Central Entrerriano es de primera

Ibáñez lo dio por finalizado a falta de 29 segundos y la invasión para el festejo se desató en el Bértora. Atrás habían quedado 45 minutos de garra y amor propio. El sueño de jugar en la elite del básquetbol se cristalizó por las ganas de un conjunto de pibes que al comenzar la temporada no eran tenidos en cuenta.

Los fantasmas de la final perdida ante Quilmes sobrevolaron el colmado gimnasio pero la hinchada rojinegra le aportó la cuota de esfuerzo que los jugadores trasladaron al parquet. Lo contrario sucedió en Conarpesa, debido a que cuando las cosas no funcionaron a la perfección el poder económico de una empresa valió más que las ideas deportivas.

Central fue superior en la serie por la garra y pasión expresada por un grupo de doce jugadores. La eliminatoria fue pareja en el plano deportivo pero no en lo emotivo, y no fue extraño pensar en un quinto partido cuando el envío de tres puntos de Marani, al final del tiempo regular, viajaba por el aire de un silencioso y expectante estadio.

La fiesta del festejo fue total. García fue llevado en andas en el aro que da a calle Alberdi y cortó las redes. En el otro sector, un hincha emocionado se colgó el trofeo que representa la palabra campeón. Los cánticos a La Unión no tardaron en llegar y más tarde el hit: “Los pibes tienen huevos” retumbó en los cuatro costados.

Antes de los festejos hubo un encuentro parejo donde los dos dejaron todo por cumplir su principal objetivo: el ascenso.

Conarpesa arrancó enchufado sabiendo que no tenía margen para el error si quería continuar con vida en esta serie. Una tremenda producción de Villares adelantó a la vista por 8-0. Central no se quedó atrás y con dos triples de Sciutto más la colaboración de Segura en la toma de rebotes se puso en partido.

Un local apresurado por los nervios de la obtención del ascenso hizo que las ofensivas no salieran a la perfección. Conarpesa, con la seguridad del rebote, estableció una leve ventaja que mantuvo hasta los últimos minutos. García entró en confianza con la red y empató en 22 el primer capítulo.

Villares continuó imparable en la ofensiva (17 puntos en el primer tiempo) y los langostinos se escaparon 30-35. El local, con un ataque repartido, pasó al frente al imprimir un parcial de 6-0. Nóbile tomó la posta goleadora en el elenco de Sanz y Riolfo con un impecable trabajo (9 puntos) le devolvió la ventaja al local para que clausurara ganador el primer tiempo por 45-41.

La historia no cambió al regresar de los vestuarios y el encuentro prosiguió con su ritmo de gol a gol y torno cambiante. Central se vio favorecido por la cuarta personal de Pedemonte y Riolfo se adueñó de la pintura. A los locales se les nubló el panorama cuando Sciutto se resintió de la rodilla y sus internos se cargaron de personales.

Rodríguez y Nóbile cargaron con las ofensivas, siendo éste último el goleador del período con 14 puntos. Los internos visitantes no encontraron respuestas y cada pelota que les llegó a sus manos la convirtieron en gol fácil. Martín suplantó en el ataque a Sciutto pero la tibia marcación cerca de los canastos le otorgó el liderato a los langostinos.

Treise anuló a García que previamente había lastimado y mucho pero Calvelli apareció para salvar a Central y otorgarle el empate en 70.

Nóbile continuó con la mano caliente y Conarpesa se alejó por 70-74. Central lo igualó pero pasó al frente con un triple de Franco a falta de seis minutos. El juego se hizo de ida y vuelta pero el local tuvo a Segura firme en la toma del rebote que luego de un triple fallido por Riolfo volvió a adelantar a Central para desatar el delirio.

La historia no concluyó porque Conarpesa, pese a contar con la baja de Rodríguez, apostó a la eficaz noche de Nóbile. Riolfo puso las cosas 94-90 y luego de dos simples de Villares retornó Sciutto. La presión ejercida la devolvió la posesión a Conarpesa pero Casemayor al convertir un libre de dos no pudo empatar las acciones. .

Con 21 segundos García fue a la línea y con una anotación le otorgó la ventaja de dos puntos (95-93). Nóbile lo empató en 95. García, con menos de diez segundos, tomó el balón y perdió la posesión al lado de Demti. Con un segundo por jugar Marani falló el triple que golpeó en el soporte del aro para dar paso al suplementario.

En los cinco minutos siguientes Central puso más garra que juego. Ambos elencos se encontraron diezmados por las salidas de jugadores por faltas. Pikaluk adelantó al local y Martín, con un doble y la anotación del bonus desde la línea, puso arriba a Central por 100-97.

Nóbile falló su intento y García puso dos más en la cuenta del local. Otra vez el goleador aprovechó su oportunidad de codearse con la red e Iturria perdió la posesión. La fiesta se fue armando cuando Pikaluk anotó cuatro libres consecutivos y Franco con otros dos le dio el toque final. Cuando restaban 29 segundos Riolfo se guardó la pelota y la invasión dejó paso al festejo en el parquet.

Síntesis

Central Entrerriano (110): Martín 10, García 29, Sciutto 15 (x), Riolfo 17, Segura 11 (x) (fi), Pikaluk 13, Calvelli 9 (x), Franco 6. DT: Demti.

Conarpesa (99): Del Sol 10, Pedemonte 4 (x), Villares 25 (x), Nóbile 35 (x), Rodríguez 16 (x) (fi), Stanford 0, Casemayor 3, Marani 6, Iturria 0, Treise 0. DT: Sanz.

Jueces: Ibáñez, Niedfeld y Fernández.
Parciales: 22-22, 45-41, 70-72 y 95-95.
Estadio: José María Bértora.
Figura: Diego García.
Serie: Central Entrerriano ascendió a la Liga Nacional al ganar 3-1.

Las voces de los campeones

“Es una alegría única difícil de explicar. Es importante para el club y la ciudad y espero que ahora la gente disfrute de la Liga Nacional porque nosotros sólo cumplimos nuestro trabajo”, dijo Germán Sciutto luego de saludar y abrazarse con un centenar de hinchas.

“Nadie nos daba como candidatos y nos dimos cuenta que nadie gana antes de jugar. Ganamos en casi todas las canchas y realizamos cosas que nadie las tenía pensado. Este ascenso significa muchísimo. Antes había ascendido con San Isidro pero este campeonato es lo máximo que me sucedió”.

Luis Pikaluk agregó: “Estoy muy emocionado con este triunfo. Esto demuestra que es un campeonato duro para el cual tuvimos que trabajar muchísimo pero ahora todo es de la gente que tiene que disfrutar de un ascenso porque ellos se lo merecen por el respaldo que nos brindaron a lo largo de la temporada”.

El pivot reflexionó sobre los costos de ambos planteles pero reconoció que enfrente tuvieron a un gran equipo que dejó todo por la victoria. “No hace falta tener un equipo con mucho dinero para ascender. Nos enfrentamos a un equipazo como lo fue Conarpesa pero nosotros dejamos todo para festejar este ascenso. Nos sacamos una presión enorme que apareció en los minutos finales porque nos quedábamos sin jugadores pero pusimos huevos y nos quedamos con el título”.

Agradecimiento

Pick And Roll agradece a todo el personal del Diario El Argentino que abrió sus puertas por completo para que se pueda realizar esta edición del ascenso de Central Entrerriano.

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