Gimnasia - Peñarol (Semifinales - Sur - Juego 1)

La oportunidad se le abre a Gimnasia y la toma con suma ilusión y esperanza. El equipo patagónico tiene que ratificar una muy buena temporada en la fase regular revalidando actuaciones en la serie de Play Offs en busca de la final de conferencia.

En el inicio del camino tuvo muchas dificultades, donde debió sortear obstáculo propios y ajenos para superar a Boca Juniors en un quinto y decisivo juego en Comodoro. Un equipo que tiene 84.0 puntos a favor jugando como local, apenas anotó 70 y 62 puntos en los primeros dos juegos de la serie anterior.

Boca había logrado trabar la dinámica y fluidez que caracteriza a este equipo cuando logra pasarse el balón y aprovechar las ventajas que la defensa rival otorga. En el tercer partido en Buenos Aires pasó algo similar (derrota 77-68). Y con toda la presión encima apareció lo mejor del equipo superando a su rival 92-73 en el cuarto juego y 98-82 en el quinto.

La dificultad del camino para Gimnasia no hizo más que prepararle el alma. Nadie le regalará nada y todo el trabajo del año se debe ratificar en los play offs. Esos últimos dos partidos corroboraron lo que no había podido mostrar: Gimnasia es un equipo candidato a todo.

El entrenador Gonzalo García sabe bien a que dificultad se enfrenta ahora pero sabe que la respuesta de sus dirigidos cuando tenían la soga al cuello es una herramienta invalorable que se trae de la serie anterior y que inexorablemente deberá ponerla de manifiesta para poder ganarle al campeón en esta semifinal. Peñarol es un equipo que aún muerto es peligroso y da pelea.

El dato más preciso donde encarar la previa es saber de que manera Gimnasia puede destrabar a sus tiradores para que disfruten del metro con ventaja porque el equipo tira un 41.7% en triples de local (9.9 de 23.8 lanzamientos). Esa circunstancia quedó en evidencia ante Boca.

A diferencia de la serie con Bahía basket (que jugaba con un doble ala pivote entre Levy-Rasio) Peñarol tiene gente preparada para cortar el circuito cuando el rival ofrece un pivote definido. Tanto Martín Leiva y Gabriel Fernández son muy buenos táctica e individualmente para cerrar espacios, saltar en los pick, contener 1 x 1 a los pivotes rivales y se les complica ante gente más liviana. Y Gimnasia juega mucho desde la presencia de Sam Clancy. Allí radica uno de los puntos importantes de la previa.

El pickandroll de Gimnasia donde sacan ventaja de la penetración y descarga a los tiradores es una herramienta que marcará la tendencia inicial de la serie. Peñarol no cuenta en los dos primeros partidos con un especialista en esa marca como Adrián Boccia. Franco Giorgetti como alero ha subido su nivel en el último tramo de la competencia pero el escolta del equipo sigue siendo un problema para Fernando Rivero, que gana gol y pierde atrás con Luciano Massarelli y tiene que testear la mano de Sahdi y Konsztadt en la noche para acompañar a Osimani en la doble base. Hasta acá le ha resultado más sencillo a Sahdi jugar en la posición del dos que a Ale Konsztadt.

Después de los rubros "suspensión y declaraciones" a Leo Gutiérrez le costó meterse en la dinámica del equipo. Lo hizo relativamente bien en el cuarto partido pero estuvo muy errático en el quinto de la serie con Bahía (1/10 de campo). La importancia de Leo es total y hoy sus altibajos son muy bien respaldados por Alejandro Diez quien viniendo desde el banco se ha convertido en mucho más que una rueda de auxilio. Por defensa, por trabajo desde el perímetro o posteado (pocos jugadores pueden hacer las dos cosas) por inteligencia y aplicación táctica Diez es una pieza vital en la estructura de Fernando Rivero. Desde hoy deberá sortear duelos durísimos con Diego Cavaco, Federico Aguerre y Diego Guaita.

Por estilo de juego y personal esta serie invita a pensar en paridad de juego y resultados que se deciden por detalles. En la serie regular se han ganado entre si en ambas canchas. Gonzalo García deberá tomar nota del último partido, donde fue dominado por un Peñarol que a diferencia de hoy no contaba con Fabián Sahdi, Alejandro Konsztadt y Leo Gutiérrez. Sin esos tres jugadores, el "milrayitas" superó 81-61 en el polideportivo de Mar del Plata a Gimnasia que no tenía a Pablo Orlietti.

Peñarol tratará de tomar dicho partido como caso testigo de la fortaleza que posee cuando se lo propone, mientras sigue sumergido en irregularidad. Pero cuando el campeón dice presente lo hace con notable contundencia. Gimnasia piensa en darle continuidad a los dos últimos partidos de la serie con Boca Juniors. Aprovechar su momento de gol y castigar las debilidades de un Peñarol que muchas veces defiende bien pero no puede trasladarlos al ataque.

Hora: 21:30 (LNB contenidos)
Árbitros: Diego Rougier - Sergio Tarifeño y Mario Aluz
Estadio: Socios Fundadores - Comodoro Rivadavia

Fotos: Majo Gil y Prensa Gimnasia

Pablo Tosal
@pablotosal