Boca tuvo que sufrir hasta el final

Sólo tres partidos necesitó Boca para conseguir el pase a cuartos. El equipo de Fernando Duró, quinto en la fase regular, se anotó anoche la séptima victoria sobre Obras en la temporada y ahora espera a Libertad en un cruce que promete. No quedaron dudas de su superioridad en la serie, a pesar de que en el último tuvo que sufrir bastante, más precisamente hasta la chicharra final.

A cinco segundos, perdiendo por un punto, Gabriel Cocha encaró el aro y recibió una falta. Con los dos tiros libres se terminó de convertir en el héroe. Su planilla demuestra que hizo de todo: a los 23 puntos les sumó siete rebotes y cuatro asistencias. Además, por si falta algo para asegurar que es un comodín, rindió de la misma manera como escolta o alero. José Luis Díaz, el cubano de los de Núñez, se vistió de villano al no poder sacar el tiro cuando se consumía el tiempo.

Boca nuevamente aprovechó al máximo las variantes que le otorga su largo plantel. El técnico Duró, por ejemplo, utilizó diez jugadores en el cuarto inicial. En total contó con 33 puntos de los suplentes, entre los que se destacó Keenan Jourdon, un estadounidense capaz de moverse en la pintura y lastimar desde afuera.

En el primer tiempo, los 14 de Cocha y Campana le sirvieron a Boca para manejar el partido. Tras el descanso, sin embargo, Pichi no volvió a meterla y el Negro recién sumó en los cinco minutos finales. Los de Cadillac, a pesar de que Pellettieri acumuló su cuarta falta al minuto del tercer cuarto, torcieron la historia con una defensa más firme y efectividad en ataque. Tres bombazos de Dominé, los ocho rebotes totales de Ricci y ocho puntos de Brooks le permitieron ponerse 65-59 a los siete del tercero.

Hasta que Cocha hizo su reaparición con un triple para empatar en 75 a cinco minutos. Boston, en su mejor acción de la noche, acertó un doble y libre a 40 segundos. Brooks respondió con una jugada similar para los locales, pero las manos de Cocha no temblaron al final, como tampoco las de sus hinchas para festejar.

Fuente: Andrés Pando (Diario “Olé”)