Luego de una racha negativa que, entre otras cosas le costó perder gran parte del sueño de estar entre los ocho mejores de la serie regular, Pico F. Ball logró volver a la victoria de una forma notable. Anoche,...
Autor:Pablo Tosal
La palabra construir es la correcta, ya que el partido fue teniendo las etapas de toda gran victoria. Primero fue una lucha pareja, donde la actitud para defender tomando bien arriba cada intento ofensivo marplatense, le permitió a Pico recuperar balones, correr y empezar a golear. De todos modos, le tuvo que encontrar la vuelta a la decisión del “Huevo” Sánchez de jugar el segundo y tercer cuartos con dos pivotes (Arce y Boozer), para recién ahí apretar el acelerador y sacar ventajas decisivas, superiores a los 20 puntos como se dio en el primer tramo del último cuarto. De allí en adelante, hubo tiempo para los recambios, para los lujos y los aplausos; algo que permitió un relajamiento donde Quilmes intentó una levantada desesperada la que sólo le alcanzó para achicar la luz de diferencia en el marcador.
Pico se abrió camino en esta noche con el goleo del paraguayo Martínez que sólo en el primer cuarto anotó 18 puntos (3 triples). Esa fase del único extranjero albinegro se complementó con toda una mediacancha desequilibrante, ya sea en el manejo de la base de Del Sol como en las mandadas de Lescano.
En defensa, la marca sobre Cavaco fue una obsesión de toda la defensa quilmeña, porque si bien sabían que en el juego interno siguen dando mucho handicap desde la lesión de Reinick, dejarlo jugar y golear a Cavaco hubiera sido mortal. Así Pico, con mucho esfuerzo, mantuvo diferencias en el marcador que en muchos pasajes fueron de cuatro puntos y no mucho más, lo que mantuvo la luz de alarma encendida.
Pero, sólo fue eso el peligro que tuvo que atender el “Decano”, ya que entre el final del tercer capítulo y el inicio del último, el despliegue se combinó con mucho gol y de ese modo la noche quedó asegurada.
Es bueno remarcar en esta producción el aporte del banco, no con gol pero sí con actitud defensiva en valores juveniles como los Cuadrelli o el chico Bianco que no tuvo ningún problema de fajarse en las zonas pintadas.
En fin, Pico luchó, jugó y brilló, en ese orden para un triunfo que seguramente será mucho más valioso que el punto que pudo anotar en la tabla.
Fuente diario “La reforma”
Pico (102) : A. Del Sol (17), M. Lescano (26), E.J. Martínez (28), J.C. Muñoz (14), G. Cuadrelli (8), formación inicial; S. Cuadrelli (2), M. Bianco (4), M. Dómina y P. Wendebourg (3). Entrenador, Carlos Bualó.
Quilmes (93) : M. Ibarra (16), D. Farabello (10), P. Gil (24), D. Cavaco (4), L. Boozer (23), formación inicial; O. Arce (14), L. Sequeira (2). Entrenador, Oscar Sánchez.