Contra todos los pronósticos, Gimnasia de Comodoro Rivadavia se impuso como local ante el bicampeón Estudiantes de Olavarría por 82 a 78 y cortó una serie de 10 derrotas consecutivas. En el ganador se destacaron...
Autor:Florencia Cordero
Después de 51 días sin ganar, Gimnasia y Esgrima cortó anoche una racha de 10 derrotas seguidas al ganarle al campeón y puntero Estudiantes de Olavarría por 82 a 78, en partido que se desarrolló en el Socios, que completó la decimoctava fecha de la Liga Nacional y que fue televisado a todo el país.
Ayer Gimnasia mejoró muchísimo con relación a sus últimas actuaciones e hizo un partido muy inteligente para bajar a Estudiantes, que de igual modo sigue siendo puntero. En Comodoro la figura fue Pablo Maglia, mientras que el veterano Eddie Roberson, con mucho corazón, fue importante para el triunfo, además de ganarse la gente con su actitud y besando la camiseta verde frente a la hinchada.
El inicio del juego fue bueno, por los altos porcentajes y la diversidad de conversiones, Gimnasia basado en la puntería de Mauricio Pedemonte, los robos de Eloy Martín, la producción de Maglia y los 3 de 4 en triples en el primer parcial. Olavarría mostró su juego veloz y la espectacularidad de Leopoldo Ruiz Moreno.
Olavarría en el segundo cuarto llevó a Gimnasia bien abajo de su aro y lastimó descargando a la bocha con un impecable Gabriel Díaz, que metió ocho puntos con ciento por ciento de efectividad. Pero Comodoro no se cayó como en otras oportunidades gracias al ingreso de Roberson, que pide titularidad, que fue determinante para levantar el equipo con seis puntos y tres rebotes, siempre bien acompañado por Maglia.
En el segundo tiempo, con una defensa zonal, Gimnasia -arriba sumó con 10 puntos de Pedemonte y la capacidad de Roberson- le complicó toda la existencia al campeón, que no pudo superar esa oposición y además tuvo un 0 de 4 en tiros de tres en el tercer chico, y sólo contó con las corridas de Paolo Quinteros.
En el final el mens-sana apostó al mismo sistema defensivo y con mucha inteligencia, actitud y efectividad, se quedó con una destacada y casi impensada victoria. Olavarría no tuvo resto ni siquiera cuando el entrenador Sergio Hernández le pidió a sus dirigidos “vergüenza deportiva”.
Fuente: Diario “Crónica” de Comodoro Rivadavia (Chubut).