Lanús hundió a Quilmes

Noche muy negra para Quilmes, noche de euforia para Lanús, que terminó formando un racimo de jugadores uno arriba del otro, enfrente de su banco, para festejar una gran victoria de visitante. Acaso una victoria en la que debió sufrir menos, por que jugó mejor en el segundo tiempo, pero tuvo un muy flojo 2-12 en triples en la segunda mitad que no le dejó dar el golpe definitivo.

Quilmes con voluntad, pocas ideas, mal porcentaje y mucho nervio se mantuvo en partido como podía. Ganó el primer tiempo mereciendo más, perdió el segundo tiempo, mereciendo menos. El orden de merecimiento nunca define un partido. El juego se cerró como una tómbola. Cayó del lado de Lanús por que metió el tiro del final y Quilmes no. Pero hay una historia, muy pesada, de 40 minutos que vale la pena contar.

El primer cuarto fue de Quilmes, que impuso superioridad con Assie en el dominio de la zona pintada (6 pts, 6 reb y dos tapas). Un triple de Müller y una mandada de Piñero a Bandeja culminaron las primeras acciones donde el cervecero sacó diferencias. Como Lanús no podía meter la bola con Taylor en la pintura, apostó con mala suerte al triple (2-8). Quilmes se escapó 17-12 y los granates se recostaron en zona para cerrar el primer parcial 19-14.

El segundo cuarto se dividió en dos con precisión matemática. Los primeros 5 minutos fueron de Quilmes, que se distanció a 10 puntos (32-22) con un parcial 13-8. Los últimos cinco fueron de Lanús, que con la zona 2-3, la conducción de Acosta y las definiciones de Levy y Prego metió un parcial 2-11 para cerrar apenas abajo por 3 puntos el primer tiempo (36-33).

En casi todos los rubros Quilmes fue superior ese primer tiempo. Dominó los rebotes propios y ajenos, tuvo a Assie como Figura, bien acompañado por Facundo Piñero. No apareció el tiro de tres puntos (1/7) para vulnerar la zona pero tuvo paciencia y su defensa fue lo mejor.

Lanús se puso en partido con muy poco. Una zona en defensa y le basto en ataque encontrar la sociedad Acosta-Levy y que el propio escolta, al lado de Laprovíttola tuviera mas injerencia para alimentar también a Prego. Calvi entró muy errático (1/4 en dobles y 0/3 en triples), quizas acosado por ser el foco de todos los hinchas en la noche marplatense.

El tercer cuarto fue un dolor de ojos. En los primeros 5 minutos el partido apenas había movido el score (3-4). Parecía un partido de fútbol. Mucha lucha, marca ferrea y muchos errores, forzados y no forzados, tiros limpios que no entraban y tiros cómodos que tampoco. En un partido así el primero que encuentra un jugador distinto, capaz de darle brillo al partido entre tanta oscuridad es el que sacará ventajas. Y fue Lanús que tuvo en el despertar de Lucas Victoriano 8 puntos seguidos (dos triples) para ponerse 42-51 arriba con un parcial final de 1-14 en los últimos 5 minutos.

Quilmes era una maquina de chocar de frente. No atacaba sino embestía. El base no hacía jugar, los tiradores no la metían (ni tiraban) y los pivotes recibían con doble marca encima y forzaban las situaciones en ataque. Las pérdidas de balón (6) eran la consecuencia de su falta de juego.

A esta altura se hizo evidente en Quilmes que necesita mucho de Carl Edwards y el extranjero perimetral esta en otra cosa. Defiende como puede defender cualquier foráneo goleador (Honrosa excepción a David Jackson), pero atacando Edwards parece otro. Toma decisiones equivocadas (cuando las toma) y en este nivel, a Quilmes no le sirve.

Para colmo Keep también esta muy fuera de foco en el equipo, sobre todo cuando lo defienden en zona. No sabe cual es su lugar en la cancha, se pierde.

De tal modo a De la Fuente solo le queda apostar a sus nacionales más Assie (A Brice le falta quedarse a barrer la cancha). Con la voluntad como argumento supremo y con Esteban López como estandarte Quilmes ensayó una reacción para el comienzo del último cuarto que lo devolvió a la vida con un parcial 9-0 (51-53) a falta de 5 minutos.

Santander tomó la decisión de bancar a Levy en cancha como alapivote, sabiendo que Jamaal no resolverá por acciones individuales sino que se alimenta de lo que Acosta, Victoriano o Laprovíttola le puede dar. Como el “negro” Acosta buscó cerrar el partido él en ofensiva y no tuvo suerte (0/4 en triples) más la férrea marca de Quilmes, el granate se quedó si gol.

Un doble de Taylor y otro de Prego le devolvieron una ventaja de 6 a falta de 1:50 (54-60) Pero Quilmes, que al menos corrigió las pérdidas para el cierre del partido (19 en total) fue todo garra y sacrificio para asfixiar a Lanús y llevar el juego a una definición agónica, que casi se corona con un triple de Esteban López a falta de 27 segundos para poner a Quilmes arriba 61-60 tras un parcial 7-0 en un minuto.

