Ciclista dio la nota

Comienzo tibio

A media maquina, tibio, comenzó Peñarol la copa Argentina. Lógicamente fue apenas su primer partido de pretemporada. Lo mismo para Argentino de Junín que dejó una mejor imagen y jugó con cuatro menos. La victoria milrayitas fue 67-58.

El primer cuarto fue muy parejo hasta los dos minutos finales. Las imprecisiones lógicas del primer partido de la temporada para ambos equipos. Las defensas no eran tan asfixiantes como las torpezas ofensivas. Pelotas que se iban entre los dedos y las telarañas de una maquinaria que recién empieza a moverse.

Peñarol ganaba 11-10 cuando un triple de Tato Rodríguez comenzó un parcial 10-2 que se cerró con un triple del recién ingresado José Muruaga. El retorno de “Pepe” a Peñarol no podría haber sido más auspicioso. En la primera pelota que tocó la mandó adentro desde el lugar que más cómodo le queda. La diferencia se hizo excesiva (21-13) al final del primero cuarto, por la paridad de los anteriores 8 minutos.

El segundo cuarto se le hizo cuesta arriba al milrayitas. Apareció Alejandro Diez imponiendo su oficio en la pintura pero Peñarol tuvo problemas con la marca de Edwards. En realidad los mayores problemas del local fueron detrás de su ofensiva, sobre todo cuando no convertía volvió a defensa muy mal parado y Argentino le puso mucha velocidad a su ofensiva. De apoco la distancia se fue acortando.

El reingreso de Cansina le hizo mucho daño a la defensa de Peñarol y la visita pasó al frente por primera vez 30-31 con un parcial (9-18). Los últimos tres minutos del primer tiempo no sólo conservó la delantera sino que amplió la ventaja (31-35). La parte más negra de Argentino fue la lesión de Sebastián Cacciola. El pivote se lesionó en el primer tiempo y se sumó a sus tres compañeros que no pudieron estar: Selem Safar (esguince), el pibe Pablo Espinoza (problemas en su talón) y Leo Peralta (desgarro). Además a Argentino todavía le resta incorporar una ficha mayor más. Mucha ventaja.

Peñarol salió con más ganas para defender en el segundo tiempo pero con la misma impericia ofensiva. Argentino fue mucho más efectivo para sacarle provecho al ataque rápido y sacó 5 (34-39). Sólo Tato Rodríguez y sus triples (dos) mantenían con vida al local. Una corrida de 7-1 le devolvió la delantera a Peñarol (41-40) que luego se hizo más amplio hasta llegar al 14-1 (48-40). El secreto fue uno sólo: generó un bloque defensivo que se cerró sobre su tablero.

Edwards que metió 11 en el primer tiempo, apenas marcó 1 punto en el tercer cuarto y erró todo lo que tiró (y tiró mucho). Argentino jugando cinco contra cinco no supo como ingresar a la defensa. Peñarol con la mejoría defensiva atacó más prolijo y terminó 8 arriba al cierre del tercero (50-42). El asistente de Hernández, Fernando Rivero, apenas hizo un cambio en todo el cuarto en el final del segmento (el ingreso de Ale Diez por Reinick).

Argentino tardó dos minutos en abrir el marcador en el último cuarto mediante un tiro libre y Peñarol sacó la máxima (54-42). Desde allí con el marcador a su merced dominó las acciones. Byron Johnson se encargó de sacudir la modorra con algunas lindas volcadas y darle al partido un poco más que el aburrido carácter de amistoso de pretemporada que mostraba.

Apagado Edwards en Argentino, su equipo no encontraba ningún nacional que se hiciera cargo de la ofensiva y su rotación en el segundo tiempo apenas fue de 6 jugadores. A falta de 3 minutos y medio los de Junín lograron descontar la ventaja a solo siete puntos (60-53) merced al aporte de Sureda, Scala y Aguerre. Luego con el tablero con diferencia de 6 (62-56) Slider erró un doble con mucha soledad para ponerse a 4 cuando todavía faltaban dos minutos y medio.

