Cuatro meses después de haber ganado su segundo título de la NBA, los Spurs de San Antonio presentan un plantel remozado y muchas preguntas por responder. Mercer, Nesterovic, Horry son parte de los nuevas caras.
¿Podrá Tim Duncan jugar tan cómodamente con Rasho Nesterovic como lo hacía con David Robinson?
¿Podrá Emmanuel Ginóbili lucirse ahora como titular?
¿Podrá Tony Parker perdonar y olvidar que los Spurs intentaron darle su puesto a Jason Kidd?
Y la pregunta más importante de todas: ¿Podrán los Spurs superar a los Lakers de Los Angeles, a los Mavericks de Dallas y al resto de la fortalecida Conferencia Oeste y repetir como campeones?
El entrenador de los Spurs Greg Popovich aún no tiene las respuestas. Aún está tratando de consolidar una nómina que integra a apenas seis elementos del año pasado.
“No sabré que tenemos hasta enero o hasta la pausa del juego de las estrellas”, indicó Popovich. “Tim Duncan es el tipo de jugador que asegura que podemos jugar a cierto nivel, pero ya es otra cosa hablar del nivel para salir campeones”.
Mientras otros equipos de la Conferencia Oeste se abastecieron con grandes nombres, como los de Gary Payton y Karl Malone con los Lakers; Antawn Jamison y Antoine Walker a los Mavericks, Latrell Sprewell y Sam Cassell a Minnesota, y Brad Miller a Sacramento, los Spurs siguieron buscando jugadores que se acoplen a un esquema que gira en torno a Duncan.
“No estamos cargados de super astros como los otros (equipos), pero creo que saldremos ganando”, dijo Duncan, dos veces declarado el mejor jugador de la liga.
La mejor adquisición de San Antonio fue el esloveno Nesterovic, quien tiene la enorme tarea de reemplazar a uno de los jugadores más populares del equipo, el “Almirante” Robinson.
El pívot Nesterovic, quien mide 2,10 metros, promediaba 11,2 puntos y 6,5 rebotes por partido para los Timberwolves la temporada pasada.
Entre los nuevos rostros de los Spurs se encuentran los bases suplentes Ron Mercer (7,7 puntos y 2,1 rebotes por partido); el turco Hedo Turkoglu (6,7 puntos y 2,8 rebotes por partido) y Anthony Carter (4,1 puntos y 4,1 asistencias por partido).
Ellos acompañarán al alero suplente Malik Rose (10,4 puntos y 6,4 rebotes por partido), el especialista a la defensiva Bruce Bowen (7,1 puntos, 44% de efectividad en tiros de tres) y el argentino Ginóbili (7,6 puntos y 2,3 rebotes por partido), quien reemplazará a Stephen Jackson en el puesto titular de escolta.
También está Robert Horry, aborrecido por los aficionados de San Antonio por sus tiros para encender ofensivas durante sus años con los Rockets de Houston y los Lakers de Los Angeles.
En el quinto partido de las semifinales de la Conferencia Oeste la temporada pasada, y con la serie empatada a dos victorias por bando, Horry falló un tiro de tres puntos en el último segundo que habría concretado una gran remontada y hubiera llevado a los Lakers a una victoria sobre los Spurs.
Horry (7,1 puntos y 3,0 rebotes por partido) cuestiona qué tanto se ayudaron los Lakers en el receso de la temporada, al fichar a Malone y Payton.
“(Los Lakers) Están llamando la atención por todos los jugadores de gran nombre, pero este es un asunto de saber jugar en forma colectiva”, señaló Horry, quien consideró a Minnesota como el equipo de la Conferencia que más ha mejorado.
Eso es precisamente lo que los Spurs deben buscar ahora.
Además de reemplazar a Robinson, también perdieron a Jackson, su tercera opción ofensiva el año pasado con 11,8 puntos por partido, así como a los bases Speedy Claxton, Steve Smith y Steve Kerr.
Duncan afirma que los Spurs ya no son los mismos sin Robinson, quien durante seis temporadas fue su maestro y gran amigo. Pese a que sus números bajaron notablemente en su última temporada, el “Almirante” todavía tuvo una presencia importante en la cancha.
Nesterovic no cuenta con ello, pero Duncan dice que tiene otras virtudes:“Tiene manos maravillosas, tira muy bien con el balón, es muy sagaz para el básquetbol y es divertido jugar con él”, señaló Duncan.
Parker, quien promedió 15,5 puntos y 5,3 asistencias en su segunda temporada de la NBA, expresó su desánimo en julio cuando los Spurs buscaron por todos los medios adquirir al agente libre Jason Kidd, lo que provocó que un disgustado Popovich le dijera en público a su joven armador francés que dejara de llorar al respecto.
San Antonio no pudo contratar a Kidd a fin de cuentas, lo que dejó a Parker y a su entrenador con la labor de zanjar sus diferencias. “Estamos exactamente con la misma idea”, señaló Popovich, quien señaló que buscará darle un mayor liderazgo a Parker, de 21 años, esta temporada.
Parker, quien se perderá el primer partido de la temporada el martes ante los Suns de Phoenix por una torcedura en el tobillo, ha expresado que no guarda rencores. “Pasamos demasiado tiempo juntos como para permitir que una cosa como esa nos moleste”, añadió.