Y a los dos días… resucitó

Cuando se toca fondo solo cabe salir para arriba. Así parece haberlo entendido Peñarol, el problema era descubrir el fondo, y parece que la actuación de la negra noche contra Quilmes sirvió como plataforma de despegue. Peor no podía estar y contra Boca mostró signos vitales de vida, para creer en sí mismo y su futuro.

Del otro lado un Boca atípico. Muy rápidamente descolado, maniatado y entregado a merced de su oponente, carente de ideas. Muy lejos del equipo que llegó al Polideportivo como tercero de la tabla.

De todos modos el inicio avizoraba otro partido, porque la puntería de Boca era casi perfecta al comienzo y Tony Bishop comenzó lastimando con dos triples, otro de Quinteros y uno más de Malara. Boca era una fiesta en ofensiva y tomaba ventajas de 11-18.

Pittman sufría en la marca de Quinteros (10 puntos) y Barrios no podía detener el tiro de tres puntos de Bishop (3/5). Pero una buena gestión ofensiva de Bunn acompañada por Pittman devolvió a Peñarol al partido (21-21). El local se durmió y cerró mal el primer cuarto. Un triple de Locatelli puso abajo por cuatro (26-30) los primeros 10 minutos.

El partido estaba planteado abierto y a todo gol, con dos ofensivas muy aceitadas, pero el primero en cambiar fue el equipo de Narvarte que se sacó el traje y se puso el overol. Entonces laburando en defensa sacó los réditos de sus talentos anotadores.

Lentamente los perimetrales de Peñarol (sobre todo Locatelli) fueron los dueños del tablero propio. La marca de Bunn sobre Williams fue efectiva y al igual que Barrios con Leiva. Rodríguez, Pittman y Locatelli ayudaban en el canasto propio y el local no tuvo más receta que proteger su rebote. En ofensiva rotó bien el balón, con paciencia y jugó alimentando a Bunn, que estuvo endemoniado y sacó de paseo a cuanto defensor le pusieron.

Un parcial de 12-0 dio vuelta la torta y lo puso a Peñarol arriba por 8 (40-32). Carlos Duro pidió minuto pero nada de lo que intentó le salió. Rotó el banco hasta lo más profundo buscando con el cambio de nombres encontrar una respuesta, pero Funes ý Sandes entraron erráticos, Williams no lastimó cuando se puso de espaldas al igual que Leiva que ni siquiera recibía el balón y Cequeira sufrió más de lo que dio. El parcial del segmento fue 25-7 y Peñarol se quedó con el primer tiempo 51-37.

Para el segundo tiempo se esperaba una reacción de Boca, sin embargo nunca llegó. Narvarte se la jugó con Byró por Pittman en la marca de Quinteros para rematar la faena y aplacar cualquier intento de reacción. Estaba visto que sólo Paolo podría llevar preocupación a la defensa milrayitas. Entre el segundo cuarto y el tercero Boca tiró 0/13 en triples y 6/20 en dobles. Abolló los aros y casi no tuvo segundas instancias si no fueran por los “cacheteos” de Leiva.

Peñarol siguió paciente y ordenado en ofensiva, mientras Boca no podía imponer con su defensa algún desajuste a un relojito que anduvo bien. Joseph Bunn otra vez fue la llave de la felicidad. Su trabajo en el poste bajo fue para colgarlo en un cuadro. Y lo sufrió Boca.

Cuando ingresaron en el tramo final la distancia era de 25 puntos (75-50). Boca no tuvo ningún tipo de reacción con una ofensiva que no daba “pie con bola”. En la enorme diferencia se definió el partido mucho antes del final. Narvarte dejó a los titulares en cancha hasta faltando menos de dos minutos.

Es que el local tenía el apatito voraz de una triunfo contundente, un golpe decisivo para su suerte de futuro. El grito de desahogo bien alto para que retumbe en cada lugar de la Liga que se despertó (o revivió) Peñarol. Claro que lo más difícil será que muestre que su defensa de conjunto no fue una casualidad y que la holgada victoria no se debe a los desméritos de Boca sino a los méritos propios.

El xeneize extrañó a Palermo, Palacio, Insua, porque anoche jugó más al fútbol que al básquetbol. Muy raro para un equipo que llegó a Mar del Plata tercero en las posiciones y con ganas de ir a más.

Síntesis
Peñarol (102): Sebastián Rodríguez 17, Juan Manuel Locatelli 15, Josh Pittman 18, Joseph Bunn 35, Pablo Barrios 6 (FI) Marcos Mata 3, Mariano Byró 5, Fernando Titarelli 3, Claudio Farabello 0, Nicolás Lauría 0. DT Guillermo Narvarte

Boca (75): Diego Alba 2, Paolo Quinteros 22, Fernando Malara 10, Anthony Bishop 9, Leonardo Peralta 2 (FI), Martín Leiva 9, Matías Sandes 5, Kennett Williams 4, Luis Cequeira 0, Fernando Funes 12 y Lucas Ortíz 0. DT Carlos Duro

Parciales: 26-30, 51-37, 75-50
Árbitros: Rodrigo – Fernández
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas (1100 espectadores)

Pablo Tosal
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