Argentino luchó hasta el final para ponerle un poco de incertidumbre al resultado. Los rebotes defensivos en Peñarol negaron segundas chances y ayudó a construir la primera victoria de la temporada. Sin lucir, sin esperar que lo haga tampoco. Apenas la presentación.

Síntesis
Peñarol (67): Sebastián Rodríguez 9, David Jackson 13, Marcos Mata 8, Byron Johnson 17 y Alejandro Reinick 5 (FI) Alejandro Diez 5, José Muruaga 8, Lucas Piccarelli 2. DT Fernando Rivero

Argentino (J) (58): Federico Sureda 12, Jonatan Slider 2, Ryan Edwards 12, Federico Aguerre 13 y Sebastián Cacciola 2 (FI) Juan Cansina 9 y Santiago Scala 8.

Parciales: 21-13, 31-35, 50-42
Árbitros: Alejandro Ramallo y Alberto Ponzio
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas (800 espectadores)

La frialdad de Wilson definió un partido muy equilibrado

Apenas necesitó permanecer doce minutos en la cancha para que el veterano Byron Wilson exhibiera todo su talento y pusiera, en esa pequeña franja, la serenidad que pedía a gritos un equipo verdirrojo acelerado al máximo, para volcar el triunfo a favor de Ciclista. Con dos libres impecables, cuando faltaban 15,2 segundos, el estadounidense dio vuelta el tablero, que hasta ese momento favoreció a la visita por 69 a 68. En la última pelota, Quilmes no consiguió vulnerar la cerrada defensa del quinteto local, equipo que se quedó con el primer encuentro del Grupo V de la Copa Argentina.

El cotejo tuvo una característica nítida al cabo de los cuarenta minutos: enorme equilibrio. Sin embargo, fue el conjunto juninense quien en mayores períodos se mantuvo en el dominio del tanteador, aunque sin sacar diferencias pronunciadas. En dos oportunidades, apenas, Ciclista estiró la ventaja a seis unidades: en el segundo cuarto (26-20) y en el último (60-54). En la segunda parte, especialmente, el juego se hizo intenso, con mucha marca y los dos pasaron al frente del score, sin bien por mínimos guarismos.

¿Por qué ganó Ciclista? El elenco de Hernán Laginestra basó su conquista en la marca pegajosa de su defensa, sin mezquinar esfuerzos y talentos individuales (como el de Bruno Oprandi, por ejemplo). Quilmes también marcó bien, pero la diferencia estuvo en los desbordes individuales del local, a través de las conversiones de un Pablo Moya imparable, la eficacia de Alejo Barovero y las intermitencias de un importante de Hakeem Rollins, al margen de lo ya expresado: la frialdad de Wilson para hacer todo con la mayor sencillez.

Al cervecero marplatense no le alcanzó la categoría y experiencia de algunos de sus hombres (Pedro Calderón, Ezequiel Dentis y Esteban López) para dominar el encuentro. Los más claros chispazos en ataque estuvieron en manos del juninense Nicolás Romano.

Cuando el equipo dirigido por Esteban de la Fuente empezó a darse cuenta que su adversario de menor “categoría” le estaba costando más de lo imaginado, ya no pudo encontrarle la vuelta, pese al goleo intacto de Pablo Gil, un tanto desordenado en el juego de conjunto, pese a sus 21 puntos.

El canadiense Duane John, que apareció en el escenario casi la mitad del partido (19 minutos), tuvo una participación muy discreta. Fue él, precisamente, quien se demoró más de la cuenta con la pelota, en la última maniobra del encuentro, después de los certeros libres de Wilson.

