Tu eres mi obsesión

El partido comenzó con una paridad aparente que duraría muy poco (4-4) hasta que Quilmes pudo ejecutar mejor su plan original. La doble marca al poste bajo, sobrecargando con el bloque defensivo la zona pintada para que Obras no tenga espacios para su juego de pases interior. Quedaron abiertos algunos tiros para los perimetrales pero no tuvieron certeros (1/5), apenas Horner de un rebote ofensivo pudo meter un triple.

La distancia se abrió al doble (14-7) y Nicolás Casalánguida (que hay había pedido un minuto) metió un doble cambio, a la cancha Bortolín y Mariani. Pero Quilmes tuvo el control del juego, por su defensa que anticipó todo y por Robinson que atacó vertical y muy bien el canasto rival (10 pts en el primer cuarto). La distancia siguió ampliándose cuando hasta llegar a los doce de ventaja 19-7 para que el técnico visitante con un triple cambio termine de cambiar por completo el cinco inicial con el ingreso de Jordan Richard, Zurbriggen y Valussi.

Con una nueva aparición de Eric Flor en ofensiva (7 pts y único triple de Quilmes en el cuarto) el cervecero mantuvo los 12 al cierre del primer segmento: 23-12.

En el segundo cuarto Obras empezaría a tomar las riendas del juego con la mejoría defensiva de su equipo, que con mucha más actividad, piernas, ganas y concentración fue anticipando las opciones ofensivas del local. Detuvieron a Robinson, siguieron negando el juego de pick and Roll con los pivotes y no permitieron puntos de segundas instancias.

Quilmes atacó condicionado a tener solo la opción del tiro lejano y el resto vedado por la defensa rival. Y con el aro cerrado de tres puntos (3/12 en el primer tiempo) los guarismos ofensivos se cayeron al tiempo que su rival empezó a mejorar su ofensiva de la mano de Mariani, Zurbriggen y Jordan Richards, el sorpresivo goleador que mostraba la visita.

El pivote suplente visitante tuvo una actuación muy importante para poder dar vuelta el juego, controlando desde su defensa los pivotes rivales y aportando en ofensiva sin que las jugadas sean para él: de rebote ofensivo o tiros finales de posesión. Con 4/7 en triples en el segmento Obras tuvo gol perimetral y achicó la brecha a 7 puntos al cierre del primer tiempo: 41-34.

El dominio de Obras se evidenció en el tercer cuarto. Quilmes plantó nuevamente su quinteto titular pero esta vez no tuvo gol, y con un parcial 6-14 la visita tomó la delantera 47-48 en 4 minutos.

Se encendió Tomás Zanzottera con 7 puntos seguidos y volvió Dennis Horner a colaborar con gol en ofensiva. Casalánguida levantó la penitencia de su armada titular y Obras cambió su estado ánimo de la bronca al optimismo. De todos modos el factor X que marcó la diferencia fue el pivote Jordan Richard, quien habitualmente no juega muchos minutos ni aporta en ofensiva, pero esta vez colaboró con puntos de valor.

Quilmes no tuvo respuestas que no sean Eric Flor. Maciel erró un par de tiros abiertos, los internos no gravitaron en ningún momento y Vildoza estaba desconocido. Solo la voluntad, la destreza y el hambre gol del escolta cervecero pudo contra todos: 9 de los 18 puntos de su equipo fueron suyos. El tercer cuarto cerró empatado en 59 con un parcial d 18-25 para la visita que había tenido gol en 5 manos diferentes y tenía el control del juego.

El último cuarto fue apasionante por la incertidumbre del tanteador y los vaivenes en el liderazgo pero fueron más las acciones con errores que con aciertos, en definitiva el peso del resultado le caía incomodo a los dos.

Tuvieron un comienzo muy alentador en puntos y anotaron un parcial de 11-11 en los primeros tres minutos con Flor y Vildoza convirtiendo por Quilmes y Obras en cinco manos diferentes. Esa constante de llegar al gol por diferentes vías es lo que hacía a Obras tener más alta su moral, su alegría en el juego. Lastimaba de varias formas.

Pero luego del empate en 70 Quilmes entró en una sequía que duraría casi cinco minutos y en dicho lapso Obras podría haber determinado el ganador, pero le perdonó la vida con apenas un parcial de 0-5. Tiros fallados por ambos lados, nervios, nulos rebotes ofensivos y contraataque. El cervecero penaba con su tiro de tres puntos (llevaba 1/11 en el segundo tiempo) mientras Obras vivía de sus rebotes ofensivos.

De todos modos el partido se guardaba lo mejor para el final. Ganaba Obras 70-75 cuando Quilmes rompió la sequía con un triple de Flor (a falta de 2:40). Jordan Richard con rebote ofensivo puso un doble clave para sacar 4: 73-77 a falta de 2.10. g

Y allí Quilmes apretó el acelerador mostrando un gran coraje para cerrar el juego. Vildoza se hizo cargo en un partido raro donde tuvo solo 4 lanzamientos (2/4) al canasto en todo el juego y sumó desde la línea de libres (12/14). El capitán cervecero puso el juego a dos (75-77) y Flor otra vez con un triple lo puso al frente 78-77 a falta de 1:10.

Herrmann erró de dos y luego de un rebote ofensivo Barral erró otro triple y el local tenía todo para cerrarlo tranquilo pero Flor erró un triple y la última con 19 segundos le quedaba a Obras tras el rebote de Bortolín, pero apareció Vildoza por atrás y le robó el balón para que luego le cometieran falta. Desde la línea puso diferencia de 3 (80-77) y el intento de triple final de Mariani no entró para darle la victoria a Quilmes, que por testarudo y obsesivo, por tener a Flor y su vuelo ofensivo, por saber esperarlo a Vildoza y por aprovechar sus momentos, se quedó con un juego clave para seguir con vida peleando el ingreso a los Play offs.

Crónica: Pablo Tosal
Fotos: LNB Contenidos
Edición Videos: Juan M. Di Marco - @JuanemeDiMarco - Pick and Roll