Santa presión

El encuentro inició con mucho vértigo por parte de ambos elencos, aunque este ritmo era propuesto por el dueño de casa y sin convenirle, el visitante buscó tomar las riendas de las acciones de la misma manera. La presión impuesta por los orientados tácticamente por Gustavo Miravet dio resultado, y a través de una buena eficacia en sus tiros de campo, los anfitriones se distanciaron en el tanteador.

Unión buscó a través de la zona frenar los embates de su rival, pero la conducción de Brusino, la presencia rebotera en el cristal ajeno y un par de aciertos detrás de la línea de 6.25 le aseguraron a San Martín cerrar los primeros diez minutos con una ventaja de 8 unidades, 26 a 18.

Ya en el segundo acto, el bicho verde logró hacer valer su resguardo, y a partir de allí, generándole pérdidas y aprovechando un buen momento de Martín, llegó a ponerse a un punto de distancia. A diferencia del cuarto anterior, el gaucho no tuvo tanta eficacia y por ende, tuvo mayores problemas a la hora de atacar una defensa zonal que no se había mostrado tan sólida durante los primeros diez minutos.

La historia fue otra cuando los conjuntos retornaron de los vestuarios. A la hora de mantener su libreto a raja tabla, el cuadro de la provincia de Córdoba prevaleció, y su golpe le dio un quiebre definitivo al cotejo. A través de un parcial de 18 a 4, en el cual los celestes se mostraron avasalladores de la mano de un encendido Belvedere, la brecha entre ambos equipos estuvo cercana a las 20 unidades y a partir de allí el trámite del juego se modificó.

Con una distancia no vista hasta ese momento, a los de Ardúh les ganó el nerviosismo y las impresiones, al tiempo que los de Miravet no se marearon y supieron cerrar el tercer chico 14 unidades arriba, 68 a 54.

El último acto no modificó el curso impuesto en su antecesor. Si bien Unión buscó por todos los medios acortar la distancia en relación a su contrincante y llegar en partido a los últimos instantes del match, San Martín fue inteligente, continuó utilizando las armas que a lo largo de la noche le fueron dando resultado (rebote en ataque, eficacia perimetral y goleo repartido) y con el reloj a su favor se aseguró la victoria.

Este encuentro, que abrió la octava fecha de la segunda fase, terminó de confirmar que el santo cordobés se encuentra en levantada, llegando a su segunda alegría en fila, al tiempo que el bicho verde vive su peor momento de la temporada, con tres derrotas en cadena, lo que le podría costar compartir la punta del TNA1, siempre y cuando Ciclista como visitante el viernes consiga la victoria.

Síntesis

San Martín (MJ) (88): Juan Brusino 11, Diego Belvedere 18, Gastón Sieiro 10, Francis Nwankwo 15 y Diego Brezzo 11 (inicial); David Cabezas 0, Germán Bernhardt 6, Mauro Bulchi 11 y Facundo Ortega 6. DT: Gustavo Miravet.

Unión (79): Gustavo Martín 11, Jorge Toriano 3, Mario Sepúlveda 5, Michael Robinson 17 y Cristian Amicucci 14 (inicial); Gastón Luchino 11, Facundo Brizuela 8 y Miguel Isola 10. DT: Osvaldo Ardúh.

Parciales: 26 – 18 / 42 – 38 / 68 – 54.
Árbitros: Moral – Zanabone.
Estadio: Leonardo Gutiérrez.

Emanuel Niel
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