El silencio es salud

No se trata de dividir, ni de restar, cuando la dinámica del circuito profesional está aceitado, a cada cual le corresponde su parte.

Si los dirigentes de la Confederación Argentina renuevan por un período de cuatro años al MÁXIMO RESPONSABLE de NUESTRA selección nacional y dejan una cláusula abierta para que se vaya cuando le convenga, entonces se deja la chance de pensar dos cosas:

1) No hay recambio de técnico. Si se renueva bajo estas exigencias, es que el técnico que está es irremplazable, se prefiere arriesgar y padecer a no tenerlo.
2) La CABB no tiene un “plan de selecciones” trazado para que el que asuma siga el trabajo anterior.

De lo contrario, la exigencia de la selección demanda el respeto necesario para que se firme un contrato de cuatro años de continuidad, sin cláusulas especiales de escape.

Como es imposible legislar hacia atrás, es mejor ver lo que sucedió: hace dos meses Pick and Roll dijo que Magnano se iba de la selección, apenas renovó el contrato con la selección.

El entrenador se enojo con esta web y con sus integrantes. Y se despachó: “Conozco la página que dio la noticia, conozco sus periodistas (mucho gusto, encantado), y conozco la clase de periodismo que hacen (¿?)”, le dijo a un reportaje del canal de cable TN en su edición deportiva, al tiempo que desmentía que iría a dejar la selección. Incluso en el programa de Mirta Legrand volvió a desmentir todo.

Luego, 10 días después en un reportaje publicado al diario Olé declaró: “Me sorprende bastante que no me hayan llamado. No sé qué pasa...“. Era claro que las puertas estaban abiertas para irse.

El “error” que Pick and Roll cometió es adelantar el ofrecimiento antes de la renuncia del técnico que todavía estaba con trabajo. En el ambiente nadie quiere “quedar pegado” con estas situaciones. Por eso salio a desmentir.

El ofrecimiento en cuestión, trataba del Barcelona de España. Pero no era el momento de Rubén. De hecho, el Barsa reemplazó a Pesic con un hombre de la casa. Ningún entrenador de “chapa” se arriesgaría a tomar al Barcelona bajo las condiciones reinantes.

Para quien esto escribe está muy claro que Rubén Magnano está en un selecto grupo de los 10 mejores entrenadores del mundo FIBA. El caldo de cultivo de los jugadores, de esta camada histórica, explotó con el entrenador indicado en la selección.

Magnano, siendo sub campeón del mundo y campeón olímpico, al igual que cualquier técnico del mundo, debe revalidar todos los domingos su condición cuando esta al frente de un club. La profesión de Técnico es ingrata, pero si pierde 7 partidos lo echan como a cualquiera. ¿Por qué debía exponerse en el Barcelona cuando las cualidades para asumir no se reunían?.

En cambio el Pallacanestro Varese es otra historia. Viene mal, tendrá que sacarlo del pozo, tiene material, la exigencia también es distinta y fundamentalmente no debe igualar o sostener exitosos registros anteriores (Como Brindisi en Boca tras la era Bianchi).

Ahora que la noticia se conoce, ya nadie se horroriza, nadie se toma de los pelos y dice que es descabellado. El técnico hizo uso de la cláusula y se fue. A todo esto el Presidente del la Confederación Argentina le dice hoy a Olé: “Es la bomba de fin de año... Sabía que podía pasar pero igual me tomó de sorpresa... Yo creía que tenía esto solucionado por cuatro años y ahora hay que salir a buscar un reemplazante”.

¿Todo solucionado con cláusula de salida?. Es sabido que Muratore es un hombre probo e inteligente. Maneja muy bien el ambiente internacional y sabía que esto iba a pasar. Entonces, por qué arregló la continuidad y sobre todo, por qué declara que lo toma de sorpresa.

En lo particular, resultan tragicómicas las declaraciones de ambas partes. En principio porque sin tener poder alguno y escasa incidencia en la opinión pública, Pick and Roll siempre mantuvo un nivel de apoyo constante con el Proceso Selección.

Pudiendo hacer un análisis real y serio de la final con Yugoslavia, dejamos que la gente se quede con el insulto al árbitro Pitsilkas en vez de detenernos en los por qué Argentina no supo administrar una ventaja de 8 puntos a falta de un minuto y medio. La magnitud del logro invitó a pensar que la fábula debía alimentarse.

La crítica sirve para no pisar sobre los mismos errores en un futuro y crecer, pero era mejor pensar que nos afanaron, aunque Hugo Sconochini haya dado claramente tres pasos antes que le cometieran falta.

Pudiendo indagar y publicar el alejamiento de Daniel Farabello de la selección y su extraño “Farabello no será más convocado”, mantuvimos el silencio (el mismo Farabello que hoy hace de puente para el desembarco en Varese).

Solo el periodista Miguel Romano del Diario La Nación, levantó la voz a nivel nacional sobre la desastrosa preparación preolímpica de Puerto Rico, a través de una nota a Pepe Sánchez. El periodismo hizo reverencial silencio ante un despropósito.

En la noche del 26 de julio de este año se encontraban esperando en el Lobby del Hotel Costa Galana, el periodista David Carlín por TyC Sport, Fabián Pérez por TyC Sport, Hernán Sartori de Clarín, Rodolfo Puleo de Olé y Pick and Roll.

Esa noche a las 0.30 Magnano daría la lista definitiva de convocados para los Juegos Olímpicos. Después de la espera el técnico bajo del ascensor y dijo: “Solo voy a decir quienes viajan, no hablaré de nada más”. Leyó la lista y se fue.

En la argentina nos acostumbramos a rendir tributo y ser genuflexos con los gobernantes de turno así como no exigir explicaciones de quienes la deben dar. La selección no es el juguete de nadie. Tampoco se pide que Magnano (o quien sea) piense igual que uno, sólo que se siente a decir por qué toma determinadas resoluciones, tal como su potestad ostenta.

Sin embargo allí también nos quedamos con algo que nos pareció antes que nada prioritario: No manchar el proceso que debería estar tranquilo camino a Atenas. Bajar los decibles y charlarlo después.

También podríamos contar lo que Walter Herrmann le dijo al técnico, post título olímpico, pero incluso en semejante euforia nos pareció desacertado. La no inclusión en la final de Herrmann debería tener una explicación. Pero la medalla de oro tapa todo.

Por suerte, el grupo de jugadores, la capacidad táctica y de trabajo del entrenador y los logros conseguidos, apuran a decir que es la etapa más brillante en la historia del básquetbol nacional. Bueno sería, que todo se hable y se discuta mientras las cosas van saliendo bien, con el afán de seguir creciendo.

El tiempo del adiós llegó. El entrenador se fue. Tal como anticipó equivocadamente Pick and Roll. Nos quedamos lamentablemente con las ganas de charlar de básquetbol y de las cosas que a nuestra selección le pasan.

Sin pretender serlo, parece que somos el molesto dedo que siempre esta acusando contra el establishment. Cuando en realidad solo se pretende un poco de pensamiento critico para saber a donde estamos parados. Y crecer.

“Conozco la página que dio la noticia, conozco sus periodistas, y conozco la clase de periodismo que hacen”. Está muy bien Rubén, nosotros también sabemos con los bueyes con que aramos.

Pablo Tosal
www.pickandroll.com.ar