La cerveza en la boca

Más vivo que nunca. Así está Quilmes en la Liga Nacional. Ayer defendió en gran nivel, tuvo poder de reacción en momentos adversos y dos individualidades grandísimas en Ginóbili y Robinson para imponerse a un candidato, Boca, por 79-77 con un doble del base a 17“ del epílogo por la decimoséptima fecha de la segunda fase.

Quilmes no sólo jugó un buen primer tiempo, si no que tuvo el poder de reacción suficiente para revertir un inicio desfavorable. Es que, tras un inicio turbulento, con varias pérdidas de ambos lados, Boca comenzó a establecer diferencias gracias a la puntería del base Raymundo Legaria y al poderío físico de Martín Leiva, quien logró puntos con sus posteos y clausuró, con cuatro tapas, las vías de gol interiores quilmeñas. Así el conjunto local, tras una falta técnica a Oscar Sánchez, logró una diferencia de 20-12, la más importante del primer tiempo.

Pero ya en los minutos finales del primer cuarto, Quilmes mostró signos vitales. Lo favoreció que Leiva, con dos faltas personales, se sentó en el banco de suplentes. De ese modo consiguió hacer pie en defensa. Por otro lado, las primeras apariciones ofensivas importantes de Ginóbili dejaron al conjunto ”tricolor“ apenas dos puntos abajo al final del cuarto.

El segundo fue otra historia. Porque Borrell, reemplazo de Leiva, sostuvo el gol interno de Boca durante algunos minutos, pero inexplicablemente fue sustituido. Y Leiva no volvió bien al partido. Quilmes, así, se sacó un problema de encima y pudo consolidar su defensa sobre los perimetrales. Y, desde lejos, con la llamativa defección de Gutiérrez (4 puntos y 0/4 triples), para el equipo local sólo respondió Legaria.

Del otro costado de la cancha, el equipo marplatense tuvo más variantes. Pedro Calderón tuvo mayor presencia (anotó 9 puntos en el cuarto), Sebastián Ginóbili estuvo perfecto con sus lanzamientos (4/4 triples y 17 puntos en el primer tiempo) y el contraataque fue eficaz. Quilmes, a falta de 58”, obtuvo la máxima diferencia a su favor: 47-38.

Pero al elenco de Oscar Sánchez le costó en el tercer cuarto mantener lo logrado en el segundo. Y eso que Chuckie Robinson jugó en gran nivel y anotó 13 de los 18 puntos del equipo. Pero Boca se benefició del regreso de Leiva para volver a imponer condiciones con su defensa interior y tuvo gol exterior siempre con Legaria y una mayor presencia ofensiva cerca del canasto de Leo Gutiérrez. De todos modos, Quilmes ingresó al cuarto final al frente 65-64.

Ni bien comenzado el cuarto final salió por faltas personales Martín Leiva. Pero el partido se mantuvo claramente igualado, equilibrado, hasta su mismo cierre. Quilmes llegó al último minuto manejando una ventaja mínima pero perdió por cinco personales a su goleador, Chuckie Robinson. Gutiérrez intentó ponerse el traje de héroe y puso una tapa fundamental y un doble para poner al frente a Boca 77-76 a 32“ del final.
Pero Sebastián Ginóbili, de gran partido, como en el último clásico frente a Peñarol, se anotó con un doble con falta incluida y tiro libre posterior para establecer el 79-77 final. Y la completó con una gran defensa sobre Gutiérrez, a quien enredó en la jugada final, para que Quilmes cante victoria.

Síntesis
Boca (77): Raymundo Legaria 20, Gustavo Oroná 9, Maurice Spillers 5, Leonardo Gutiérrez 18 y Martín Leiva 9 (x) (FI); Lázaro Borrell 10, Luis Cequeira 6 y Matías Fioretti 0. DT: Gabriel Picatto.

Quilmes (79): Sebastián Ginóbili 24, Juan Pablo Sánchez 3, Ramzee Stanton 2, Chukie Robinson 28 (x) y Pedro Calderón 9 (FI); Diego Brezzo 0, Javier Martínez 11, Agustín Carabajal 2 y Esteban De la Fuente 0. DT: Oscar Sánchez.

