Libro de quejas

Si la tolerancia fuera una virtud de los humanos y especialmente de los argentinos no haría falta derrochar estas primero cinco líneas aclarando que las opiniones que en adelante vertiremos están totalmente despojadas de intencionalidad alguna o mala leche como vulgarmente se dice.

Sin embargo es necesario hacerlo porque somos muy sensibles a las críticas y como no comprendemos que la imperfección es inherente a la condición humana, cualquier pensamiento que desnude la ineficacia o la negligencia ajena, o simplemente el olvido u omisión sobre un tema en particular enseguida tiñe nuestra buena voluntad de rebeldía.

En primer lugar nos parece un desaguisado que en un evento de las características de un mundial la prensa ande renegando con las señales de los celulares cuando la era de las comunicaciones es la que nos domina.

Este problema ataca directamente a las radios que no pudieron contar con una línea fija porque la empresa telecom (aquí en Córdoba) decidió cobrar 160 pesos diarios para la utilización de una línea punto a punto. ¿Por qué en la docta tendrá un canon lo que en Mar del Plata con otra compañía sale gratis?.

El Orfeo es un excelente estadio pero tanto concreto y hierros termina por ensuciar el aire de las comunicaciones debilitando señales que desmejoran las transmisiones radiales y por ende terminan por desvirtuar el verdadero sentido de que las mismas estén allí. ¿De que le sirve ala organización del mundial tener medios radiales que no pueden cumplir con su trabajo?

Siempre sentí que el laburo de las radios se minimizaba. Como si estorbaran. Lo importante es la televisión, la prensa escrita e internet. Las radios son tomadas como gusanos que vienen a comer del evento y si bien es cierto que un pequeño negocio publicitario las circunda no es menos cierto que es más importante el servicio que prestan que la plata que recaudan.

Lo cierto es que pudiendo llevar las alternativas mediante una comunicación limpia lograda con líneas fijas anoche fue el concierto de las descargas. La organización debiera haber peleado por este derecho periodístico y la multinacional empresa de comunicación debiera haber estado a la altura del acontecimiento brindando las facilidades que nos hagan elegirla por sobre otras ofertas en el mismo rubro. En fin...Otra vez será....

Para cerrar otro pequeño listado de incomodidades. Ya que la prensa ha aceptado trabajar detrás del corralito ¿No podría extenderse las vallas de separación hasta el lugar que nos permita ir al baño sin tener que buscar un periodista de reemplazo para que nos cubra en nuestra labor hasta que iniciamos la larga gira de reconocimiento turístico del estadio hasta llegar al oasis con inodoros? ¿Sería factible desatar las sillas del sector para la prensa radial y escrita para que no nos desgarremos a la hora de querer salir o ingresar al reducido ámbito? Total se supone que no vamos a tener actos de barbarie, ya que nos dijeron que era una disposición municipal para que las sillas no sean arrojadas al campo. Los que se exaltan generalmente son los espectadores y ¿Las plateas no están atadas no?....

Una más y no jodemos más...El estacionamiento para la prensa ¿Podría ser en el playón del estadio?. Si ya se ¿Pedimos demasiado?. Si están pensando en otros servicios bienvenidos sean. Por ahora los emparedados, las gaseosas y las fotocopias de cada tiempo están muy bien...

Carlos “Cachacho” Pascual (enviado especial)
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