La historia cuenta que...

La cuenta de aquellos elencos que no han arrancado una temporada, se remonta a la liga de 1988, cuando ni la Asociación Española de Córdoba, ni Argentino de Firmat pudieron hacer frente al reto y prefirieron dar un paso al costado.

Los cordobeses habían culminado sextos en la liga de 1987, mientras que el conjunto de la provincia de Santa Fe, terminó en la décimo primera colocación. A su vez, esa fue la última vez que un equipo de aquella ciudad militó en la primera división, ya que el Firmat FC descendió ese mismo año.

En la liga corta de 1990 se repitió la historia. Luego de disputar las temporadas 1988 y 1989 sin demasiada fortuna, ya que su posición final fue 13 y 12 respectivamente, Provincial de Rosario optó por bajarse de la competición.

Tal vez el primer cimbronazo grande, en lo que se refiere a los equipo que decidieron bajarse antes de arrancar, lo dio el Deportivo San Andrés. El elenco de Malaver, que se quedara con la liga de transición de 1984, no participó de la temporada 1991/92, luego de obtener la quinta colocación en la 90/91.

Algo similar ocurrió con otro equipo que estuvo desde el comienzo, y que si bien no alcanzó ningún campeonato, llegó a la final de la liga 1986. Debido a la falta de presupuesto, Olimpo de Bahía Blanca no pudo iniciar la 92/93, aún luego del meritorio cuarto lugar que obtuvo en la 91/92. De esa forma, la Capital del Básquetbol argentino se quedó con un solo representante en la máxima categoría, y recién en la 07/08 que arrancará en un par de meses, volverá a tener dos elencos.

Como si los anteriores dos cachetazos no hubiesen sido duros, el tercer bofetón al certamen no escatimó en fuerza. La fusión de los clubes Gimnasia y Esgrima; y Pedernera Unidos, apoyada económicamente a través del gobierno de San Luis, le decía adiós a la Liga Nacional.

Fueron cinco temporadas (desde la 1990 hasta la 93/94) a toda furia, donde además de alzarse con dos títulos y lograr la construcción del estadio Ave Fénix, el pueblo puntano vibró de la mano de los mejores jugadores de la época: Juan Alberto Espil, Héctor Oscar Campana, Diego Mario Maggi y Hernán Abel Montenegro, por nombrar algunos.

Luego de quedarse con la quinta colocación en la 93/94, el apoyo gubernamental se fue, y con este, la ilusión de continuar para GEPU. Sin tanta repercusión dentro de la historia del torneo, pero con el mismo final, Gimnasia y Esgrima de Pergamino, luego de salvarse del descenso (Echagüe de Paraná cayó al TNA) optó por no seguir.

No pasó mucho tiempo para que otro histórico dijera basta. Sport Club de Cañada de Gómez, equipo en el cual dirigiera León David Najnudel, y en donde hiciera toda su carrera basquetbolística dentro de la liga Jorge Alberto “Gigante” González (primer argentino en ser elegido en draft de NBA - 3ra. ronda, Nº54, por Atlanta Hawks, en 1988); dejaba de participar, después de haber sido subcampeón de la temporada 1990, y culminar décimo segundo en la 94/95. El desgaste y la falta de presupuesto hicieron que no se presentara para la 95/96.

Justamente esta fue la primera y última liga en la que estuvo presente el elenco mesopotámico de Luz y Fuerza de Posadas (dirigido por Rubén Magnano), equipo que obtuvo la novena colocación, pero optó luego por venderle su plaza a Estudiantes de Olavarría, y no participar de la temporada 96/97.

La sangría se frenó por más de un lustro, pero no definitivamente. La vigésima edición de la Liga Nacional, es decir, la 2004/05, no contó con equipos de la provincia de La Pampa, debido a que el único representante que le quedaba, Pico Football Club de General Pico, luego de culminar en la décimo segunda posición en la 03/04, no contó con presupuesto suficiente como para encarar el próximo torneo, y le vendió su lugar a Conarpesa Puerto Madryn, equipo que luego cambiaría su nombre por el de Deportivo Madryn.

