre a la expectativa, presionando bien arriba al equipo, y ganando por desgaste en los tableros.

Un par de corajeadas de Milovich cerca del aro lo dejaron con vida a Argentina al frente, aunque dando ventajas en defensa. Mali empezó a encontrar espacios y anotar con cierta continuidad. Mali siguió errático, pero su presión zonal complicó la salida de Argentina en todo momento. Una volcada de Chapero levantó al público, aunque el partido continuó muy apretado en general. Argentina con poco gol, bien contenido en la primera línea, obligado a lanzar al límite de los 24s y sin correr en contragolpe. Los africanos llegaron a ponerse en la puerta del resultado, aunque el final fue para el albiceleste. Una salida rápida y tremendo bombazo de Cavallín contra la chicharra para cerrar 53 – 45.

El partido continuó trabado y parejo. Argentina tuvo ráfagas positivas, e intentó conectarse para sacar ventajas. Chapero y Cavallin generaron un par de cortes seguros que terminaron en puntos. Diaz le dio vértigo, pero poco juego, aunque aplicó un triple para continuar arriba (59 – 49). Argentina batalló, tuvo problemas en la pintura, donde Mali creció en intensidad, tuvo espacios y descontó en todo momento. Argentina sin efectividad, le costó generar espacios, y las variantes tampoco aparecieron. Mali siguió en juego, y silenciosamente complicó por completo al elenco albiceleste.

La marca zonal 2-1-2 generó inconvenientes, sumado a todo el físico del rival para cubrir el ancho y larga de cancha. Mali apostó al juego interno, y se colocó solo 61 – 57 generando el minuto de Lifschitz. Un doble corto de Chapero llevó aire, sumado a un triplazo de Paz en soledad para quedar +7 con dos minutos por jugar. Mali volvió meterse en partido, Argentina perdió una bola clave, y luego su cristal para darle libres al rival. Kanoute robó una bola con solo una posesión larga abajo, aunque Fernandez salió como bombero para la tapa. Mali no ejecutó y también perdió la pelota. Hubo devolución de gentilezas, donde Mali volvió a recuperar, y se colocó 66 – 65 abajo con 1m25s.

Milovich sacó falta en la siguiente jugada, y anotó ambos libres. Mali no dudó, y Kanoute se despachó con un increíble para empatar las acciones. Argentina perdió la bola, y Mali fue a la línea tras una falta innecesaria de Fernandez. Concretó solo 1-2, y el segundo, tomó el rebote Chapero que asistió rápidamente a Cavallín que salió disparado. Falló en la primera tras una tapa, pero tomó el rebote y casi en soledad convirtió el increíble doble de la victoria.

José Fiebig

@Josefiebig