Estudiantes perdía 93-92 a siete segundos del final. Ruiz Moreno recuperó una pelota, le hicieron falta, metió los dos tiros y el Bata venció 94-93. Gracias al escolta, que ayer cumplió 30 años, su equipo sigue...
Autor:Pablo Tosal
Nadie se esperaba un final tan apretado. Ni los sorprendidos jugadores de Estudiantes, ni los entusiastas pibes de Ferro Carril Oeste, ni la gente que estaba en el Gran Gimnasio. Después de ganar el primer tiempo por 61 a 34, el equipo de Sergio Hernández cayó anoche en un bache sin fondo y dejó agrandar a un rival que lo puso contra las cuerdas. Los veinte minutos finales, que aparecían como un trámite para asegurar el triunfo, se convirtieron en una de las peores pesadillas para el conjunto olavarriense en todo el torneo.
Un recupero y dos libres de Ruiz Moreno a 7 segundos del final, y una mandada desesperada de Nelson Ingles en el cierre que fue frenada por la defensa local hicieron que Estudiantes terminara arriba por 94 a 93, se asegurara la clasificación entre los cuatro primeros y se salvara del papelón. Además, el final tuvo un condimento extra que fue la polémica. Porque todo Ferro pidió falta contra Ingles, pero los árbitros no la dieron y convalidaron el triunfo albinegro.
Veinte minutos de baile, un tercer cuarto que marcó el comienzo de la remontada porteña frente a un Estudiantes relajado y diez minutos finales de emoción y sufrimiento. Todo desembocó finalmente en dos puntos para el campeón, la clasificación asegurada para los cuartos de final y un alivio para todo el plantel y la gente.
Estudiantes había arrancado a todo ritmo y con una defensa asfixiante que provocó 13 pérdidas de Ferro en el primer tiempo. En esa primera parte, Diego Logrippo jugó los mejores veinte minutos desde que llegó a Olavarría, fue incontenible para los internos visitantes, y embocó los 20 puntos con que terminó la noche.
La potencia del ex Ferro y la puntería de Ruiz Moreno (hizo 12 en el primer parcial) ayudaron a Estudiantes a ganar el primer cuarto 30 a 15. En el segundo cuarto Hernández mandó a la cancha a Quinteros y el entrerriano le respondió con 16 puntos (4 triples y 2 dobles). Como sólo Sebastián Castiñeira sumaba para los visitantes, el Bata llegó al entretiempo con una cómoda ventaja de 61 a 34.
Entonces llegó la sensación de partido terminado, con clima distendido en la cancha y en las tribunas. Y Ferro aprovechó para acercarse. Primero le bajó el goleo a Estudiantes y después sumó en ataque con un Castiñeira inspirado y una mayor presencia del cubano Ruperto Herrera en la pintura. Los locales ya no pudieron correr como en el primer tiempo y en ataques estacionados el equipo pierde eficacia y sorpresa.
Cuando empezó el último cuarto, Estudiantes todavía ganaba por 14 puntos, una cifra que parecía conspirar contra el envión que había mostrado el equipo de Pablo D´Angelo hasta ese momento. Pero la defensa siguió siendo permeable, el aro rival no se abrió y el base Fernando Titarelli empezó a correr como no lo había hecho en toda la noche.
Ferro puso al borde de la derrota a Estudiantes con la misma receta que el bicampeón utiliza para destrozar a sus rivales: defensa al límite y contraataques a toda velocidad. Entre Titarelli, Castiñeira y un cada vez más agrandado Ruperto Herrera, los de Caballito mostraron que el milagro era posible. A 54 segundos para el final pasaron al frente (91 a 89) con dos libres del cubano. Después, Quinteros fue a la línea y sólo pudo embocar un tiro, y Herrera contestó con otros dos puntos para poner a Ferro arriba 93 a 90 a 23´´ del cierre.
En la réplica, se mandó Ginóbili, le hicieron foul, la jugada terminó en gol, pero los árbitros no lo convalidaron pese a que el bahiense ya había iniciado la recta final hacia el aro cuando le cometieron falta. El ex Quilmes metió los dos libres y Estudiantes quedó un punto abajo (92-93). Cuando Ferro repuso, Ruiz Moreno consiguió un recupero fundamental (la única pérdida de Ferro en todo el segundo tiempo) y cuando iba a tirar al aro le hicieron foul. Desde la línea no perdonó y, a falta de 7 segundos, puso el 94 a 93.
Esos segundos finales vieron a Nelson Ingles corriendo de aro a aro, saltando hacia el aro y chocándose contra todos los defensores de Estudiantes que lo fueron a tapar. Todos los visitantes pidieron falta, pero los árbitros no la dieron y permitieron que explotara el angustioso festejo bataraz.
Fuente: Diario “El Popular” de Olavarría
Estudiantes O (94): S. Ginóbili (10), L. Ruiz Moreno (20), G. Díaz (10), D. Logrippo (20), D. Osella (6), formación inicial; P. Quinteros (21), L. Drazeta, F. Marín (1) y G. Rivera (6). Entrenador, Sergio Hernández.
Ferro Carril Oeste (93): F. Titarelli (14), L. González (4), F. Senitzky (13), C. Castro Naya, R. Herrera (26), formación inicial; S. Castiñeira (31), N. Ingles (3), V. Sudol y J. Guldrich (2). Entrenador, Pablo D´Angelo.