El enorme despliegue de “Pichi” Campana condujo a Boca Juniors a su segunda victoria consecutiva sobre Obras Sanitarias, por 83 a 74, y lo dejó en el umbral de clasificar para los cuartos de final de los...
Autor:Florencia Cordero
La gran noche de Campana, muy parecido al de las grandes épocas, fue demasiado para un Obras que cedió en el último cuarto ante los mayores recursos de su rival. Pichi marcó 28, con 10-14 en dobles y 5-6 en libres. Además asistió a sus compañeros. Y con Campana caliente, los de Duró se animan a todo. “Está tremendo. Eso nos da una gran confianza de cara al futuro, ya que es nuestro hombre clave”, dijo Maxi Stanic.
Sin embargo, al local le costó más que en el primero de la serie derrotar a Obras. Es que los dirigidos por Cadillac jugaron un gran primer tiempo con la producción de Pellettieri (8-12 en dobles en el partido) y Ricci (6-11) en la zona pintada y la conducción de Brooks (ocho asistencias). Así la visita llegó a tener 11 de ventaja (35-24) en la mitad del segundo cuarto, pero sufrió la defensa a presión de Boca, que le provocó 13 pérdidas. La aparición de Campana, que tuvo un largo descanso en ese parcial, con siete puntos al hilo empezó a enderezar el rumbo.
Con el aporte del debutante Jourdon, que se mostró como un jugador polifuncional, Boca se adelantó 51-46 en el inicio del tercero. Y tomó el control del partido. El grandote Boston borró de la cancha a los internos rivales y también aportó en la ofensiva. Obras no aguantó más y el ganador se floreó en el chico final, aunque fracasó en los tiros de tres, con 3-20 en el juego. El Tola, muy enojado, se la agarró con el cubano Díaz porque pidió que secaran la cancha y Dominé falló mucho (2-8 en triples).
En el final los jugadores de Obras se insultaron con una parte de la hinchada de Boca. El único ubicado fue el DT Cadillac que intentó tranquilizar. Es que él, ganador como pocos, sabe que los guapos se ven en la cancha.