Obras Basket salió a la ruta y viajó a Libertad de Sunchales y Echagüe de Paraná sin traer ninguna victoria. El pivot, Martín Leiva, es consciente de cuáles fueron los puntos débiles del equipo y habló de que manera reforzarlos para ganar el partido contra Boca el próximo viernes en el Templo del Rock.
Martín Leiva junto a Walter Herrmann son los jugadores líderes y experimentados del conjunto aurinegro. El pivot (interno) también contó cómo se intenta guiar a un grupo desde la intimidad cuando las falencias son la regularidad y el equilibrio de juego.
-El equipo tuvo una gira negativa tras la derrota contra Libertad Sunchales y luego en Paraná. -¿Que sensaciones te quedaron?
-Las sensaciones que tengo es que podríamos haber ganado los dos juegos. Pienso que fue por errores defensivos nuestros, sabíamos a qué jugadores estar atentos y no lo supimos ver, sobre todo contra Sunchales, que se nos fueron de las manos tanto Barrios como Baldosa. Por otro lado, en el partido en Paraná ellos jugaron sin presión porque se están preparando para las instancias del descenso y tuvimos un segundo cuarto fatídico (34-12) que no sólo no defendimos sino que nos trabamos en nuestro ataque, y a partir de ahí no pudimos remontar la diferencia. Lamentablemente no nos trajimos ninguna victoria y solo queda seguir trabajando porque el equipo quiere entrar a playoffs.
-¿Cuál es la diferencia del Obras que ganó tres juegos seguidos en casa y el que perdió estos dos últimos partidos?
-La diferencia es que en las tres victorias tuvimos un equilibrio ofensivo y defensivo. A su vez, creo que para ganar de visitante tenes que estar muy firme en el ataque. De todas maneras, esto es una cadena, si no se tiene una buena ofensiva dejas que el contrario corra y haga goles fáciles, y terminas jugando atrás de la pelota. En síntesis, contra Sunchales y Paraná no tuvimos el control del partido y no supimos imponer nuestro juego.
-¿Cómo se manejan en el vestuario los altibajos que manifiesta por momentos el equipo?
-Dando la cara. Nosotros llegamos de Paraná por la mañana y a la tarde ya estábamos entrenando. Tenemos que hacernos cargo y volver a enfocarnos en cuál es nuestro juego y que cada uno cumpla el rol que le corresponde. Pienso que debemos ser un buen bloque defensivo y en ataque tenemos jugadores con puntos en sus manos. Somos un buen equipo, de eso no tengo dudas.
-El viernes se viene Boca, rival directo para Obras. ¿Cómo se plantea el partido?
-Es un equipo que ya conocemos y sabemos a qué juega. La verdad es que yo no me fijaría tanto en ellos, sino en nosotros, en la concentración, en buscar la mejor opción y defender a conciencia, sabiendo las virtudes del rival. Confío en que el viernes ganaremos el juego.