Los jugadores de Quilmes se negaron a entrenar ayer por la noche, previa al importante juego de hoy aduciendo falta de pago. La dirigencia había prometido pagar ayer, pero lo harán el jueves. Esto derivó que los jugadores nacionales mayores tomaran la decisión de no entrenar pero si jugarán esta noche.
Autor:Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)
La deuda que tiene el club Quilmes con el plantel oscila entre el mes y medio y dos meses en algunos casos, aunque algunos jugadores están al día y otros tiene un contrato difícil de explicar en pocas palabras en una nota de opinión (como el de Diego Romero). Los dos extranjeros están al día y al menos ellos anoche deberían haber entrenado.
Lo único concreto es que los jugadores de Quilmes de esta temporada 07/08 han dado el último de los síntomas para terminar de redondear una campaña teñida de sinsabores, donde las malas fueron mucho más largas que las buenas.
¿Está mal que protesten su sueldo?. Jamás. Todos los trabajadores tienen derecho hacerlo, lo único que estos jugadores se olvidan que han firmado contrato con uno de los clubes con tradición de pagador más emblemáticos de la Liga. Ni yéndose al descenso con un equipo de figuras caras, dejó el tendal. Jamás tuvo apremios económicos en 20 años de historia y sus dirigencias han sorteados todo tipo de inconvenientes a lo largo de las diferentes crisis del país.
Es posible que esta situación se de por la falta de referente en el plantel. Con un Eduardo Dominé o con un Esteban De la Fuente dentro del grupo esta decisión absolutamente bochornosa (para los jugadores) no se hubiese tomado. Desconoce este grupo quien es Quilmes en la liga.
Hace un mes atrás, cuando Quilmes hervía por dentro y estaba más para el descenso que para los cuartos de final, una persona allegada al plantel me describió: “falta un líder positivo en el grupo, no lo hay. Por condiciones naturales debería ser Sebastián Porta, pero no juega y un líder debe jugar”.
Pero pasadas las tormentas, otra voz cercana me dijo: “Siempre se comportaron como un grupo unido, son un excelente conjunto de personas, deberían haber tenido mejor suerte durante la campaña, es una lástima que no les haya ido bien, lo único malo que es un grupo muy adolescente”.
La decisión de no entrenar a falta de 24 horas para un partido crucial para un play off revela exactamente su inmadurez para tomar decisiones. La deuda es poca, se acabaron los abonos de la temporada regular, los extranjeros están al día y entre hoy y el viernes entrarán 25 mil dólares de recaudación. Además Quilmes debe jugar dos partidos de local si o si.
Se podría entrar en terrenos de hipótesis sobre si los jugadores están o no alimentados por malos consejos, lo cierto es que demostraron que no saben donde están jugando. A mi juicio Quilmes tiene severos errores dirigenciales (de antes y de hoy), pero es la institución no sostenida por aportes del gobierno, ni de una sola empresa, ni del fútbol, con mayor prestigio de toda la historia de la Liga Nacional en materia de pagos detrás de Atenas. Club pagador como pocos.
De hecho el ingreso de Zanella en febrero como Sponsors dejará superávit para esta temporada. Según le dijo el dirigente Daniel Bonano ayer a Pick and Roll “Podemos tener inconvenientes financieros, pero nunca económicos, acá muchos de nuestros sponsors pagan a partir de enero en 10 cheques. La plata está, pero la cadena de pagos es así”
Una mala decisión de los jugadores, que acusan recibo además del vacío dirigencial que hoy tiene Quilmes. Solo un dirigente (y no siempre) se acerca a las prácticas y justamente Diego Maggi en su rol de manager deportivo cumple el rol de acercar a las partes. Aún sin referencias dirigenciales a la vista, no existen argumentos sólidos que refrenden la decisión que han tomado. Una mancha más en el marco de un campo de batallas.