Se veía venir

Días tras, y luego de sufrir el conjunto tucumano la quita dos unidades por incumplimiento en pagos, habíamos hecho una breve reseña con relación a la poca vida que tienen los elencos de esa provincia, en las competencias organizadas por la Asociación de Clubes.

“…Independiente de Tucumán ostenta el récord de ser el equipo con menos partidos disputados en la Liga Nacional. A partir de la segunda fase de la temporada de 1985 se retiró del certamen, con solo 14 juegos disputados y 13 derrotas.

Belgrano de Tucumán, luego de vencer en una final muy polémica a Gimnasia de La Plata logró el ascenso a la Liga Nacional en la temporada 99/00. Con muchos problemas económicos y disciplinarios (se le descontaron 2 puntos) descendió en la misma temporada del debut.

Central Córdoba de Tucumán duró poco en el TNA. Con muchos problemas la liga 01/02 fue su último recuerdo en la segunda categoría.

Tucumán BB por su parte duró un poco más. Tres temporadas, desde la 02/03 hasta la 04/05 fueron las que jugó en el TNA. Por problemas disciplinarios, multas sin pagar y sponsors que no quisieron seguir apostando al proyecto, el último juego de la BB fue por la re clasificación ante Estudiantes, en Bahía Blanca, la cual terminó con gran parte del plantel detenido por incidentes en el partido…”

Fue lo que publicamos el 09/02/06 bajo el título “Algo anda mal”.

Y si bien Enrique Muruaga intentó demostrar que lo sucedido con la quita de puntos había sido una “cama”, otros dirigentes de diversos clubes, afirmaron que la deuda existía y que la demora en el pago también.

Luego de realizar un viaje casi inhumano a Neuquén y Bahía Blanca, rememorando a otras glorias de la tortura, como Andino o el mismo Tucumán BB a la hora de transitar kilómetros de forma muy incómoda, al conjunto de la plazoleta Mitre le tocó nuevamente jugar de local.

Y en una postal similar a la que ocurrió con la BB en Bahía Blanca en su último juego en la categoría (temporada 04/05), Asoc. Mitre no terminó su último encuentro. Luego de que el mismo Muruaga vaya a recriminar de manera escandalosa al a mesa de control (como lo hiciese el jefe de equipo de Tucumán BB en Bahía), se debió suspender el encuentro porque simpatizantes ingresaron al campo de juego (En la 04/05 el conjunto tucumano retiró al equipo).

Lo que deja todo este problema, además de 15 y no 16 elencos en competencia, es un sabor amargo para los amantes del TNA y del básquet nacional. Luego de vivir una torneo sin descensos como lo fue la temporada 03/04, ya que tanto Andino como Quilmes dejaron de jugar y por consiguiente se los consideró los descendidos de esa edición, parecía que la 04/05 era la liga de despegue. La mayoría de los planteles con foráneos, sin producirse deserciones a mitad de torneo (Tucumán BB se alejó cuando terminó su participación) y con un nivel mejor al vivido en la temporada anterior.

Sin dudas, la 05/06 se encaminaba para dar algunos destellos de lo que fue el TNA de fines de los 90´. Con extranjeros netamente superiores a los de años anteriores, con mayores presupuestos, regresos de equipos a la categoría (como Independiente y los descendidos Gimnasia y Obras) y un compromiso aún mayor de casi todos los clubes, la televisión y la AdC a la hora de difundir la actividad, todo parecía hacer olvidar a los años oscuros vividos por una economía endeble.

Y si bien debemos sincerarnos y reconocer que un árbol no tapa a un bosque, lo que tenemos enfrente es un gran quebracho, que se está haciendo habitual en nuestras retinas.

Alguna vez León Najnudel dijo: “La liga no es para el que quiere, sino, para el que puede”.
Estamos viviendo en carne propia, que en temas económicos querer no es poder, y que si bien el ente organizador toma ciertos recaudos a la hora de permitir jugar a los equipos, estos, parece que no son suficientes. Esta claro que es la punta de un gran ovillo, ya que habría que hablar, por ejemplo, de porque de una temporada a otra, todos los jugadores se cotizan un 100% más, sin medir cuan buena haya sido su liga anterior, o porque los extranjeros de TNA no pueden ser adquiridos por otro equipo de la misma categoría para abaratar costos. En fin, son muchos temas que deberían ser tocados, y aquí solo sirven de disparadores para intentar entender, porque hace tres ligas que no terminan los 16 equipos.

Para cerrar esta nota tomo una frase de Enrique Muruaga, publicada en el diario La Gaceta hace una semana atrás (08/02) referida a la quita de puntos que sufrió Asociación Mitre, y que Pick and Roll también sitó en la nota mencionada párrafos atrás:

“No concibo que podamos perder la categoría por algo así. Si deportivamente nos toca, que la perdamos... pero de esta manera, jamás”.

Insisto, hace una semana el presidente de la institución manifestó que de la única manera que perdería la categoría sería deportivamente, o sea, jugando. ¿El problema no comenzará por allí?.

Emanuel Niel
www.pickandroll.com.ar