La selección nacional derrotó a Brasil por 78-67 en un duro partido que pudo recién definir en el último cuarto y clasificó para la semifinal donde enfrentará a Alemania. Las figuras fueron Nocioni y Oberto.
Autor:Pablo Tosal
Después de la gran euforia por la victoria de anoche frente al Dream Team, la selección tardó más de un tiempo en entrar al juego. Y el duro plateo táctico de Brasil, lo complicó mas de la cuenta. Sólo la jerarquía del mejor equipo argentino de todos los tiempos pudo quebrar su propia mala noche y la oposición del rival.
El inició no hacía presagiar la noche que vendría, ya que las primeras tres acciones del partido fueron tres asistencias de Pepe Sánchez para fáciles conversiones de Oberto yla diferencia era de 5 (6-1). Luego todo se vino abajo.
La defensa de Brasil se puso muy dura, marcando bien línea de pases primero y después se recostó en una zona 2-3 que fue un verdadero jeroglífico para la ofensiva nacional.
Con poco, muy poco en ofensiva, el equipo de Helio Rubens dio vuelta, primero el desarrollo y luego el marcador hasta ponerse arriba con una diferencia de 5 (12-17). El tiro perimetral argentino no aparecía y sólo la defensa mantenía el resultado. La luz de un punto llegó al final y ganó el cuarto por dos: 18-16
El segundo cuarto fue el de la producción ofensiva más baja del torneo. Apenas 11 puntos. Brasil siguió plantado en zona y los muchachos de Magnano tuvieron mucha pasividad para atacarla, lento de movimientos, y pésimos porcentajes de tiro (19% en triples). Los cariocas (con un inspirado Anderson en ofensiva) metieron el partido en el freezer y los pusieron donde más le convenía.
Pero si no se podía adelante, inteligentemente Argentina nunca se desconcentró atrás. Luchó mucho cada pelota y en hombre a hombre secó la ofensiva brasileña. Veintinueve iguales marcó el tablero al final del primer tiempo. No aparecía Ginóbili, Pepe Sánchez lució muy lento para organizar, y los internos nunca consiguieron espacios para moverse. Sin tiro de tres puntos fue un milagro no irse al descanso largo perdiendo el partido.
El comienzo del tercer cuarto fue un baldazo de agua fría. Brasil encontró un par de triples y sacó una diferencia de 6 (39-33) restando 6 minutos. Pero la reacción debía llegar. Se produjo de la mano del “Chapu” Nocioni (lo pretendería San Antonio Spurs) y Fabricio Oberto. Desde la conducción Montecchia le dio más vértigo a la ofensiva y la defensa – como siempre - fue una columna vertebral.
En 3 minutos Argentina produjo un parcial de 13-0 y pasó a ganar 46-39. La diferencia no era mucha pero mentalmente abrió el partido. Lo quebró a Brasil que perdió definitivamente el férreo planteo táctico.
La renta era de 8 al ingresar el último cuarto (51-42) y esta visto que si algo caracteriza a este equipo argentino es su espíritu de lucha. Siguió defendiendo con la misma intensidad de todo el partido, y no dejó que el perímetro brasileño tomara tiros cómodos.
Helio Rubens apostó a cuatro hombres bajos y un solo pivote como argumento táctico y por eso se refugió en zona. Pero perdido por perdido volvió al hombre a hombre donde Emanuel Ginóbili se divirtió con los rivales en el uno contra uno.
Para el tramo final, la diferencia osciló entre los 13 y los 15 puntos, que los nuestros supieron administrar muy bien, jugando con la desesperación rival. La figura de Nocioni en defensa y aportando puntos claves y la de Fabricio Oberto en los dos tableros crecieron al punto que Rubén Magnano nos los sacó, prácticamente en todo el partido.
Atrás quedará el flojo partido de los perimetrales, el pésimo porcentajes en triples y la lentitud y pasividad de movimientos para atacar una defensa zonal. Sin mucho juego, con gran corazón y todo defensa Argentina se metió en semifinales donde enfrentará, otra vez, a Alemania.
Argentina 78: Juan Ignacio Sánchez (0), Emanuel Ginóbili (19), Hugo Sconochini (0), Fabricio Oberto (19) y Rubén Wolkowyski (0) (F.I.). Leandro Palladino (3), Luis Scola (13), Alejandro Montechia (8), Leonardo Gutiérrez (0) y Andrés Nocioni (16). DT: Rubén Magnano.
Brasil 67: Demetrius (3), Vanderlei (18), Marcelinho (14), Anderson (10) y Sandro (2) (F.I.) Rogerio (12), Guillherme (5), Helinho (3) y Alex (0).DT: Helio Rubens.
Parciales: 18-16, 29-29, 51-42 y 78-67. Arbitros: Mercedes (Dominicana) y Oget (Turquía).