No es lo mismo

Por primera vez El Nacional lograba el Nº1 dentro de la fase regular. Todo era alegría. Para no perder ritmo, mientras ocho equipos disputaban la reclasificación a cuartos de final, el celeste consiguió disputar un par de amistosos como local ante el mejor equipo de la Liga “A” en la instancia previa a lo playoff, Peñarol.

Las vueltas de la vida quisieron que en el primero de los dos cotejos, en una maniobra infortunada, el base juvenil Fabián Sahdi, hasta allí titular del conjunto de TNA, caiga al parquet sumido en un evidente y visible dolor que no anunciaba nada grato para él, y por ende, tampoco para su equipo.

La luxación de cadera no le permitió estar dentro del parquet, pero de igual manera asistió al momento más glorioso en la historia de su equipo dentro de las competencias organizadas por la Asociación de Clubes. En el momento que te lesionaste ¿pensaste que te perdías la semi?

“Sinceramente, en el momento que me lesioné no pensaba en nada porque el dolor que sentía no me dejaba. Pero un tiempo después me empecé a dar cuenta que además de la semi, me perdía el hecho de jugar por el ascenso”.


Cuándo te dijeron que no ibas a poder jugar ¿Qué fue lo primero que se te pasó por la cabeza?

“Lo primero que me dijeron fue que era una lesión grave y que iba a llevar por lo menos 3 meses. Entonces ahí se me empezaron a aparecer todo tipo de cosas. Empezando, como te dije antes, el hecho de que me perdía la posibilidad de jugar por el ascenso con mi club de toda la vida, lo que siempre habían soñado todas las almas celestes desde que nos metimos en el TNA, pero después se me vino a la cabeza lo del Mundial con la selección, que era el último torneo hasta que saltemos a la mayor”.


¿Qué fue lo más feo o triste de ver la semifinal desde afuera?

“¡Lo que siempre había soñado! Estar en una instancia decisiva defendiendo la camiseta de mi club. Esa adrenalina de saber que si ganábamos llegábamos a lo más alto y que si perdíamos íbamos a estar todos tristes. Pero tengo que admitir que lo viví mucho desde afuera como si lo estuviera jugando también”.


¿Le podes sacar algo positivo a este parate obligatorio?

“Creo que lo más positivo es que pude compartir mas tiempo con mi familia. Por un tema de viajes y de entrenamientos no podía ir a visitar a todos y esto posibilitó que ellos me pudieran venir a ver a mi, ya que yo no me podía mover. Los iba a ver seguro”.


Seguramente muchas personas te apoyaron (y apoyan) en el feo momento, ¿Queres agradecerle a alguien en especial?

“Principalmente a mi novia Camila, a mis viejos, mi tía Nora, a Gustavo Iraola y a mi hermano Mario. Ellos siempre estuvieron todo el tiempo al lado mio y se preocuparon por mi en todo momento, ya sea en el hospital o en mi casa. Pero también tengo que agradecerle a todos mis compañeros de equipo y al cuerpo técnico. Al Masi, Bruno, Chuky, Mechi, Guada, Lucia, a Fer Martellini (kinesiólogo) que aún hoy me esta ayudando de a poco con la recuperación, a Fer Olmedo y Luciano Mutti que fueron mis médicos y a toda esa gente que me ha llamado por teléfono dándome una cuota de aliento para hacerme saber que las cosas iban a salir bien, asique a todos ellos MUCHAS GRACIAS DE CORAZÓN”.

¿Y por casa como andamos?

El rojo se prepara para el último partido como local en el TNA. Debido a la gran expectativa que generó el ascenso, y viendo que será una verdadera fiesta, la comisión directiva optó por cambiar la localía y volver a jugar al Ruca Che, cuyas instalaciones tienen capacidad para más personas.

Además, el choque de este domingo a partir de las 21:30 marcará el retorno de Walter Cordero, quien fue suplantado temporariamente en estos playoff por el neuquino Leandro Lauro, debido al desgarro que marginó al sunchalense.

En la edición de hoy del diario La Mañana de Neuquén, apareció una entrevista que le realizaron al entrenador Mauricio Santángelo. Una de las preguntas fue “¿Seguís el año que viene? te pueden llegar ofertas de otros clubes” a lo que el técnico respondió:

“Soy parte de la familia y mi idea es seguir, y no escuchar ninguna otra propuesta. A este equipo me gustaría dirigirlo toda la vida. Tengo la suerte de estar cerca de mi familia, que cuando algunos chiflaban, ellos me seguían alentando y eso es muy importante”.

Otra de las cuestiones planteadas también pensando a futuro resultó ser “¿Tenés nombres en tu cabeza?”. En tal sentido el ex jugador de la institución patagónica indicó:

“Van a pasar quince días después que termine el TNA para tranquilizarnos y ahí comenzar a pensar en la A. Es una competencia distinta, los valores están por las nubes y como lo dijo el presidente, Independiente no va a arriesgar su patrimonio. En este primer año vamos a hacer un equipo para ganar experiencia y permanecer en la categoría. Ojalá podamos mantener buena parte del plantel que tenemos y sumar los refuerzos que necesitemos. Algunos chicos no van a seguir porque no nos alcanzan las fichas. Va a ser un camino muy duro pero hermoso el que nos va a tocar vivir”.

Emanuel Niel
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