El retorno del Rey

Ha sido un cimbronazo para la Liga Nacional. La competencia disfruta de la vuelta de un jugador que intimida con el peso de su apellido. Un apellido que vende entradas en el mundo del básquetbol: vuelve nada menos que Espil.

La pregunta que todos se hacen es ¿Qué clase de jugador vuelve a la Liga?. El propio bahiense se siente en la necesidad de explicar algunas cosas, como si fuera necesario aclarar situaciones por su edad “Aún con 39 años en Manresa me habían hecho un contrato por dos temporadas, lo que es una satisfacción personal. Sin embargo, en el club surgieron problemas económicos y eso precipitó mi regreso”.

Y es la primera verdad que surge ineludible. Si como decía Einstein “Dios no juega a los dados” se sabe que en la ACB, la mejor liga FIBA del mundo, tampoco. Todo es muy pensado y profesional. Es allí que lo que dice Espil cobra significativo valor. A los 39 años le firmaron un contrato por dos temporadas. Entendiendo además que no es un pivote de 2.10 que puede jugar parado, sino un escolta que debe sufrir la voracidad del desgaste que su puesto provoca.

Espil es conocido por haber dejado en las canchas argentinas su inagotable puntería. Se fue de la liga tras nueve temporadas donde promedió un increíble porcentaje de 41,6% en triples y 25,1 puntos por juego.

De todos modos no será eso lo que necesita el técnico, porque está claro que tampoco Espil lo pueda volver a brindar. Así lo explica el técnico Oscar Sánchez en charla con Pick and Roll “Yo pretendo con Espil ganar vestuario, respeto con los árbitros, ascendencia el plantel, no es fácil armar un equipo nuevo. Salvo Peñarol y Libertad, el resto de los equipos deben armarse y todos saben que es muy difícil. Para hacerlo se necesitan jugadores que sepan de básquet y jugadores inteligentes. Espil reúne todos los requisitos”.

Luego profundizando lo que puede dar en cancha Sánchez reconoce que “No necesito un jugador de 40 puntos. Esta Legaria, Edwards y Gaby Fernández. Espil me tiene que dar otras cosas. Para los 20 a 22 minutos que deben jugar la intención no es sumar un goleador, sino un jugador que haga mejor al equipo”.

Las palabras del técnico se ven refrendadas por las del propio jugador que en declaraciones al sitio oficial lnb.com.ar acepta que “….cambió mi forma de jugar. En la Liga Nacional aprendí a jugar, pero me hice mejor jugador en Europa. Cuando estaba acá era un jugador egoísta, las tiraba todas y no importaba nada. Por eso gané muy pocos torneos. En ese aspecto cambié. Ya no me interesa tanto tirar, si no que el equipo juegue como tal y que funcione, y yo hacer lo que el equipo necesita. Los más de diez años en Europa me hicieron ver que así se juega al básquetbol”.

De este modo, Boca Juniors suma su sexto nacional mayor para la próxima temporada: Raimundo Legaria, Juan Espil, Leandro Masieri, Fernando Calvi, Alejandro Alloati y Gabriel Fernández. Sus dos extranjeros serán Carl Edwards y Mark Boltz. Como juvenil ya esta confirmada la participación de Nicolás Aguirre.

Pablo Tosal
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