Aún mucho más cerca a nuestro presente figuran las bajas de Estudiantes de Olavarrría y River Plate, ambos contando como último antecedente la temporada 2005/06. Los de la capital del cemento, luego de coronarse bicampeones (99/00 - 00/01) de la mano del entrenador Sergio Santos Hernández, comenzaron a tener problemas a la hora de armar su presupuesto, y con la llegada de una nueva comisión directiva optaron por terminar el sueño. En su última participación finalizaron décimo segundos. Su lugar fue ocupado por Obras Sanitarias.

Con el conjunto de la banda roja ocurrió algo similar pero en menor lapso de tiempo. Luego de volver a la elite en la temporada 03/04, el presupuesto que el club le fue destinando diminuyó considerablemente, al punto tal de tener problemas de deudas aún hoy, con los jugadores que formaron parte del último plantel.

En esa 05/06 River terminó octavo y su plaza quedó en poder de la Asociación de Clubes. El ente organizador se la entregó a Estudiantes de Bahía Blanca, y como forma de pago, el elenco albo le cedió los derechos televisivos de la temporada que culminó hace poco tiempo.

Hace escasas horas se conoció la décimo tercera baja en la historia de la Liga Nacional. El Deportivo Madryn, ex Conarpesa, luego de deliberar por varios días e incluso hacer el intento por comenzar a armar su plantel, decidió dar un paso atrás y poner en venta su espacio en la máxima categoría, al considerar que le falta más de la mitad del presupuesto como para encarar un nuevo certamen.

Los que no vieron la otra orilla

Como hay 13 equipos que decidieron no comenzar una liga debido a que no veían la posibilidad de culminarla, hubo también hasta aquí otros siete, que decidieron comenzar y murieron en el intento.

El primer registro se remonta a la primera liga nacional (si se toma la de 1984 como un torneo de transición), en 1985, cuando el elenco de Independiente de San Miguel de Tucumán se retiró de la competencia al finalizar la primera fase. Es el equipo con menos partidos en la historia del torneo, con un pobre récord de 14 partidos jugados, 1 ganado y 13 perdidos.

En la temporada de 1988 fueron dos los conjuntos que se alejaron antes de tiempo. Por un lado, Gimnasia y Esgrima La Plata, quien al finalizar la primera fase abandonó la competencia (récord 2 ganados - 12 perdidos); y por el otro San Martín de Marcos Juárez, quien hizo lo mismo, pero a partir de la octava fecha de la segunda fase. Por una cuestión reglamentaria, su récord quedó en 2 ganados y 24 perdidos.

Otros dos elencos se bajaron en 1989. Haciendo exactamente lo mismo que el lobo plantense, Estudiantes de Concordia colgó los cortos ni bien culminó la primera parte del certamen (2-12), mientras que Pacífico de Bahía Blanca hizo lo propio pero a partir de la sexta jornada de la segunda fase. Su marca final fue de 6 victorias y 20 derrotas.

En la edición 1991/92 se vivió un nuevo caso. En esa oportunidad quien abandono el torneo fue River Plate, quien directamente no se presentó al segundo encuentro por la permanencia, que debía disputar nada más ni nada menos que ante Boca Juniors. Esta acción le costó el descenso al millonario.

El último hecho de estas características se vivió en la temporada 1992/93, cuando Banco Córdoba de la ciudad capital de aquella provincia imitó a River y no se presentó en la final por la permanencia ante Independiente de Neuquén.

Aquel elenco cordobés contaba en sus filas con el pivot Diego Osella y fue la temporada en que menos partidos disputó Héctor Campana, ya que luego de un excelente arranque (23 puntos de promedio) sufrió una grave lesión que no le permitió seguir y su planilla estadística quedó con solo cuatro encuentros.

Emanuel Niel
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