Sensación térmica: en alza

Antes de empezar la final del 41º Sudamericano de Básquetbol se sabía que estaba reservado para la lucha de tres plazas: Brasil, Argentina y Venezuela.

Anoche Argentina dejó en el camino a un rival directo y se metió en la final, donde debe rendir cuentas pendientes.

La actuación del seleccionado que dirige el Técnico Fernando Duró es alentadora, después de tocar fondo con Brasil, fue encontrando un andamiaje ofensivo digno de los apellidos que portan.

Herrmann, Delfino, Gutiérrez, Prigioni son valores que brillan con luz propia, y tenían que aparecer. Contra los venezolanos hubo un poco de todos, es cierto, pero si se quiere ver el medio vaso lleno bastará con decir que de adelante el equipo es letal.

Sobre todo desde la vuelta de Andrés Pelussi y Juan Gutiérrez el conjunto gana más volumen y distribuye mejor los espacios en ataque. De tal forma llega al gol con soltura, naturalidad y sin forzar tanto el individualismo.

Si se quiere ver el medio vaso vacío bastará con decir que Venezuela hizo 100 puntos, que sacó el contraataque varias veces y que Argentina sobrevivió gracias a los porcentajes ofensivos.

Todo se puede argumentar. Por eso es mejor contar que en el primer tiempo Víctor David Díaz hizo 20 puntos y fue incontenible para los aleros argentinos. Richard Lugo desde le poste bajo también complicó a nuestra selección.

Pero la puntería de Leo Gutiérrez ( de menor a mayor en el torneo) y el aporte de Herrmann, fue clave para sacar una diferencia. Por lesión Daniel Farabello estuvo ausente, y Bruno Lábaque dio una mano importante en el traslado del balón y la marca de la media cancha. Además, Pelussi ayudo a la levantada Argentina.

En el segundo segmento, con un diferencia que oscilaba los 6 a 10 puntos los de Duró negociaban el trámite, pero nunca podía ponerle un broche a la faena. Hasta que llegó el último cuarto y cuando más apretado se vio, otra vez afloró la personalidad para desatar en nudo armado.

La selección recuperó el amor por el orden, por eso cuando Venezuela fue a zona (durante largo rato) Argentina no se desesperó y trabajó la ofensiva, para no depender solamente del tiro de tres puntos (¿lección aprendida?). La diferencia final de 13 puntos la amplió recién en el minuto final.

En el rubro estadístico terminó con 11/29 en triples (38%) y 31/48 en dobles (65%) más 18/22 en libres (82%). Mucho más saludable que lo exhibido ante Brasil. Justamente el rival de la final de mañana.

Síntesis
Venezuela (100): Diego Guevara 14, Víctor Díaz 32, Oscar Torres 19, Hebert Bayona 4, Richard Lugo 20 (FI); Ernesto Mijares 2, Richard Guevara 2, Edgard Arteaga 4 y Carlos Morris 3. DT: Néstor Salazar.

Argentina (113): Pablo Prigioni 4, Carlos Delfino 22, Walter Herrmann 29, Leonardo Gutiérrez 24, Román González 10 (FI); Bruno Lábaque 12, Diego Prego 0, Andrés Pelussi 2, Julio Mázzaro 8 y Juan Gutiérrez 2. DT: Fernando Duró.

Parciales: 25-24, 49-53 y 81-88.
Arbitros: García (Colombia) y Rodríguez (Colombia).
Estadio: Campos - Brasil.

Pablo Tosal
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