Hernández “Debimos ir a defensa zonal”

Es difícil encontrar un entrenador que con las pulsaciones a mil tenga tiempo para una autocrítica profunda. Por dos motivos: principalmente muchos técnicos son reacios a echarse culpas. El basquetbol es tan infinitamente amplio que hay mil explicaciones posibles antes de culparse. Segundo porque a veces, por más que quieran, no pueden tener un pensamiento claro hasta que se calman al día siguiente.

En el caso de Sergio Hernández, los más de 30 partidos en finales le dan el aplomo suficiente para poder resolver 15 minutos después del juego los errores salientes del mismo. Además en un momento crítico de la serie obsérvese cómo el técnico se pone las culpas en su mochila, tratando de liberar de presión a sus jugadores. El enriquecedor testimonio fue:


“Fue una muestra de 40 minutos de lo que es la serie hasta el día de hoy. Son dos equipos que no se sacan ventaja nunca y que casualmente cuando se sacan ventaja tienen sus peores momentos y la desperdician. Las dos veces que nosotros sacamos 8 o 9 puntos muy rápidamente ellos se pusieron en juego y las dos veces que ellos nos pudieron sacar una diferencia nos pusimos en juego nosotros. Posiblemente tenga que ver con el temperamento ese que hablamos tanto de los dos equipos, o de la ansiedad si vamos a buscar el lado negativo”.

“Nosotros perdimos el juego en no poder frenar las penetraciones. Deberíamos haber ido a defensa zonal, fundamentalmente cuando ellos tuvieron a Ferrini en cancha por Locatelli bastante tiempo que Figueroa nos lastimó ahí con penetraciones y Laws también. No tomé la decisión yo, me parecía que en algún momento íbamos a poder solucionar el problema. Ahora pasado el partido me parece que una defensa zonal hubiese sido lo correcto. Y el 52% en tiros libres. Estuvieron por ahí las causas. Obvio que nosotros no perdemos solo por nuestros errores, Atenas vio el problema y lo atacó y lo atacó sistemáticamente. Empezamos a orientar los bloqueos al balón para el lado del 4 para cambiarlos, y ellos cambiaron la formación ofensiva, nos mandaron al 4 al lado contrario, le aclararon al 2 y al 1 para su derecha, lo hicieron muy bien. Nosotros ejecutamos mal la defensa, ya lo dije, no fui a zona cuando debimos haber ido, pero Atenas hizo una gran lectura de la situación y le sacó máximo provecho, pero estamos hablando de un partido de suplementario así que es muy finito el tema”

- En el caso de los dos libres de Vega, que los erró en el final, justamente este chico que te había dado tanto en la serie ¿Qué se dice en estos casos? ¿Cómo se manejan estas situaciones?

- Por ahí le cree una confusión yo a Vega, porque él me pregunta ¿si meto el primero tiro a errar el segundo?. Porque ya lo hemos hecho (NdR: 4to partido con Boca) para que ellos no tuvieran el minuto y pudieran reponer de la mitad de la cancha y en 3 segundos es muy difícil llegar de un aro al otro. Y yo primero le digo “vos meté todos los tiros libres que puedas” y después intento decirle que falle el segundo. Un poco tarde. No fue feliz porque se lo digo antes que tire el primero, es decir, él está por tirar y le compliqué la vida pobre chico. Lo complicamos nosotros porque mi asistente me dice “que falle el segundo”, yo lo llamo a Jackson y a Malara, le grito a Seba (Vega), yo me tendría que haber quedado con el primer pedido y nada más, porque darle tanta información a un chico de 20 años, que además no había tenido un partido de mucha continuidad fue malo. Pero forma parte de su crecimiento, le pasa a los mejores, hemos vistos monstruos errar dos tiros libres para ganar un juego y no lo podes creer, bueno ahora le tocó a él pero tiene toda nuestro apoyo y le servirá para crecer también.

Por su parte, Rubén Magnano, aunque sereno y calmo, no ocultó la felicidad de haberse quedado con un juego casi imposible. Valoró las agallas de sus jugadores y la presencia de Kanté. No hablo de futuro solo anticipó que “deben seguir mejorando” y dijo:

“Cuando comenzó la serie yo emití un concepto diciendo que sería una final muy emotiva, creo que esto es así, e incluso con mucha tensión a la hora de tomar decisiones, muchas acciones del tiempo regular y del suplementario se vieron cargados de imprecisiones, propias de esta emotividad y la tensión con que se está jugando. Es como si quisiéramos trasladar lo que hacemos en defensa al ataque, sin manejar un poco los tiempos y las pausas para eso”.

“Realmente tuvimos las agallas en un momento importante cuando nos sacan ocho puntos en el último cuarto para poder revertir la situación. No dar por perdido un juego. Defendiendo y penetrando como decía Sergio. Este tema de la lectura mía que cambié al alero, fue mera casualidad no es que la haya leído. Lo gratificante es habernos quedado con la victoria sin dudas. Doblemente gratificante porque pensábamos que Kanté no podía jugar. Estaba prácticamente para no jugar e hizo el juego que hizo, defendiendo y atacando muy bien es un plus para nosotros. Creo que a pesar de que falta 6 días para que termine la liga tenemos que seguir corriendo cosas. Sobre todo en lo que dije anteriormente: que la parte emotiva no nos impida jugar bien básquetbol y tomar buenas decisiones”.

Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.com.ar)

Pablo Tosal
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