Siete y contando

La Fusión salió decidida a marcar las diferencias desde el salto inicial. Una buena defensa, sumada a una excelente capitalización de las pérdidas le permitió vulnerar al local con un parcial de 11 a 3.

En ese auspicioso primer pasaje con 100% de efectividad, sobresalió Fabián Ramírez Barrios con seis unidades. Sin ser brillante y entendiendo el difícil presente, Peñarol mostró enjundia desde una presión a campo completo que le valió recuperaciones y transiciones en velocidad para equilibrar el marcador (15 - 17).

En esa tendencia frenética de posesiones cortas, Rob Whitfield se erigió como la carta goleadora con ocho unidades, sumado a dos robos importantes para el local. Quimsa, por su parte, continuó lastimando con las caídas de Gallizzi (8), para mantenerse al frente en un parcial inicial que cerró 22 a 19 para la visita.

Los primeros minutos mostraron a un Milrayitas con claras mejorías desde lo actitudinal, con una intensidad superlativa a la hora de disputar las posesiones. En un trámite algo incómodo, Quimsa continuó dañando la pintura, con Gallizzi y un ingreso interesante de Sebastián Acevedo (5).

Leandro Ramella apostó a desgastar al rival haciendo gala de su larga rotación (18 puntos desde la banca), algo que le permitió mantenerse al frente ante un Peñarol batallador. Lo mejor de la Fusión, continuó siendo el juego en las cercanías al aro, con la aparición de Eduardo Vasirani, que le permitió enhebrar un parcial de 10 a 0 que, sumados a cuatro largos minutos del local sin anotar, le valió a la visita para cerrar la primera mitad al frente 45 a 33.

El elenco marplatense extrañó el aporte de Al Thornton, en una noche errática en ataque y notoriamente endeble en defensa. El reinicio mostró al local activo desde la conducción de Joaquín Valinotti (14) imprimiendo velocidad pero, en contrapartida, la visita tuvo facilidades para quebrar la oposición con un Brandon Robinson que dominó desde el uno contra uno (9 puntos en el parcial).

En la propuesta del golpe por golpe, Quimsa fue infalible, no solo desde el dribling, sino también con asistencias al poste bajo con alta efectividad. El local buscó imprimir agresividad a los rompimientos, para dañar a la visita, algo que logró con Monacchi (17) como protagonista absoluto , con ocho puntos consecutivos, para acercarse en un cuarto de alto goleo que finalmente cerró 68 a 63 para la visita.

A pesar de correr desde atrás durante toda la noche, Peñarol llevó el juego a una arena de disputa donde la diferencias de la tabla de posiciones no se evidenciaron sobre el parquet. Promediando el parcial, la jerarquía del conjunto santiagueño fue suficiente para manejar los hilos del encuentro, bajo una sobria conducción de Bruno Sansimoni y el trabajo integral de Vasirani, tanto en la disputa del rebote (cuatro ofensivos), como en la anotación (13).

Con el reloj como aliado, la visita comenzó a imponerse en el trámite con una buena circulación de pelota, sumado al dominio en el poste bajo y varios puntos altos (Basabe 12 puntos) para establecer un parcial lapidario de 17 a 1 (87 - 69). El último campeón sacó a relucir sus cualidades, ajustando en defensa, con cambios en las cortinas y una presión a la línea de pases con mucho éxito (13 recuperaciones), sumado a la pluralidad de alternativas en ataque que le permitió darle forma a una importante y trabajada décima victoria, por 98 a 75.

Síntesis:

Peñarol (75): Valinotti 13; Whitfield 15; Monacchi 19; Thornton 8 y Everett 3 (F.I) Ruiz 7; Sarmiento 4; Morales 4; Filippa 2 y Chiaraviglio. D.T: Imanol Hernández.

Quimsa (98): Brussino 2; Robinson 14; Basabe 19; Ramirez Barrios 8 y Gallizzi 17 (F.I) Sansimoni 10; Vasirani 13; Rolfi 2; Acevedo 13 y Zezular. D.T: Leandro Ramella.

Parciales: 19 - 22; 33 - 45 (14 - 23); 63 - 68 (30 - 23); 75 - 98 (12 - 30).
Árbitros: Alejandro Chiti - Fernando Sampietro - Raúl Sánchez.
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas, Mar del Plata.

Raúl Della Rosa
@rauldellarosa.