Síntesis
Ciclista (70): Bruno Oprandi 9, F. Elías Saad (x) 2, Alejo Barovero 12, Pablo Moya 15 y Hakeem Rollins 13 (FI) Franco Balbi 6, Alejandro Konsztadt 2, Nicolás Boeri 0, Byron Wilson 11. DT: Hernán Laginestra

Quilmes (69): Leandro Capitanich 2, Pablo Gil 21, Maxi Maciel 4, Pedro Calderón (x) 17, Ezequiel Dentis 4 (FI) Nicolás Romano 8, Hernán Salles 2, Esteban López 4, Duane John 7 y Facundo Piñero 0. DT: Esteban de la Fuente

Parciales: 19-12; 34-33 y 55-51
Gimnasio: “Coliseo del Boulevard”.
Árbitros: Mario Aluz-Rodrigo Castillo.
Crónica: Diario la Verdad de Junín


Esos locos bajitos.

Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia derrotó e El Nacional-Monte Hermoso en el inicio de la Copa Argentina. El encuentro que se disputó en el Socios Fundadores de Comodoro Rivadavia finalizó 82 a 71.

El elenco que orienta tácticamente Nicolás Casalánguida lo resolvió a partir del tercer cuarto con una buena tarea de los perimetrales. Los primeros 20 minutos fueron típicos de partidos de pretemporada con yerros, equivocaciones y aciertos normales.

Los primeros aplausos del poco público, los arrancó Germán Sciutto por su despliegue defensivo sobre Wadley, por llegar en ayuda de todos los que vestían casacas verdes y porque en ataque--pese a no convertir--aportaba mas que los que anotaban, ya que cortinó a todos, bloqueó y además generó espacios para que los demás quedaran solos bajo el canasto visitante.

Alba cuando jugó para los cuatro restantes, aportó lo suyo y Ferreira se perfila como un sexto hombre quemas interesante. Los bonaerenses lucharon en la primera etapa de la mano de Castiñeira, con Gómez sumando mientras tuvo aire y Venturini sumando como nunca en su carrera.

En los últimos cuartos el local le encontró la vuelta para escaparse y comenzar a edificar la victoria. Ingratta se sacrificó en los dos canastos, Romero encontró espacios ante la salida de Gómez, Wadley se fue rápido por faltas y los del banco de García aportaron poco.

Los locales jugaron mejor lejos del cesto y Buchanan clavó tres triples para abrir la defensa de la visita.

El final fue tranquilo para el local manejando el partido ya que el resultado a partir del inicio del último cuarto ya estaba cantado.

Auspicioso y alentador lo de Gimnasia y Esgrima en lo defensivo, en la actitud y en el juego perimetral. El trabajo arduo que le espera al cuerpo técnico patagónico es bajo los canastos. Boston no vino en su mejor forma y le cuesta--al igual que la Liga pasada--cuando aparece en cancha tipos más altos que él. Romero aún no termina de consolidar lo que amaga ser, Alessio sigue desaprovechando opciones (fue titular) y Morales es aún un proyecto.

Se fue meditando el de Monte Hermoso debido a que si Wadley no anota (lo borró la marca local) no aparece alguien para lastimar el cesto rival. Mucho mas no dejó la noche. Solo ratificar que este fue el primer partido amistoso, de pretemporada, del local. En un juego inventado para gente alta sobresalieron los más bajos.

Síntesis:
Gimnasia (82): Diego Alba 13, Germán Sciutto 6, Gary Buchanan 18, Diego Romero 15 y José Alessio 2 (FI); Jimmy Boston 9, Nicolás Ferreyra 8, Bruno Ingratta 3 (x) y Mariano Franco 8. DT: Nicolás Casalánguida.

El Nacional (71): Fabián Sahdi 11, Quincy Wadley (x) 8, Sebastián Castiñeira 14, Dionisio Gómez 12, Ramiro Heinrich 2 (FI); Facundo Venturini 11, Santiago González 7, Alexis Elsener 4 y Gastón Torre 2. DT: Juan Andrés García.

Árbitros: Roberto Smith y Julio Dinamarca.
Parciales: 18-19, 37-41 y 59-50.
Estadio: Socios Fundadores – Comodoro Rivadavia

Ricardo Scazzino
Especial para www.pickandroll.com.ar


Arrancar siempre cuesta

Si bien ambos planteles dieron signos de encontrarse en plena preparación para la Liga Nacional, fue Bahía Blanca Estudiantes el que hizo mayores méritos para quedarse con el partido ante Independiente, por 83 a 67.

