Demasiado Peñarol para Ciclista

El primer tiempo se dividió en dos. Un cuarto donde Peñarol lució errático y en menor medida Ciclista pudo aprovechar y otro cuarto donde los suplentes de Peñarol forzaron su defensa a punto que Ciclista no encontró espacios. Literalmente no los encontró. Forzó el 90% de sus posesiones y sus conversiones se vieron reducidas a dos dobles y 2 libres de Jonathan Maldonado.

Primero fue Leo bombardeando de tres para empatar a Dominé en la tabla de máximo encestador de triples en la historia de la Liga. El partido no tenía 1 minutos y las emociones empezaban a llegar, pero Leo se secó y erró los siguientes tres triples que tomó en el primer cuarto.

Peñarol trató de jugar con los errores de Ciclista y fue lo mejor que hizo: correr, pero cuando tuvo que jugar estacionado careció de puntería en la puntada final. El regreso de Martín Leiva le devolvió a Peñarol la posibilidad de meter la bola en el poste bajo pero Leiva no estuvo fino con el aro en la primera mitad, luego si marcaría la diferencia.

Ciclista aprovechó algunos rebotes para acelerar el paso y vía Carlos Strong, que entró muy derecho con el aro (7 pts) logró descontar para ponerse a uno (16-15). El primer cuarto cerró 19-15 con una deuda por el local y una incógnita por la visita ¿Cuánto aguantaría la zona?

En el segundo Fernando Rivero tomó la decisión de mandar los cinco suplentes en cancha, seguramente porque el partido le otorgaba esa clase de permiso, pero también para generar desde la defensa el alimento que no tenía en el ataque estacionado. Y la receta le funcionó: Konsztad y Massarelli en la primera línea defensiva estaban muy activos para llegar al tiro mientras Giorgetti, Ale Diez y Gaby Fernández clausuraron el canasto.

Algunos rebotes, algunos recuperos y a volar sobre el parquet. Peñarol sacó una diferencia importante 31-19 con parcial 12-4, y Rivero mandó un triple cambio a falta de tres minutos para el regreso de Sahdi, Fisher y Boccia, buscando dar el golpe final que derrumbe el juego. Y prácticamente lo logró, aunque no por el camino de los perimetrales sino por el trabajo de Alejandro Diez, que marcó 9 puntos en el segmento ya sea en penetraciones o trabajando de espaldas ganó casi siempre.

En el tercer cuarto, Peñarol tomó la máxima de 27 puntos (52-25) manteniendo, esta vez con los titulares, la presión defensiva. Julián Pagura paró el partido para darle más una arenga anímica a su equipo que indicaciones táctica. Hubo una secuencia de cuatro recuperos seguidos de la defensa de Peñarol sobre el ataque de Ciclista. Vale decir, la visita no podía siquiera tirar al aro. Esta frustración era visible en el campo. Y en ese contexto el regreso de Leiva fue muy positivo, desdibujó por completo la tarea de Price en defensa y aportó 10 puntos en ataque (le anotaron 12 por un doble en contra de Strong).

No obstante el minuto sirvió porque la reacción de Ciclista llegó de apoco y fue por empuje y orgullo que siguió insistiendo y con Acuña en el poste bajo, Gandolfo y un triple de Díaz achicó a 22 (52-30). Al menos la reacción sirvió para volver al partido.

No obstante el dominio de Peñarol era total, dominando los rebotes 46-25 al final del tercer cuarto era un juego apto (por cantidad y calidad de rebotes) para que sacara mínimo 30 puntos de distancia, pero fue una noche apagada en la ofensiva milrayitas.

Al comienzo del último cuarto Rivero mando nuevamente los cinco suplentes al campo para cerrar el parrido ya con una distancia de 21 (60-39) con que cerró el tercer segmento. La brecha se fue abriendo lentamente hasta llegar nuevamente a 27 como máxima (74-47) a falta de 5 minutos ya con los juveniles Jerónimo Barón y Eugenio Zustovich en el campo.

Ciclista que alternaba la defensa entre zona y hombre para confundir tuvo como virtud la entrega, el sacrificio algo que al menos le dio un mejor margen para el cierre. Así metió un parcial de 7 -0 (74-54) para que Fernando Rivero pida minuto a falta de 3:55 para organizar el cierre del juego.

Para terminar de darle un carácter raro, diferente al partido Fernando Sampietro terminó dirigiendo solo el último cuarto por el desagarro de Fabio Alaniz, quien en 19 temporadas es la primera vez que se lesiona en su carrera.

El juego, en definitiva se convirtió en un corre calles donde predominaban los juveniles y la victoria se cerró con ventaja de 22: 88-66. Un tanteador que no se condice con la diferencia real que hubo en el campo.

En verdad, en un partido normal con la diferencia de juego que hubo entre Peñarol y Ciclista, el local podría haber abierto la distancia en 30 puntos mucho antes del final, con la habitual contundencia que exhibe Peñarol en el poli. Incluso con la distancia de rebotes (57-29) el local podría haber superado los 100 puntos. Pero no lo hizo y Ciclista se llevó una derrota más maquillada y menos sufrida.

Síntesis
Peñarol (88): Fabián Sahdi 0, Forrest Fischer 7, Adrián Boccia 8, Leo Gutiérrez 5 y Martín Leiva 12 (FI) Franco Giorgetti 7, Gabriel Fernández 5, Luciano Massarelli 13, Alejandro Konsztadt 8, Alejandro Diez 14, Jerónimo Barón 6 y Eugenio Zustovich 3. DT Fernando Rivero

Ciclista (66): Damián Palacios 8, Jonathan Maldonado 14, Lucas Díaz 2, Jeremy Price 2 y Kevin Hernández 15 (FI) Carlos Strong 9, Patricio Rodríguez 2, Santiago Gandolfo 7, Roberto Acuña 2, Juan Pomes 2, Maximiliano Tamburini 3. DT Julian Pagura.

Parciales: 19-15, 40-21, 60-39
Árbitros: Fernando Sampietro y Fabio Alaniz
Estadio Polideportivo Islas Malvinas

Fotos: Majo Gil (@MajoPick / mjgil@pickandroll.net)
Crónica: Pablo Tosal (@pablotosal)