Lo condenaron los errores

En un partido mal jugado, friccionado y de resultado cambiante, los errores fueron decisivos.

Estudiantes de Bahía Blanca se confundió más que Obras Sanitarias y por eso los tacheros festejaron un apretado 89-86 que los mantuvo en la cima de la Zona Sur con dos victorias en igual cantidad de presentaciones.

El albo sumó más equivocaciones a lo largo de los 40 minutos. Lawrence Wallace tuvo un primer cuarto brillante con 8 puntos (1/1 en dobles y 2/4 en triples) y 3 asistencias. El extranjero, que había sido el motor del elenco bahiense en la primera parte, apenas jugó el segundo cuarto.

Misma situación ocurrió con Juan Manuel Torres. El pivot cumplió en el capítulo inicial con 6 puntos (3/5 en dobles), 3 rebotes, 1 bloqueo y mucha defensa. En el segundo cuarto sumó pocos minutos y su estadía en el banco coincidió con el destape de Lázaro Borrell.

También la visita mostró importantes errores en los minutos finales del juego. Con el encuentro 84-83 a favor de Obras, Wallace lanzó un piedrazo de tres puntos que no tocó ni el aro. El base, goleador de la visita con 18 unidades, no se quedó atrás y sumó una pérdida infantil que derivó en dos libres para Daniel Chaher cuando el partido estaba 86-83 a menos de 15 segundos.

Obras, que jugó poco con Tyler Field (4 puntos y 6 rebotes en 23 minutos) y mucho con Borrell (31 puntos, 15 rebotes y 3 asistencias en casi 39), aprovechó los regalos del rival y volvió a cantar victoria ante su público.

La crónica del juego indica que Estudiantes hizo mejor las cosas en el primer cuarto. En dicho período sumó mediante el tridente compuesto por Wallace-Torres-Gil para establecer una diferencia de 4 (23-19) y ganar los primeros diez minutos por 25-21.

Obras mejoró en el segundo cuarto gracias a la efectividad en los tiros de tres puntos (5/10). Borrell se encendió en ataque con 9 unidades para totalizar 15 al primer tiempo. Cristian Cortés (3 puntos y 2 asistencias) y Sergio Ravina (3 con 1/1 desde 6m25) aportaron soluciones desde el banco de relevos; aunque un gran ingreso de Pedro Franco (9 puntos y 2 rebotes) sirvió para que Estudiantes se quedara con la primera etapa (50-47).

Estudiantes salió mejor armado al tercer capítulo. Torres se esforzó en defensa y ganó la lucha de los pivots en base a bloqueos (culminó con 3). Mariano Franco tuvo efectividad desde el perímetro (6 con 2/3 en triples) y la visita se alejó. Obras, que corrió de atrás, redujo mediante Borrell, Titarelli y Calvi.

El local igualó en 63 en la primera jugada del último cuarto. Borrell (12 tantos en el período) se cargó el equipo al hombro y ayudado por las pérdidas de balón de su rival Obras sacó 4 (71-67). Estudiantes no se entregó y volvió a la carga con Gerardo Barrera y José Muruaga para cambiar el rumbo de la historia (74-73).

Daniel Chaher, al igual que contra Independiente de Neuquén, fue el salvador de los tacheros. El alero, que aportó 11 puntos en el cuarto, adelantó a Obras con una corrida a falta de 40 segundos (84-83). Wallace marró un triple y Borrell estiró la ventaja con dos libres (86-83 a 21 segundos).

En el cierre pasó de todo. Wallace perdió el balón y Chaher sumó 1/2 en libres (87-83 a 11 segundos). Mariano Franco le puso suspenso con un triple desde el córner derecho (87-86 a 7 segundos). Borrell fue a la línea y concretó sus dos libres (89-86 a 4 segundos). La última ofensiva fue para Wallace que desde 8 metros erró un triple que hubiese forzado la prórroga.

Síntesis
Obras Sanitarias (89): Fernando Titarelli 15, Gabriel Cocha 6, Jushay Rockett 5, Lázaro Borrell 31, Tyler Field 4 (FI), Daniel Chaher 18, Fernando Calvi 4, Cristian Cortés 3, Sergio Ravina 3. Entrenador: Bernardo Murphy.

