Hoy en Pickandroll repasamos la convocatoria que disfrutó Hernán Jasen allá por el 2005, de la mano de Hernández. El alero de 1,98 y en ese entonces de 27 años, se había consolidado como hombre clave del Estudiantes de Madrid. Leé sus declaraciones en ese año.
Autor:Flavio Ibarra (@Flaviorocambole en Twitter )
Hernán Jasen: “Esta convocatoria me llega en el momento justo”
Después de un título sudamericano juvenil en 1996, Julio Lamas lo convocó para el Sudamericano y los Juegos Panamericanos de 1999, en los que sumó 20 puntos en 8 partidos disputados. Pero esta vez parece que todo será distinto. Jasen reconoce que a partir de este viernes, cuando empiece entrenar la preselección para el Premundial, le llegó la hora de demostrar sus virtudes y él parece dispuesto a sumar su nombre al de otros históricos de la selección argentina.
“Estoy ilusionado como la primera vez que me citaron para el Sudamericano de 1999. Después de varios años lejos de la selección siento que tengo una nueva oportunidad de estar en el equipo. Tal vez esta sea mi última chance de demostrar que soy un jugador de selección. Siento que estoy en la edad y el momento justos para lograrlo”, cuenta Pancho con un entusiasmo propio de un debutante.
-¿Sentís que tenés la oportunidad de ganarte un lugar para el Mundial de Japón? -Esa es mi meta: demostrar que puedo estar en el Mundial. Hernández me dio su confianza con la convocatoria y yo debo responderle con un buen trabajo. Llego a la selección con humildad, pero sabiendo que estoy ante un gran desafío. -¿Esta convocatoria te llega en el mejor momento de tu carrera? -Si, me toca justo, porque además de la edad, vengo de una gran temporada en España, sobre todo en los playoffs. Tal vez allí jugué al mejor nivel desde que estoy en Europa. Siento que estoy maduro en mi juego y eso me da mucha confianza. Mirá cómo estaré que desde que volví al país no paré de entrenar… No quiero perder el ritmo que logré en el final de la temporada.
-Hace dos años una operación te dejó afuera del Sudamericano... -Si, fue una gran frustración. El año pasado me dolió no ser convocado a la preselección. No tomo esto como una revancha, pero con el cambio de entrenador espero demostrar que puedo ayudar al equipo.
-¿Qué objetivos grupales te pusiste para el Premundial? -Hoy la selección tiene los máximos objetivos, porque eso es lo que dejaron los chicos que ganaron la medalla de oro en Atenas. En cualquier lugar donde juegue una selección argentina estamos obligados a ser responsables de mantener ese prestigio, de mantener en alto al básquetbol argentino. Hay que hacer un buen papel en el Premundial.
-¿Cómo imaginás este torneo? -Que será un torneo duro, porque hay varios equipos que se armarán muy fuertes para llegar al Mundial. Al haber varias plazas le abre chances a muchos equipos. Además, contra Argentina todos van a esforzarse más. Nosotros tenemos que responder a esa exigencia.
-¿Te molesta que algunos digan que esta es una selección B? -No, lo tomo bien. Es cierto que entre los campeones olímpicos hay varios que triunfan en la NBA y Europa. Estar detrás de ellos no me molesta. En mi posición hay varios que son estrellas. Estoy tranquilo, porque sé que si hago las cosas bien me puedo sumar al grupo olímpico. Pero hay que tener en cuenta que al Premundial iremos varios chicos que también nos estamos destacando en Europa o la Liga Nacional.
-¿Cómo viviste los buenos resultados de la selección desde afuera? -Con gran orgullo. Sentía que se me inflaba el pecho al verlos ganar y saber que con muchos de ellos fuimos compañeros en alguna selección o club. Si bien los seguí siempre por televisión disfruté mucho cuando ganaron o sufrí cuando perdieron la final del Mundial.
-¿Qué recuerdos tenés de la selección? -Los mejores. Siempre sentí el orgullo de ponerme esa camiseta y defenderla. Eso es lo máximo. Sobre todo lo vivís más intensamente cuando estás fuera del país. Tengo un gran recuerdo de los Juegos Panamericanos de 1999. Se sabe que muchas veces los jugadores hacemos un gran esfuerzo para estar en la selección, porque no descansás y estás más lejos de tu familia, pero yo siempre tengo ganas de estar en este equipo.