Santander pidió minuto y armó la jugada del final, que fue parecida a la del partido pasado. Una penetración de Victoriano, recibió los ajustes defensivos a la llave, quedando Calvi abierto a cinco metros paralelo al aro. Desde allí, Calvi (que entró por Levy para esa jugada) convirtió el doble a 10 segundos del cierre. En la corrida del final, después de un largo pase, Piñero tuvo un tiro de tres puntos para ganar, pero lo negó y quiso ir para abajo, lo encerraron, Brice Assie se abrió a tres puntos y terminó tomando un tiro incómodo, por arriba de la marca y apurado. Con todo en contra igual boqueó el aro y salió. Pero entre la mala última defensa que permitió el tiro de Calvi y es acción muy desprolija (jugada a todo nervio) el partido se decantó para el lado de la visita.

Síntesis
Quilmes (61): Martín Müller 3, Carl Edwards 11, Facundo Piñero 8, Brice Assie 17, Jason Keep 2 (FI); Esteban López 10, Nicolás Romano 5, Juan Cangelosi 3 y Leonardo Peralta 2. DT: Esteban De La Fuente.

Lanús (62): Lucas Victoriano 16, Sebastián Acosta 10, Fernando Malara 4, Jamaal Levy 11, Terrell Taylor 4 (FI); Nicolás Laprivottola 4, Fernando Calvi 6, Diego Prego 7 y Ruperto Herrera 0. DT: Silvio Santander.

Parciales: 19-14, 36-33 y 42-51.
Árbitros: Alejandro Chiti y Sergio Tarifeño.
Estadio: Once Unidos.
Tabla de Posiciones (clic acá)
Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.net)
Crónica: Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)


Lo ganó por juego colectivo

Bahía Blanca Estudiantes le ganó a Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia por 65 a 63. El partido se jugó en el Socios Fundadores.

Lo pudo haber ganado el local en la última jugada, pero como toda la noche eligió mal el lanzamiento; tiro forzado y fue de los bahienses.

Estudiantes se lo llevó por jugar en forma conjunta, defender bien y saber a que jugaban. Nunca arriesgó, se dedicó a jugar de acuerdo a sus límites de talento y físicos. Los dirigidos por Casalánguida nunca jugaron colectivamente. Mucho arresto individual. Sciutto y Rollins (no fueron titulares) le dieron esperanza al escaso público comodorense al jugar la última mitad como hacía tiempo no se veía, especialmente al repatriado desde Italia.

Franco y Amicucci junto a Barrera, al sorprendente Agostino y a los demás nacionales, le facilitaban la tarea a los tres extranjeros de Richotti. Todos al servicio del equipo y entonces sacaron 15 para irse tranquilos al descanso.

Los locales salieron con otra actitud, pero sin juego. Igual les alcanzó para ganar el tercer segmento con un Sciutto versión liga anterior; defendiendo y atacando, contagiando (y retando con razón) a los demás. Pero no le alcanzó. Buchanan y Romero muy lejos de los antecedentes de cada uno, entonces Estudiantes llegó al final con susto, pero justificando el triunfo.

Bahia se fue disfrutando de este juego ganado, pero preocupados por el futuro después de mediados de enero. En cercanías del vestuario visitante se escuchó decir “no se sabe si seguimos en la Liga”.

Al final el corazón de varios jugadores de los “verdes” pudo mas que la razón y el mal árbitro Guzmán fue muy cuestionado. Se esperan informes. Preocupa la falta de juego grupal del equipo patagónico. La baja performance de los que más ganan en salarios. Tarea para Casalánguida en lo poco que queda. El miércoles llega Quimsa con una plantilla que mete miedo.

Síntesis
Gimnasia (63): Nicolás Ferreyra 3, Federico Mansilla 3, Gary Buchanan 6, Andrés Rodríguez 5, José Alessio 4 (FI); Nicolás De los Santos 2, Germán Sciutto 21, Hakeen Rollins 15 (x), Diego Romero 4 y Martín Miner 0. DT: Nicolás Casalánguida.

Estudiantes BB (65): Pedro Franco 10, Andre Smith 2, Michael Robinson 13, Cristian Amicucci 8 (x), Lawrence Abney 15 (FI); Emiliano Agostino 9, Gerardo Barrera 8, Leandro Cecchi 0 y Matías Martínez 0. DT: Marcelo Richotti.

Parciales: 15-18, 24-39 y 43-50.
Árbitros: Daniel Rodrigo y Silvio Guzmán.
Estadio: Socios Fundadores - Comodoro Rivadavia.
Tabla de Posiciones (clic aca)
Foto: Gentileza Diario El Patagónico
Crónica: Ricardo Scazzino  - Especial para www.pickandroll.com.ar