Estudiantes de Bahía Blanca (86): Lawrence Wallace 18, Pablo Gil 9, Mariano Franco 13, Jamaal Levy 10, Juan Manuel Torres 11 (FI), Gerardo Barrera 5, José Muruaga 11, Pedro Franco 9, Leandro Cecchi 0, Nicolás Paletta 0. Entrenador: Guillermo López.

Parciales: 21-23, 26-27, 14-13, 28-23.
Progresión: 21-23, 47-50, 61-63, 89-86.
Jueces: Fernando Latorre y Oscar Brítez.
Estadio: Obras Sanitarias.

Foto: Gentileza Prensa Obras

Juan Manuel Rodríguez
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Fin de semana de locura

En un partido que se caracterizó en todo momento por su trámite cerrado, Gimnasia de Comodoro Rivadavia terminó cayendo como local anoche por 75-72 ante Quilmes de Mar del Plata.

Tras un primer cuarto con resultado favorable para Gimnasia, Quilmes comenzó a inclinar la balanza en el segundo parcial donde llegó a sacar una luz de nueve puntos, su ventaja máxima en todo el partido.

Gimnasia volvió a sufrir las ausencias de los lesionados Diego Alba y Diego Brezzo. Lo positivo es que creció el trabajo de Christopher Jackson en el juego interno, quien pese a perder algunos balones, terminó como goleador de la noche con 24 puntos. También lucieron en el local los goleos de Sebastián Festa con 13 y Zach Ingles con 11.

En la visita sobresalió la tarea de Ezequiel Dentis, autor además de 13 puntos. Con la misma producción resultó Autonio Reynolds mientras que Hernando Salles colaboró con 12. Pero la nota saliente resultó ser el debut del escolta Eduardo Villares, en su primer partido de la nueva campaña. El ex jugador de Ben Hur de Rafaela ingresó un par de minutos, suficientes para convertir un triple, tomar dos rebotes y perder un balón.

Gimnasia sobrecargó el juego en el pivote Christopher Jackson, quien desequilibró seguido en la pintura, y si bien en algunas ocasiones fue mejor tomado, el estadounidense terminó acumulando puntos, rebotes y además, faltas personales en los casilleros de sus defensores.

Pese al esfuerzo de Jackson (24 puntos y 20 rebotes, 8 de ellos en ataque), cuando éste pudo ser medianamente controlado, Gimnasia apeló al tiro de tres puntos con porcentajes muy variables (10 de 29, para un 34%) y, al igual que su oponente, penó desde la línea (60%) contra un todavía peor 42% que plasmó Quilmes.

Pero los marplatenses tuvieron, por turnos, buenos momentos de algunos de sus jugadores, que fueron claves en determinados tramos del juego. En la primera parte del encuentro fue Maximiliano Maciel, con puntos y asistencias; también tuvo un buen pasaje Antonio Reynolds, aunque luego tuvo problemas con las faltas; hubo una ráfaga interesante de tiro exterior en las manos de Nicolás Aguirre; y, aún ganando y perdiendo en la pintura, hubo un desempeño muy digno de Ezequiel Dentis (15 tantos y 10 rebotes, 4 ofensivos).

Después de mantenerse las cifras muy apretadas para cualquiera de los dos, casi siempre con Quilmes adelante, los marplatenses obtuvieron una renta de 74-67 que prácticamente aseguraba el resultado sobre el epílogo. El último esfuerzo de Gimnasia fue estéril y el “tricolor” se volvió a la ciudad pleno de euforia tras un fin de semana perfecto.

Síntesis
Gimnasia (CR) (72): Sebastián Festa 13, Zachary Ingles 11, Diego Prego 6, Christopher Jackson 24, Bruno Ingratta 8 (FI); Facundo Venturini 2, Matías Fioretti (x) 8 y Federico Mansilla 0. DT: Fernando Duró.

Quilmes (75): Hernando Salles 12, Mark Karcher 5, Maximiliano Maciel 11, Antonio Reynolds 13, Ezequiel Dentis 15 (FI); Nicolás Aguirre 10, Diego Romero 6 y Eduardo Villares 3. DT: Oscar Sánchez.

Parciales: 24-20, 13-23, 14-12, 21-20.
Progresión: 24-20, 37-43, 51-55, 72-75.
Árbitros: Osvaldo Baustista y Fabricio Vito.
Estadio: Socios Fundadores
Fuente: Diarios “El patagónico” y “La Capital”