Cuando el fuego crezca quiero estar allí

Un evento como el de mañana sábado 25 de noviembre de 2006 debe quedar necesariamente grabado a fuego en la memoria de los hinchas de los equipos de Mar del Plata por la curiosidad de ser el primer partido fuera de casa. Pero no sólo le importa a los hinchas de Quilmes y Peñarol, sino que le interesa a la liga toda, a todos los periodistas que cubren este Super 8 que de una u otra manera, ya viven de manera muy especial la oportunidad de disfrutar un Super clásico en territorio neutral.

La historia entre este particular duelo marplatense que divide aguas en todo el país se ha ido forjando con el correr de la liga, esquivando intereses de terceros, como la AdC de fomentar a través de medios nacionales otras confrontaciones imaginarias como Boca – River. A su vez Peñarol y Quilmes han sobrevivido como clásico a otros clásicos verdaderos que han desaparecido como Ferro – Atenas o Boca – Atenas que mañana se juega aunque el brillo no sea el mismo. A propósito, mañana en el Ruca Che se verá en doble jornada los dos partidos con más arrastre pasional de la Liga.


Terreno desconocido, misma pasión

El estadio Ruca Che tiene capacidad para 5700 personas, el anillo de abajo son plateas con butacas de madera y plástico, una cúpula muy alta y un anillo superior de cemento sin butacas. Un estadio que brinda comodidad pero que a diferencia de otros escenarios grandes tiene una cercanía mucho más notable al campo de juego que otros estadios de gran capacidad.

Anoche con dos mil personas y un mini duelo de hinchadas entre simpatizantes de Atenas y Ben Hur, el clima era muy festivo, muy ruidoso. Mañana cuando la pasión este en su momento principal el Ruca Che mostrará su mejor cara.

El campo de juego es un eje del partido de mañana. Mucho se habla de las referencias de tiro para los jugadores. Que no es lo mismo jugar en la cancha que se entrena todos los días, que las hinchas van de un lado, de otro, mil cosas que se hablan del tema localía.

De todos modos hay mucho de ciencia ficción, de leyenda en cuento uno menciona quien será local. El ejemplo más contundente es la propia historia que dice que en el Estadio Super Domo donde Peñarol hacía de local, en el ingreso al puerto de Mar del Plata, Peñarol sacó ventajas de 4-2 en los seis partidos que allí disputaron.

En el estadio de Once Unidos, en pleno corazón de Parque Luro, donde Quilmes juega de local el historial curiosamente también favorece a Peñarol por 8-5. Aquí el tema es más complejo porque Peñarol también fue local en Once Unidos en el pasado, al menos por un tiempo. De todos modos, en lo que sería el gran escenario quilmeño por excelencia su equipo esta abajo en el historial.

Finalmente en el lugar que más partidos disputaron fue en el Estadio Polideportivo Islas Malvinas, donde Peñarol hace las veces de local, y donde Quilmes jugó media liga (95/96) en dicha condición. Allí es curioso, porque mientras muchos manifiestan que allí Quilmes siempre es visitante es el escenario donde mejor le fue. Hasta antes del comienzo de la actual liga, donde Peñarol ganó los cuatros partidos, el récord era favorable a Peñarol 27-21. Era pequeña la diferencia. Hoy es de 31-21 contando el 4-4 del historial de la Copa Argentina. Por lo tanto, hay mucho de mística con respecto a la localía.

En el historial general Peñarol se impone 43-28 en las 63 ediciones jugadas. Mañana habrá un nuevo capítulo por escribir.

Van para Neuquén

Ambas parcialidades se han movido con rapidez para organizar el viaje de más de 1100 kilómetros desde Mar del Plata hasta Neuquén. Cada club saca un micro con la hinchada en la medianoche de hoy (llegarán el sábado después de las 15) mientras que muchos hinchas se organizaron para viajar en autos.

Según pudo averiguar Pick And Roll en total se movilizarán más de 250 personas para el partido de mañana que irá televisado para toda Mar del Plata por la señal de TyC Max. A su vez, alertada la organización del torneo del traslado de los hinchas se dispondrá medidas especiales de seguridad para garantizar la fiesta del básquet.

Ellos dicen

Como será un clásico especial porque en 40 minutos un equipo eliminará al otro. Como el quinto partido de un play off. Los jugadores lo viven de manera especial y saben que esperan un juego diferente

Por ejemplo el Paraguayo Javier Martínez le dijo a Pick and Roll “Creo que los dos equipos están muy bien. Peñarol está muy dulce defensivamente y tiene muchas opciones en caso de que no le salga bien alguna. Son más largos que nosotros pero el partido se juega cinco contra cinco y nosotros estamos muy confiados y con la mente muy positiva de que vamos a salir a ganar el partido y que los podemos, y eso vamos a tratar”.

Por su parte es una incógnita la participación de Sebastián Ginóbili que por una contractura se perdería el partido. El Sepo dijo: “ Un partido lindo para jugarlo. Semifinal de un torneo como este, contra el clásico rival. Nosotros venimos con unas cuantas derrotas consecutivas contra ellos, así que creo que va a ser importante para nosotros tener un buen partido y sobre todo hacer bien las cosas como para lograr una final. Nos potenciaría mucho como equipo la verdad”.

Por el lado de Peñarol un jugador que se va ganando el corazón del hincha milrayitas como “Paco” Festa sentenció: “Esperamos ganar y poder jugar otra final que es nuestro objetivo. Llegar a la final y ver si se puede ganar. A mi me gusta jugar los clásicos en el Polideportivo, acá o en el Once Unidos. ”.

Finalmente Sebastián Tato Rodríguez manifestó que espera “Un partido como son todos los clásicos: trabado, friccionado, con mucha entrega. Por ahí no va a salir un partido lindo, pero como dije, con mucha entrega, un partido sucio, así que esperemos que sigamos con la racha positiva como hasta ahora”.

Las situaciones que rodean al partido van tomando forma. El clásico alimentado desde la pasión se empezó a jugar en Pick and Roll. Mañana será turno de analizar que podría pasar, pero esa historia es cuento analítico, ahora sólo es emoción.

Autor: Pablo Tosal
Notas: Emanuel Niel
www.pickandroll.com.ar