En un emotivo partido que se definió en los segundos finales, el Barcelona venció al Pamesa Valencia por 76 a 74 y se adelantó 1 a 0 en la final de la Liga ACB. La figura del juego fue Fabricio Oberto con 20 pts. y 14 rebotes.
El Barcelona dio primero y mantiene la ventaja de pista al imponerse al Pamesa en el primer partido de una serie final de la Liga ACB que se presume trepidante si mantiene el ritmo y la tensión de este duelo inicial.
Las claves del resultado final fueron la presión que pueden aplicar los aficionados del Palau Blaugrana en los momentos clave y la firmeza de muñeca en esos mismos instantes de Juan Carlos Navarro y Sarunas Jasikevicius.
Al Pamesa, como le ha sucedido a otros muchos equipos esta temporada, le falló sentenciar cuando podía, porque tuvo la ocasión, y permitir que el partido se decidiese en un final ajustado, en los que el Barcelona se ha convertido en maestro.
Hasta esos compases decisivos pasó mucho en un partido que, desde los banquillos, comenzó como una partida de ajedrez según el arma que el rival ponía sobre la mesa.
Dejan Tomasevic, pero sobre todo Fabricio Oberto, empezaron a hacerse suyos los aros y, con 6-10 en el marcador, desviaron el partido hacia esa batalla táctica de banquillos.
Svetislav Pesic ya se había encontrado con una situación similar en la final de la Euroliga, cuando el Benetton amenazaba con dos pívot sin muchos centímetros pero con demasiada movilidad como Jorge Garbajosa y Marcelo Nicola.
La respuesta de Pesic fue entonces la de poner en la pista a dos cincos -Roberto Dueñas y Patrick Femerling- y, ante el Pamesa, se acogió al mismo argumento.
El técnico serbio, que dio entrada en el perímetro a Jasikevicius y a Navarro, acertó plenamente, como lo demuestra el parcial de 10-0 que hizo pasar el marcador de un 6-14 en el minuto ocho a un 16-16 en el último del primer cuarto, que acabaría en empate gracias a una canasta final del Pamesa.
En el segundo periodo, el banquillo valenciano se dio cuenta de que la solución pasaba por correr, porque a un ritmo lento no había nada que hacer ante los centímetros azulgrana en la pintura.
Con esa estrategia, en la que tuvo mucho que ver Bernard Hopkins, el Pamesa volvió a ponerse con ventaja (25-26, min.15), después llegarían unos momentos de equilibrio por atasco táctico de los entrenadores y, finalmente, una nueva exhibición de Oberto que situó las diferencias al descanso en cinco puntos (32-37).
El Barcelona basó su estrategia en la reanudación en un buen trabajo en defensa que le permitió empatar el partido en tan sólo un minuto y medio (37-37).
El Barcelona fue anotando durante este periodo hasta obtener igualar su anterior máxima ventaja de cinco puntos (53-47, min.29), aunque una posterior reacción valenciana redujo las diferencias a un solo punto (53-52) al término.
El despertar de Nacho Rodilla en el último cuarto fue vital para que el Pamesa se sintiese en el camino de la victoria (55-62, min.35), pero Juan Carlos Navarro con un triple y Sarunas Jasikevicius con un dos más uno -siempre los mismos- se encargaban de rebajar la euforia al rival (61-62).
Llegó entonces una falta a Jasikevicius que el lituano protestó hasta ver la técnica, con lo que el conjunto valenciano dispuso de tres tiros libres que le permitieron situarse con un 61-65, aumentado poco después a 61-67.
El Palau Blaugrana salió entonces en defensa de los suyos y los colegiados señalaron dos antideportivas al Pamesa, ambas en la lucha por el rebote defensivo con Gregor Fucka que sirvieron para que el marcador se estrechase hasta un 68-70 a dos minutos del final.
Un error en el pase de Sarunas Jasikevicius, con falta posterior para frenar el contragolpe de Víctor Luengo, volvió a dar alas al cuadro levantino (68-72), pero llegó entonces una triple con falta adicional, aunque erró el tiro, para Navarro que ponía el partido en un pañuelo (71-72).
Esos finales apretados son los que le gusta jugar al Barcelona y fue a cincuenta segundos del final cuando Jasikevicius anotó un triple que ponía a su equipo por delante (74-72) para desesperación de los jugadores rivales.
José Antonio Paraíso hizo lo que pudo para forzar la prórroga con un palmeo que equilibró los guarismos (74-74), pero a un segundo y dos décimas para la conclusión, el base lituano del campeón de Europa y Copa del Rey templó la muñeca y anotó la canasta decisiva que permite al favorito encarrilar la serie por el título liguero.
Los argentinos
Fabricio Oberto: 22 puntos en 37 minutos con 9/16 en dobles, 4/5 en libres, 14 rebotes, 5 asistencias y 2 recuperos. Alejandro Montecchia: no convirtió en 13 minutos con 0/1 en triples, 2 rebotes y 1 asistencia. Federico Kammerichs: no convirtió en 7 minutos con 2 rebotes.