El lobo de los milagros gritó campeón

En el juego, Boca salió decidido a ganar para forzar un tercer y decisivo encuentro. Comenzó con el pie derecho ya que Matías Sandes se encargó de poner arriba a los xeneizes. Gimnasia estaba perdido en el campo y este desorden le costó caro al equipo platense que veía como su rival lo dominaba en todo el campo. El delirio del local finalizó con la mejoría de Gustavo Roque Fernández, autor de 6 puntos, y en la pintura se produjo el duelo López- Leiva ya que ambos pivots fueron muy utilizados en la noche. Con Guaita y Leiva Boca fue un poco mejor y terminó arriba por 26-23 en el primer cuarto.

Con un parcial de 8-0 el lobo pasó al frente. Las penetraciones de Hernán Quevedo y un activo Gustavo Oroná, que cada vez juega mejor, fueron mucho para Boca que no encontraba soluciones. La respuesta llegó desde el banco, y Maximiliano Maciel junto a Leiva transformaron un parcial de 12-0 para que el local se lleve el primer tiempo por 48-43.

El juego fue muy entretenido durante los 20 minutos. Los dos querían la victoria y dejaron todo en el campo. El encuentro tuvo todas las acciones posibles, pero los dirigidos por Ronaldo Córdoba cerraron mejor y marcaron una leve ventaja.

Gimnasia entró frío al tercer cuarto y Boca lo aprovechó para establecer un parcial de 5-0 para estirar a 10 la diferencia. Resultado que no iba a variar hasta minutos finales. El local insistió en la pintura pero esta vez fue Guaita el responsable del goleo. Cuando el pivot era marcado, descargaba hacia los perimetrales que bombardeaban de 6.25 metros. Gimnasia aportó a su perímetro y se basó en el goleo de Fernández y Moravansky. Maciel robó una pelota sobre el final y convirtió para terminar 73-65 a favor de Boca.

Los platenses no podían reducir la diferencia. Cuando bajaban a 6, su rival anotaba un triple y volvía a 10 ó 12 y se debía comenzar de nuevo. Fue todo muy peleado ya que el reloj era el principal enemigo de los albiazules. Boca se escapó y sacó la máxima diferencia de 13 y el lobo tocó fondo. García dispuso una defensa a presión en todo campo y el local enloqueció.

En pocos minutos perdió pelotas increíbles, hasta llegar a las 6 consecutivas. Gimnasia aprovechó los errores del rival y se puso en juego. La garra de los platenses más el empuje de 200 hinchas que se acercaron hasta el estadio, con muchas banderas, hicieron real algo que parecía imposible.

A falta de 38 segundos el lobo pasó al frente por 86-85. Boca anotó en la siguiente jugada para ser otra vez líder pero Fernández le dio dos puntos a su equipo para llegar arriba por 88-87. El local no pudo anotar, merced a los nervios, y López fue cortado con falta. El pivot rosarino pasó por caja sumando dos más y llegó el final para alegría tripera.

“Hicimos un gran partido. Sabía que el equipo no se iba a entregar fácilmente y sobre el final lo dimos vuelta para pasar al frente”, mencionó un emocionado Roberto López. El pivot se encargó de cristalizar la victoria con dos simples. “Fueron dos puntos vitales. Me concentré y sabía que no podía fallar”.

“A lo último ganó la experiencia. Los mayores hicieron que el lobo triunfe en el final para quedarse con la Superliga”, dijo Juan Manuel Rivero, que ayer sufrió más de la cuenta debido a que no pudo participar por un esguince de tobillo.

Para Gustavo Oroná fue muy importante este certamen ya que participó y pudo tomar ritmo de competencia, pero tiene un gustito especial. “Este título es el primero de mi carrera y lo quiero disfrutar junto a este grupo que es bárbaro. Cuando llegué a Gimnasia no imaginaba jugar la Superliga, pero todo se fue dando muy rápido y hoy estoy feliz por la conquista”.

Ramiro García fue otro de los juveniles que aprovechó las oportunidades en este certamen. “La Superliga se creó para tomar ritmo y experiencia y creo que todos los chicos del club aprovecharon la oportunidad y nos servirá para un futuro. Todos respondimos a los pedido por Gonzalo (García)”.

Con el triunfo, el lobo estiró la paternidad sobre Boca ya que los últimos 4 juegos oficiales fueron ganados por el conjunto mens sana. Luego del tradicional corte de redes por parte de Hernán Quevedo y Bruno Oprandi, Gabriel Moravansky, capitán del equipo, recibió el trofeo y los mens sana iniciaron la vuelta olímpica.

Después llegó el turno de las palabras del técnico, que en el vestuario les recalcó a sus dirigidos el valor de conseguir un título. A la salida del estadio, cada jugador fue aplaudido por los 200 hinchas que se llegaron hasta La Boca. En el viaje de regreso todo fue alegría y la mayoría recordó momentos de la brillante campaña mens sana que finalizó con 16 victorias y 2 derrotas.

Ya en La Plata, el plantel festejó en un restaurante pegado al estadio de fútbol previo a una escala por el Polideportivo. Ahí todos se reencontraron y fueron acompañados por familiares y amigos para cenar. La fiesta finalizó, a altas horas de la madrugada, con un brindis celebrando una nueva conquista del basquet gimnasista.

Síntesis:
Gimnasia y Esgrima La Plata (90): Gustavo Roque Fernández 23, Hernán Quevedo 13, Gabriel Moravansky 14, Roberto López 18, Ramiro García 4 (fi), Gustavo Oroná 15, Santiago Ramati 0, Bruno Oprandi 3. DT: Gonzalo García.

Boca (87): Juan Sartorelli 6, Matías Sandes 8, Matías Fioretti 10, Diego Guaita 15, Martín Leiva 23 (fi), Maximiliano Maciel 13, Axel Weigand 4, Hernán Soffritti 0, Ariel Pau 8. DT: Ronaldo Córdoba.

Jueces: Sampietro, Smith y Bestilleiro.
Parciales: 26-23, 48-43 y 73-65.
Estadio: Luis Conde.
Figura: Gustavo Roque Fernández con 23 puntos. Dobles: 2/5. Simples: 7/8. Triples: 4/6.
Serie: Gimnasia se coronó campeón al ganar la serie 2-0.

Números:
Gimnasia y Esgrima: Dobles: 16/32 (50%). Simples: 25/28 (89.2%). Triples: 11/20 (55%).
Boca: Dobles: 26/39 (66.6%). Simples: 17/19 (89.4%). Triples: 6/15 (40%).

Juan Manuel Rodríguez
ruchimar@speedy.com.ar