Los mismos de siempre

Tras varios certámenes donde las luces no estuvieron dirigidas hacía el equipo estelar que se supo ganar el mote de multicampeón por lo realizado torneo a torneo, superando obstáculos y derrocando cual rival se ponga en frente.

Los Mataderos Oilers con un mix de jugadores experimentados en la Asociación y nuevas promesas del básquet social, en la tarde del sábado logró el pase a la final de una edición oficial de LiforBásquet.

En esta ocasión la parada no era nada sencilla, el cruce para ver quien llegaba al último juego con la posibilidad de alzar la corona tenía como rival al siempre duro hueso Molotov que acarreaba un inicio de año fabuloso ganando mini torneos de verano (Navidad y Reyes Magos). Es por eso que el resultado final de 75 a 54 es más valorable aún para los tangueros que sacaron adelante un duelo que no solamente determinaba el momento que pasaba el equipo en lo deportivo, sino en lo mental, una barrera que a veces no tiene muchas explicaciones y que es fundamental en situaciones cruciales.

Ignacio Puertolas uno de los baluartes del equipo Oiler fue la gran figura del cotejo con 24 puntos. En tanto que del lado explosivo, Tomás Piaggio culminó con 28 pero no fueron suficientes para un embate como en los viejos tiempos no tuvo acostumbrado Mataderos.

“Estoy muy contento. Volver a competir por un campeonato es lo que cualquier jugador de cualquier deporte busca.Molotov siempre es un rival muy duro. Este año particularmente dieron lugar a incorporaciones jóvenes, de un gran presente que hacen que, acoplados a los que ya vienen hace tiempo, hayan sido candidatos. Pero bueno, eso no nos influyó, jugamos como si fuera la final, defensa intensa y con Checho (Schvening) corriendo a su goleador por toda la cancha, con “Bodi” muy efectivo y goleo repartido en los demás y demostramos nuevamente el por que el año pasado, se hizo el desafío oilers”. Comentó tras el partido el “Samurai” Guillamondegui tras el triunfo.

Además agregó: “Creo que estamos en esta final porque nos lo propusimos. Cambiamos totalmente la mentalidad con la cual veníamos jugando y eso hizo que se note en nuestro juego en los últimos 2 partidos.

Estamos con muchas ganas, con abstinencia de campeonatos. Tuvimos muchos años en los que fuimos totalmente dominantes en la liga, y poco a poco fueron disminuyendo los trofeos, pero el equipo, esta intacto, así que estamos confiados de que este apertura tiene que ser nuestro”.

Por último sentenció: “Estamos viendo unos Oilers muy competitivos. Volviendo a las raíces y con mentalidad campeona, pero no por eso con menos diversión, eso en un grupo de amigos, no se negocia”.