La victoria sobre Libertad de Sunchales, la diferencia entre ambos, la ovación como despedida a Ben Ebong, el volumen de juego, son las aristas salientes de otra noche de color en Once Unidos con el triunfo...
Autor:Pablo Tosal
Las despedidas siempre son tristes. Por lo menos eso dice ciertas pautas de la vida. Sin embargo la mezcla de agradecimiento, euforia, alegría y tristeza anoche se mezclaron el a dios a Ben Ebong, un jugador que se destacó tanto como persona como por sus dotes de jugador y ayer contribuyó de la mejor manera a derrotar a un rival directo por el acceso entre los cuatro primeros.
Bien podría decirse que Quilmes lo líquido en el primer cuarto cuando se impuso por 25-14, pero consiguió efectos mayores a la mera diferencia de puntos, a saber: Matías Ibarra lo enloqueció con la marca a Sucatzky y el base sunchalenses se puso con tres faltas y dejó el juego. Cavaco maniataba a Cerutti y Farabello a Pérez. Y los internos de Quilmes se imponían sobre Gonzáles y Benítez. Para colmo, el pibe Acosta, equivocó los caminos y en ves de distribuir juego, se apuró y casi como único recurso apelaron al tiro de tres (2/10). El cervecero muy sólido lastimó con Boozer (10 puntos) cerquita del tablero.
Para el segundo segmento Cerutti se cargó el equipo al hombro y con 12 puntos en el parcial le devolvió el gol a su equipo. Libertad era todo vértigo y Quilmes se contagió. Pablo Gil, que relevó a Cavaco metió 10 puntos seguidos, pero el equipo perdió cuatro pelotas por imprecisiones y sobrevivió porque de afuera terminó con 4/5 en triples. La diferencia al cabo de los primeros 20 era de 14: 53-39.
Para el complemento volvió Sucatzky y tomó la decisión del partido. Se metió en una vorágine de correr y tirar, sin rebotes, sin balance defensivo. O lo ganaba o lo perdía por 25. Y esto último fue lo que sucedió. El equipo del huevo, defendió los 40 minutos con altísima intensidad, y jugó a lo que más le conviene. Farabello (11 asistencias y 10 puntos) retornó al nivel de fechas pasadas. Entre Boozer y Ebong metieron 43 puntos y estuvieron muy activos. Para el final, cuando restaban todavía más de cinco minutos lo único que se esperaba era la diferencia final. Por eso, a pesar de la distancia los titulares terminaron el partido, salvo Ben Ebong que faltando 45 segundos salió para la ovación de las casi 2000 personas que lo despidieron de pie.
El cervecero llegó al lugar que ansiaba, cuando restan tres fechas el cuarto lugar le sienta cómodo. Ahora será tiempo de pensar en reestructurar el equipo para suplantar a alguien que no tiene un sustituto natural. Habrá que ver.
Pablo Tosal
Quilmes (103): M. Ibarra (15), D. Farabello (10), D. Cavaco (18), L. Boozer (21), B. Ebong (22), formación inicial; P. Gil (15) y O. Arce (2). DT: Oscar Sánchez.
Libertad (84): F. Sucatzky (13), M. Cerutti (27), E. Pérez (6), J. Benítez (12), R. González (12), formación inicial; M. Grooms (6), F. Navarrete (4), E. Michel y S. Acosta (4). DT: Daniel Rodríguez.
Cuartos: Quilmes, 25-14; 53-39 y 77-64. Árbitros: Pablo Estévez y Leonardo Javier Mendoza.