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23/11/2007 17:26 | NBA

El balance de los argentinos

Estamos cerca del primer mes de competencia en la mejor liga del mundo y las realidades de los jugadores argentinos son algo diferentes ente si. Desde el liderazgo y excelencia de Ginóbili hasta los 9 minutos de Herrmann en Charlotte. Cada uno de los seis tiene un camino propio, y es buen momento de comenzar a repasarlo.
Autor:Sebastián Ciano (especial para Pick and Roll)

Ya se ha tomado como costumbre que cada año haya un nuevo compatriota en la NBA. Este año el que se sumó fue Luis Scola y la cantidad llegó a un récord de 6, una cifra que todavía causa cimbronazos en quienes veíamos como imposible esta realidad 10 años atrás.

Estamos viendo una temporada que, salvo en algunos casos puntuales, se presenta como pareja al menos en este primer tramo del año en el que los entrenadores empiezan a encontrar la química ente los jugadores, y los equipos comienzan a soltarse hasta encontrar, así, su juego que va a ser el que clarifique el verdadero nivel de cada uno.

Emanuel Ginóbili es “la” pieza de los Spurs en los primeros 12 partidos que llevan disputados. Siempre en su rol de suplente (de super lujo), el bahiense le está agregando constancia a su característica de multifacético que en tantos aspectos del juego ayuda a Gregg Popovich. Manu es el goleador del equipo con 20.5 puntos de promedio, lo que toma una dimensión superior si se tiene en cuenta que al lado suyo juegan Duncan y Parker, históricamente el 1 y 2 en ese rubro estadístico. Asimismo, tiene una media de 5.4 rebotes, 4.7 asistencias, 2.08 robos en 29.2 minutos por encuentro, tirando para un 48.6 % de cancha.

Estos números son los más altos de Manu en su carrera NBA, que va por el sexto año. Claro está que a ellos debemos agregarle valores no menores, como la capacidad de liderazgo dentro de un equipo multicampeón, la intensidad con la que defiende y lo que significa para los rivales. El mejor jugador argentino de todos los tiempos está en su punto más alto con el objetivo de lograr lo que San Antonio nunca pudo: Repetir un título.

Fabricio Oberto es su ladero en dicha consigna. El cordobés se afianzó en el quinteto inicial de San Antonio y parece haber encajado definitivamente. Más allá de su salto en el final de la 2006/2007, el ex Atenas mantiene un trabajo específico que cumple a rajatabla. Defiende, toma rebotes, pasa el balón, pone cortinas y aprovecha (muy bien) los pocos tiros al aro que le deja el trío dorado.

Oberto está promediando 5 puntos y 5 rebotes en 18.3 minutos por juego, y se convirtió en uno de los pilares de la tercera mejor defensa de la liga (los Spurs permiten 91 ppp), sobre todo a la hora de marcar a jugadores como Yao Ming o Dirk Nowitzki. En los choques entre los equipos texanos, Fabricio suele destacare en este aspecto.

Otra situación distinta es la que vive Carlos Delfino en su nueva casa: Los Toronto Raptors. Es el primer jugador, de esta camada de argentinos, en ser traspasado entre dos equipos NBA (Rubén Wolkowisky y Juan Ignacio Sánchez también jugaron en más de un equipo previamente), y la adaptación a un nuevo país (Canadá) y a una nueva franquicia parece ser buena. Bajo la dirección de Sam Mitchell, el santafesino está jugando mucho más tiempo de lo que lo hizo en sus tres primeros años en Detroit, con Mike Brown y Flip Saunders como Dt. Tiene una media de 25.2 minutos, cuando su máximo había sido 16.7, la pasada temporada.

En esta etapa de su carrera NBA, Delfino - al igual de lo que mostró en Las Vegas – no solo está colaborando en el goleo, su fuerte. Además de haber elevado su promedio de puntos (8), el escolta de la selección subió en rebotes (4.7), asistencias (1.3) y recuperos (1.3), combinándolo con un 42.2 % en tiros de tres puntos. Salvo los pases gol, son todos los mejores números desde su llegada a la NBA. Es posible que, con el correr de los partidos y un mejor funcionamiento de equipo, Carlos pueda sentarse aún más a una liga que le debe una oportunidad.

Andrés Nocioni está viviendo uno de los momentos más duros, en lo que tiene que ver con el equipo, de los últimos tres años. Los Bulls comenzaron muy mal la temporada (2-8) y parece que salir del pozo costará más de lo pensado. Para ello, Scott Skiles incluyó al santafesino como titular, desde hace 4 partidos (1-3), luego de haber estado los primeros 6 encuentros como suplente. El Chapu respondió con mejores números, pero el equipo no encuentra el funcionamiento.

Nocioni promedió 15.7 puntos en los partidos que comenzó en el quinteto inicial ante los 11.6 en los que empezó en el banco. “Debemos reaccionar rápido”, reclamaba el alero tras la derrota ante los Nuggets del pasado martes. Está claro que el cambio debe generarse desde adentro del propio grupo, que perdió confianza luego de ser considerados candidatos a las finales. Mientras tanto, el Chapu empieza a calentar motores con 13.3 puntos y 5.1 rebotes de media.

Asimismo, Luis Scola está experimentando esto de la NBA. Ya dio muestras de su potencial (preguntar en San Antonio y Phoenix) aunque también de que recién comienza a transitar este camino. Su promedio de minutos (18.9) no variará demasiado a lo largo del año, salvo una explosión extraordinaria. Rick Adelman, en su primera temporada como Dt de los Rockets, lo lleva de a poco pero sabe muy bien que las características del Luifa calzan perfectamente en su sistema, como así también que posee un jugador de una basta experiencia en el básquetbol europeo con el cual puede contar en momentos complicados. Hasta el momento, Scola está promediando 6.3 puntos y 4.2 tableros… y va por más.

Quizás el de peor presente, al menos en lo individual, es Walter Herrmann. Luego de ser uno de los referentes dentro de la cancha sobre el cierre de la 06/07, el Gringo se encontró con un nuevo técnico (Sam Vincent) que no lo está teniendo tan en cuenta como su antecesor, Bernie Bickerstaff. Los 9 minutos son muy escasos a los 19.5 que tuvo la temporada pasada. En la derrota del miércoles ante Washington en suplementario (114-111), el de Venado Tuerto metió 6 puntos, lo máximo para él en esta 07/08.

La llegada de Jason Richardson lo perjudicó, aunque Adam Morrison no estará por toda la temporada. Así y todo, su entrenador no le está dando mucha confianza. Con la llegada del ex Golden State, los Bobcats ganaron en jerarquía y esperan luchar por un lugar en los play-off, instancia a la que buscarán llegar por primera vez en su corta historia. Esperemos que Herrmann pueda dar una mano.


Sebastián Ciano
www.pickandroll.com.ar