Parciales: 22-20, 41-47 y 64-65.
Árbitros: Alejandro Chiti-Fabricio Vito.
Estadio: Luis Conde de Boca.
Foto: Gentileza Diario Olé
Autor: Marcelo Solari - diario La capital

Te invito a mi fiestita

Belgrano fue el invitado de la fiesta de Peñarol. El equipo nicoleño puso toda la dignidad dentro del campo, pero el juego lo puso Peñarol, que sacó ventajas cada minuto que pasó y terminó cantando con los pibes. Fue 93-66 con gran juego de equipo.

Este Peñarol no encara un sólo partido relajado. Pese a la diferencia que marcaba la tabla de posiciones, asumió con gran concentración su compromiso ante Belgrano de San Nicolás y la consecuencia lógica fue un rotundo 93-66 por la decimoséptima fecha de la segunda fase que le permite ver a todos desde arriba en la cima de la Liga Nacional de Básquetbol.

Belgrano salió decidido a protegerse de los internos locales con una defensa zonal. Pero Peñarol, muy certero desde el perímetro, vulneró ese dispositivo con dos triples de Tato Rodríguez y otros dos de Josh Pittman. Así, de movida, tuvo las riendas del partido. Pasó un pequeño sobresalto por dos triples consecutivos de Burditt, pero encauzó la historia con una defensa tan eficaz -tan habitual, por otra parte- que sólo permitió tres puntos de los visitantes en la segunda mitad del cuarto inicial. Así llegó al primer descanso al frente por 22-15.

En el segundo parcial, ya sin la misma efectividad exterior -Belgrano se mantuvo en zona y pudo proteger su canasto-, el conjunto marplatense volvió a reaccionar vigorosamente ante un parcial de 6-0 de los nicoleños. Dejó cuatro minutos sin anotar a Belgrano y con algunas apariciones de Míkulas y un lanzamiento abierto esporádico de Tato Rodríguez terminó el primer tiempo 46-34 arriba. Con el total control de la situación.

El equipo marplatense jugó con la tranquilidad de esa ventaja a favor en el tercer cuarto. Llegó a sacar 16 puntos de movida, después se permitió un pequeño bajón (parcial 7-0 de Belgrano) y terminó estableciendo y manejando la renta que había conseguido en el primer tiempo.

Quedaba, a esa altura, muy poca incertidumbre acerca del resultado final. Pero, por las dudas, Peñarol remató la faena con un muy buen último cuarto. Con el vigor defensivo de siempre, pero otra vez con mucha puntería exterior para terminar de desarbolar a puro triple la defensa zonal de Belgrano. En un abrir y cerrar de ojos las ventajas treparon por encima de los veinte puntos y el final fue tan desahogado que el ”Negro“ Romano lo mandó a la cancha al pibe Nicolás Lauría para que festeje su cumpleaños. Y el juvenil predilecto de los hinchas ”milrayitas“ se anotó con 8 puntos en la parte final para que la fiesta sea completa.

Síntesis
Peñarol (93): Sebastián Rodríguez 17, Juan Manuel Locatelli 11, Josh Pittman 15, Jason Osborne 8 y Matías Pelletieri 4 (FI); Gabriel Míkulas 8, Sebastián Festa 5, José Muruaga 13, Alejandro Diez 4, Marcos Mata 0, Nicolás Lauría 8 y Jonatan Ledesma 0. DT: Carlos Romano.

Belgrano (SN) (66): Nicolás Ferreyra 2, Carlos Colla 8, Fernando Funes 10, Albert Burditt 9 y Jason Keep 20 (FI); Federico Marín 6, Maximiliano Riolfo 2, Germán Boero 4, Gregorio Eseverri 5, Ramiro Zarzo 0 y Gabriel Domínguez 0. DT: Mario Guzmán.

Parciales: 22-15, 46-34 y 63-52.
Árbitros: Roberto Smith-Raúl Imosi.
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas (1800 espectadores, dato oficial).
Autor: Braulio García Camarena – Diario La capital