El primer cuarto comenzó mejor para Independiente. El rojo supo aprovechar el buen porcentaje que halló en sus tiros triples y promediando el primer acto sacó una buena luz de diferencia (12 a 3). Estudiantes necesitó pedir minuto para corregir los errores en su canasto, y fue otro a partir de allí.

El albo resolvió mejor las situaciones que le planteó su rival, y en ataque comenzó a encontrar variantes. El visitante perdió la puntería de los primeros minutos y al cerrarse el primer periodo el trámite volvió a posarse sobre la paridad, yéndose al primer descanso igualados en 17.

Con más sustituciones y buscando opciones tanto en el cilindro de enfrente como en el propio, los segundos 10 encontraron mejor parado al elenco bahiense. El cuadro neuquino siguió sin una brújula que le indique un norte convincente, y con el correr del cuarto el dueño de casa se terminó de afianzar, culminando el embate con el pedido de minuto por parte de Santángelo.

El entrenador visitante hizo ingresar por primera vez en el juego a Cedric Moodie, y el ex Peñarol llevó al parquet consigo las respuestas que su equipo necesitaba. Tomando muchas decisiones, sobre todo a la hora de lanzar, el americano atrajo marcas, liberó a sus compañeros y le planteó variantes a una plantilla que hasta allí no las había conseguido. Con él dentro, el rojo quedó a tres (29 a 26, a 3:52).

Estudiantes despertó a tiempo. Pasó bien el balón en el juego estacionado y trabajando los 24 segundos obtuvo sus dividendos: una ráfaga desde 6.25, un par de buenas defensas y la disipación de los nubarrones que se le habían generado, para irse al descanso largo con una diferencia de diez puntos a su favor, 41 a 31.

En el regreso de vestuarios las acciones no variaron mucho. El dueño de casa siguió corriendo cada vez que pudo, y con un muy buen cuarto de Jamaal Levy, los dirigidos por Marcelo Richotti se aseguraron una buena distancia al ingresar al último acto.

Independiente por su parte no encontró los caminos hacia el canasto, y tampoco pudo frenar de raíz los inconvenientes que se le volvieron a presentar en su cilindro. Por simple las armas de su rival no dejaron de ser efectivas, y en una sistemática búsqueda de la penetración, para luego descargar y volver a poner el balón en la pintura, el bahiense encontró el talón de Aquiles del visitante.

El cuarto periodo no duro mucho. Estudiantes no le permitió revivir al cuadro sureño en el arranque de los últimos 10 minutos y con eso ahogó toda posibilidad de resurrección del huésped. Sobre el cierre, con la máxima brecha entre ambos concretada (80 – 60) hicieron sus debuts los juveniles estudiantiles Cristian Aguiar y Matías Martínez, y con ellos en cancha el albo pudo sonreír en la primera fecha de la Copa Argentina.

Síntesis
Bahía Blanca Estudiantes (83): Pedro Franco 13, Juan Manuel Rivero 13, Lucas Bianco 6, Gerardo Barrera 2 y Jamaal Levy 19 (inicial); Juan Cangelosi 12, Leonardo La Bella 2, John Whorton 12, Leandro Cecchi 4, Cristian Aguiar 0 y Matías Martínez 0. DT: Marcelo Richotti.

Independiente (67): Agustín Carabajal 8, Federico Marín 12, Juan Levrino 6, Jervaughn Scales 6 y Pablo Heit 0 (inicial); Brice Assie 16, Leandro Lauro 4, Martín Melo 10 y Cedric Moodie 5. DT: Mauricio Santángelo.

Parciales: 17 – 17 / 41 – 31 / 61 – 45.
Árbitros: Tarifeño – Leyton.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.

Crónica: Emanuel Niel (eniel@pickandroll.com.ar)